Comienza la temporada de resultados del primer trimestre

Por otro lado, los datos del PMI de abril fueron mejores de lo esperado. Se temía que la actividad se ralentizara en Europa, pero se ha mantenido gracias al levantamiento de las medidas sanitarias y a la acumulación de existencias en previsión de una posible escasez o un aumento de los precios. Por su parte, el FMI recortó sus previsiones de crecimiento mundial del 4,4% al 3,6%. Un tercio del descenso se debe a la esperada caída de Rusia.

Los comentarios de los responsables de los bancos centrales siguieron pesando en los mercados de bonos y acciones. En la cumbre del FMI, Jerome Powell confirmó que la Fed quería volver rápidamente a una postura monetaria normal y que eran probables varias subidas de 50 puntos básicos. James Bullard incluso abogó por 75 pb. En Europa, los yields de los bonos y el euro subieron después de que el vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, dijera que era posible una subida de tipos en julio.

El buen comienzo de la temporada de resultados apuntaló los mercados de renta variable a principios de la semana, con empresas que dieron una nota de tranquilidad sobre el gasto de los consumidores, al menos por el momento. La tendencia se invirtió debido a las perspectivas de una política monetaria más restrictiva.

En consecuencia, tenemos una visión más cauta sobre la renta variable, ya que el riesgo de caída por la reducción de la liquidez tiene más peso que las perspectivas persistentemente optimistas sobre los beneficios de las empresas. También seguimos siendo cautos en cuanto a la duración, especialmente en Europa. Por otra parte, los yields actuales a corto plazo en EE.UU. parecen haber tenido ya en cuenta buena parte de las futuras subidas de la Fed.

MERCADOS EUROPEOS

Los índices terminaron ligeramente en positivo. Los inversores se centraron en las noticias de política monetaria. El gobernador del Bundesbank, Joachim Nagel, dijo que el BCE podría poner fin a su compra de activos a finales del segundo trimestre; oficialmente, estaba previsto para el tercer trimestre. Y el vicepresidente del BCE dijo que era posible una subida de tipos para junio de este año. En cuanto a las noticias macroeconómicas, el índice de confianza de los consumidores tranquilizó ligeramente a los inversores, pero los analistas siguen revisando a la baja las estimaciones de crecimiento europeo. El FMI recortó su previsión en un 1,1% hasta el 2,8%. Los yields de la deuda pública subieron a lo largo de la semana y lastraron el comportamiento de los mercados de renta variable.

En Francia, el debate televisivo sobre las elecciones presidenciales no pareció haber tenido un gran impacto en las encuestas, ya que Emmanuel Macron ganó las elecciones, pero con una ventaja menor que en 2017.

En cuanto a la actualidad empresarial, Stellantis cumplió con las sanciones suspendiendo la producción en su única fábrica en Rusia. En bienes de lujo, Prada presentó excelentes cifras impulsadas por una fuerte rentabilidad en Estados Unidos. Heineken se benefició del consumo fuera del hogar al mejorar la situación sanitaria. Sus resultados se beneficiaron de las subidas de precios y de un cambio en su estrategia de marketing hacia productos más selectos. Las subidas de precios de Nestlé no afectaron a la demanda de los consumidores en el primer trimestre. El grupo mantuvo sus previsiones de márgenes para este año y dijo que procedería a nuevas subidas de precios para compensar la inflación de los costes. En el sector de los semiconductores, ASM International subió un +4% tras registrar un récord de pedidos en el primer trimestre.

MERCADO EE.UU.

Excepto el Dow Jones (+0,66%), el resto de índices terminaron el período en negativo. El Nasdaq se desplomó un -3,44% debido a los sorprendentes resultados de Netflix y a los comentarios de Jerome Powell de que estaría a favor de una subida de 50 puntos básicos en el próximo FOMC del 4 de mayo, con la posibilidad de hacer lo mismo en junio y julio. El presidente de la Fed dijo que el mercado laboral estaba demasiado tenso y que la Fed tendría que actuar más rápidamente para frenar la inflación.

El Libro Beige señaló que la economía se había beneficiado de un crecimiento moderado hasta mediados de abril gracias al aumento del gasto en los comercios retail y las empresas no financieras. Añadió que las perspectivas de crecimiento eran menos positivas debido a las recientes incertidumbres geopolíticas y al aumento de los precios.

El FMI recortó sus previsiones de crecimiento mundial para 2022 del 4,4% al 3,6% para reflejar el impacto de la guerra de Ucrania.

Los precios del petróleo WTI se mantuvieron sin cambios, en 103 dólares, a pesar de la sorprendente caída de los inventarios estadounidenses.

En cuanto a los resultados, hasta ahora sólo han presentado sus cuentas 87 empresas del S&P 500, pero el 80% de ellas han superado las expectativas.

Netflix se desplomó un -35% tras perder 200.000 suscriptores en el primer trimestre, la primera caída desde 2011. La dirección también espera perder 2 millones de suscriptores en el segundo trimestre debido al endurecimiento de la competencia y el intercambio de contraseñas. Para reconducir la situación, el grupo va a introducir una versión con anuncios y a recortar el gasto en producciones.

La caída de Netflix también arrastró a otros pesos pesados del Nasdaq como Meta, Tesla y Amazon. Por el contrario, el S&P 500 y el Dow Jones se vieron respaldados por Procter & Gamble, que subió un +2,7% tras unas cifras optimistas y una mejora de las previsiones, y por los buenos resultados de IBM (+7%).

Tesla se disparó un +7% después de los resultados récord y la confianza del grupo en que puede acelerar la producción de 936.000 vehículos en 2021 a 1,5 millones este año.

Por otro lado, Just Eat Takeaway anunció que estaba estudiando la posibilidad de encontrar un socio estratégico y/o vender parte o la totalidad de Grubhub, la empresa estadounidense de reparto de comidas que compró el año pasado por 7.300 millones de dólares.