Un 63,1% de las personas con discapacidad, afirma que, incluso teniendo empleo, no podrá irse de vacaciones. id:49214
En España durante el primer trimestre de 2019 se realizaron un total de 41,8 millones de viajes, un 2,8%* más que en el mismo período de 2018. El 90% de estos viajes se han realizado dentro de nuestro país, siendo el ocio, recreo y vacaciones el principal objetivo de los mismos, y en segundo lugar las visitas a familiares o amigos. Y según los últimos datos del Consejo Mundial de Viajes y Turismo, el turismo en España ya significa el 14,6% del PIB nacional.
Estos datos, ofrecidos por el Instituto Nacional de Estadística, consolidan una tendencia clara: la sociedad española viaja cada vez más y dispone de más recursos económicos para destinar al ocio. A través de la encuesta Vacaciones y Discapacidad, la Fundación Adecco ha preguntado a 300 personas con discapacidad cómo hacen frente al período estival y, en concreto, cómo afrontan las vacaciones. El objetivo es conocer cómo las personas con discapacidad contribuyen al impacto del turismo en España, qué dificultados encuentran a la hora de disponer de recursos para el ocio, qué potencial tiene la accesibilidad en nuestro país y qué papel juega el empleo de las personas con discapacidad en el turismo.
La falta de recursos, principal motivo que imposibilita irse de vacaciones
La encuesta Discapacidad y Vacaciones que ha realizado la Fundación Adecco ha sido respondida por 300 personas con diferentes tipos de discapacidad: discapacidad física, psíquica, intelectual, orgánica, auditiva, visual y pluridiscapacidad.
Un 34% de los encuestados afirma estar trabajando en estos momentos, frente a un 66% que dice estar en situación de desempleo. En esta línea, la tasa de paro de personas con discapacidad en España es del 26,2%.
De las personas con discapacidad que estos momentos disponen de un empleo, un 37% afirma que podrá ir o se ha ido de vacaciones, y un 63% de los encuestados, a pesar de tener trabajo, indica que no podrá realizar ningún viaje o disponer de días de vacaciones. Existen dos razones principales que responden a esta situación: en primer lugar, porque aprovechan la estacionalidad para poder trabajar durante el verano, sobre todo en aquellos sectores con más demanda de empleo como puede ser el sector servicios. Y en segundo lugar que, a pesar de tener empleo, su inestabilidad laboral les impide poder ir de vacaciones o prefieren no invertir sus recursos en actividades de ocio. Aquellas personas con discapacidad que actualmente se encuentran en situación de desempleo, un 60% comenta que no puede hacer frente al pago de unas vacaciones. No obstante, un 40% sí que, a pesar de estar en el paro, podrá disfrutar de vacaciones.
La encuesta Discapacidad y Empleo ha preguntado a todos aquellas personas con discapacidad que no han podido ir de vacaciones, independientemente de tener o no empleo, cuál ha sido la principal razón que les ha impedido realizar vacaciones en forma de viaje. En un 70% de los casos la falta de recursos económicos ha sido la principal razón que les ha impedido tener unos días de descanso, y para un 25% de los encuestados, el verano es la época del año que les brinda la oportunidad de poder trabajar. Finalmente, aprovechar el verano para formarse y estudiar o la falta de compañía también han sido factores relevantes a la hora de tomar la decisión de renunciar a unas vacaciones.
¿Cómo viajan las personas con discapacidad?
A nivel general el gasto total de los residentes en España en viajes ha sido de 8.317 millones de euros, un 5% superior al ejercicio anterior. Viajes en los que el español ha gastado de media unos 53 euros al día por viaje dentro del país y 107 euros en viajes al extranjero*. Aquellos que, si han podido o van a poder disfrutar de vacaciones, han sido preguntados sobre cuál ha sido la fuente de financiación de sus días de descanso. La mayoría, independientemente de tener un empleo han utilizado los ahorros para pagar sus vacaciones (36%), un 31% ha decidido pagarlo directamente con los ingresos de su trabajo y en tercer lugar un 31% ha pedido ayuda económica a familiares para poder irse de vacaciones.
De las personas en España con discapacidad que se irán de vacaciones, 6 de cada 10 lo han hecho dentro del territorio nacional, 2 de cada diez lo están haciendo dentro de su comunidad autónoma, y finalmente otros dos de cada diez ha optado por un viaje internacional. El 60% de los encuestados nos indica que viajará con su familia, como segunda opción principal escogen como acompañantes la pareja o los amigos, y finalmente, destaca también aquellos que contemplan como opción, aunque minoritaria, viajar solos.
Continuando con el tipo de turismo predominante en España, las personas con discapacidad han decidido de una forma clara apostar en un 67% de los casos por el turismo de sol y playa, seguidos del turismo rural y cultural, sin olvidar un creciente interés por el turismo gastronómico.
Verano en la ciudad
En la encuesta Discapacidad y Vacaciones también ha preguntado a aquellos, que por diferentes motivos finalmente no han podido realizar ningún viaje durante las vacaciones, como han planteado el ocio dentro de su ciudad.
La mayoría de ellos realizarán actividades de ocio dentro de su entorno local, y en concreto un 70% realizará actividades de ocio adaptadas para personas con discapacidad. Destacan sobre todo piscina en un 60% de los casos, seguido de museos, parques de ocio, museos y turismo local. A pesar de la oferta de turismos inclusivo que ofrecen muchos ayuntamientos en España, cabe destacar que casi un 20% no es conocedor de la oferta de ocio inclusivo disponible en su municipio.
El potencial del turismo inclusivo
En España, el mercado potencial del turismo accesible se sitúa en 5.968.261 ciudadanos (personas con discapacidad, acompañantes, etc), de los cuales, un 56% admite no salir de vacaciones por falta de accesibilidad en alguno de los puntos del ciclo del viaje, según el informe El mercado potencial del turismo accesible para el sector español, de Accesturismo.
Si se adaptaran todos los entornos y servicios de los traslados y destinos podrían recuperarse 3.342.226 turistas con necesidades de accesibilidad, lo que se traduce en una estimación de 90.806 nuevos puestos de trabajo. Si a ello añadimos una aproximación de 14.000 contratos que se crearían en el ámbito de la Información y Comunicación accesible, el potencial de empleos que podrían generarse ascendería a 104.806, rompiendo además con toda la inestabilidad del sector turístico.
En un entorno europeo de envejecimiento, no apostar por la accesibilidad en el turismo (sinónimo de comodidad) es una pérdida de oportunidad y,competitividad que, no podemos dejar escapar. No solo, personas con discapacidad sino personas mayores jubiladas con gran esperanza de vida y, condiciones de salud magnificas que podrían contribuir de manera sostenible al mantenimiento del empleo en un sector, hoy por hoy, estacional. Sin duda, un nicho de mercado que se puede permitir viajar fuera de la temporada alta.
Según Francisco Mesonero, director general de la Fundación Adecco: “En primer lugar, que las personas con discapacidad dispongan de recursos económicos para las vacaciones sería la natural consecuencia a su integración laboral y, en segundo lugar, un signo muy evidente de su inclusión social y su desarrollo integral. La posibilidad de tener un empleo y de realizar turismo se erigen como una dualidad básica de realización personal de todo ciudadano de nuestro país”.