Llevamos tiempo diciendo que el BCE va muy atrasado en lo que se refiere a subir los tipos de interés en el actual ciclo mundial de endurecimiento de la política monetaria, y que la configuración de la política existente no se ajusta a la realidad económica. El informe de inflación de mayo de la eurozona nos dio la razón, ya que mostró que el crecimiento de los precios al consumo había alcanzado un nuevo récord por encima del 8%. Dado que las presiones inflacionistas siguen aumentando y que los últimos datos de actividad económica se mantienen bastante bien (concretamente las cifras del índice PMI de actividad empresarial de mayo), los mercados no dudan de que este verano se producirá una subida de tipos.
¿Qué podría anunciar el BCE esta semana?
No se espera que se produzca ningún cambio en los tipos de interés en la reunión de esta semana, de hecho lo vemos muy poco probable. Esto no es un reflejo de las condiciones macroeconómicas, sino que dado el compromiso del banco de terminar con las compras netas de activos antes de empezar a subir los tipos de interés se trata simplemente de una consecuencia cronológica. Sin embargo, la presidenta del BCE, Christine Lagarde, confirmó a finales de mayo que efectivamente las subidas estaban en camino. Lagarde señaló que esperaba que las compras netas de activos en el marco del APP iban a terminar "muy pronto, en el tercer trimestre" y que el BCE "probablemente estaría en condiciones de abandonar los tipos de interés negativos a finales del tercer trimestre". Creemos que esto garantiza que el BCE anunciará el fin formal del programa APP el 1 de julio, allanando así el camino para una primera subida en más de una década en la reunión del Consejo de Gobierno del 21 de julio.
La cuestión real de cara a la reunión de esta semana no es si el Consejo de Gobierno subirá o no los tipos de interés en julio, sino en qué medida lo hará. Los mercados financieros consideran seguro un movimiento de al menos 25 puntos básicos tras las recientes declaraciones de Lagarde, con dos subidas de al menos un cuarto de punto porcentual tanto en la reunión de julio como en la de septiembre como requisito previo para salir de los tipos negativos a finales del tercer trimestre. También hemos visto comentarios hawkish por parte de otros miembros del BCE, especialmente el economista jefe Philip Lane, que también se comprometió a realizar movimientos de 25 puntos básicos en julio y septiembre. Los inversores consideran que esto es lo mínimo para la reunión de esta semana.
Existe una facción dentro del Consejo de Gobierno que parece estar a favor de medidas más agresivas, entre los que se incluyen los miembros Knot y Holzmann. Los mercados estarán interesados en ver si esto es sólo la opinión de unos pocos o algo compartido dentro del consejo. Sospechamos que la mayoría apoyará una menor subida de tipos para empezar, aunque creemos que los responsables de la política monetaria estarán abiertos a discutir subidas de 50 puntos básicos en las próximas reuniones. Si el BCE indica el jueves que es posible que se produzcan subidas mayores en el segundo semestre, esto se consideraría una clara señal alcista para el euro.
Es probable que se produzca una nueva revisión al alza de las perspectivas de inflación
Además de los comentarios sobre los tipos de interés, las proyecciones macroeconómicas actualizadas del banco serán miradas con lupa por los inversores y podrían generar volatilidad en torno al euro durante la jornada. Los indicadores de inflación de la zona euro han seguido sorprendiendo al alza en los últimos meses, por lo que es probable que esta semana se produzca otra revisión al alza de las previsiones de inflación del BCE para 2022. El aumento de la inflación subyacente hasta el 3,8% en mayo indica que las presiones sobre los precios se están ampliando, mientras que la subida de los precios de las materias primas y el debilitamiento del euro desde la última serie de previsiones de marzo también contribuyen al aumento de la inflación. Esperamos que la previsión de la inflación media del IPCA se revise por encima del 6% para 2022 (desde el 5,1%), con posibles modestas revisiones al alza para 2023 y 2024.
Los riesgos a la baja para el crecimiento también se han intensificado, debido especialmente al fuerte aumento de los precios internos y a la interrupción en el suministro energético ruso. Sin embargo, destacamos que los datos de actividad económica se han mantenido relativamente bien, lo que sugiere que los temores sobre una recesión en la zona euro a finales de año son quizás algo exagerados. Esperamos que esto se refleje en una rebaja ligeramente más moderada de las perspectivas de crecimiento para 2022 y 2023 de lo que muchos economistas prevén actualmente. Dicho esto, el pésimo historial del BCE en este ámbito probablemente implique que las proyecciones serán mayormente ignoradas por los mercados.
¿Cómo podría reaccionar la moneda común?
Creemos que el jueves el BCE mantendrá la puerta abierta a todas sus opciones, aplazando el debate sobre la magnitud de la subida de tipos de julio hasta la próxima reunión. En el momento de escribir estas líneas, los mercados dan por hecho un movimiento de 25 puntos básicos en el tipo de depósito el próximo mes, con una probabilidad aproximada de una subida de 50 pb de uno entre tres. Si Lagarde mantiene abierta la posibilidad de esto último, podríamos ver un apoyo al euro el jueves por la tarde, ya que los mercados aumentarán sus expectativas de subidas en toda la curva. Por el contrario, un enfoque más cauto en materia de tipos, que tal vez suscite nuevas preocupaciones sobre las perspectivas de crecimiento y los riesgos de recesión, se consideraría bajista para la moneda común.
En última instancia, creemos que el BCE tiene margen para superar las expectativas del mercado este año, lo que nos parece positivo para el euro. No obstante, este margen se ha reducido en las últimas semanas, ya que los swaps prevén subidas de alrededor de 130 puntos básicos a finales de año (frente a los 50 de principios de abril).
La decisión del BCE se anunciará este jueves a las 13:45 (CET), y la rueda de prensa tendrá lugar 45 minutos después.