Ya está aquí el verano y pronto veremos cómo aumentan los robos en viviendas particulares y negocios. id:47274
Y aumentarán en oficinas, locales y naves industriales. Siempre pasa lo mismo en vacaciones.
La culpa, desde luego es de los ladrones que son los que consiguen entrar y robar. Pero a los propietarios e inquilinos también les cabe alguna responsabilidad, aunque solo sea por falta de interés en proteger sus propios bienes.
Una alarma eficaz -no todas lo son- no significa un gasto desproporcionado, sobre todo si lo comparamos con lo que podemos perder si entran en nuestra casa. Lo malo es que muchas personas ni se plantean la instalación de la alarma porque piensan que a ellos nos les va ocurrir nunca un percance similar. Eso es tentar al destino.
Desde que comenzó el movimiento favorable a la ocupación de casas, con ayuda de algunas de algunas personas que ahora hasta ostentan cargos políticos democráticamente elegidos, no ha parado de crecer. Es decir, hay una parte de la población que ve con buenos ojos que alguien ocupe la vivienda de otra persona o de una familia entera y se quede a vivir allí unos añitos, gratis y sin que le puedan cortar servicios básicos como son el agua o la luz.
Bueno pues quienes no tienen una alarma en su casa ya tienen dos problemas:
Uno, que, obviamente, los ladrones pueden entrar a robar en cualquier momento. Y otro, que a lo mejor no les roban todo, sino que, simplemente, durante una buena temporada no pueden volver a entrar en su propiedad. Por cierto, cuando terminado el juicio y logrado el desalojo de los ocupantes, imagínense en qué estado queda la casa.
Si nos decidimos ya de una vez a instalar una alarma, tenemos que ver cómo la pagamos. Se supone que estamos hablando de una familia media, con ingresos estables y gastos controlados aunque pueda disfrutar de unas vacaciones y de algún extra de vez en cuando. Esa familia lo primero que debería hacer es revisar el seguro de su casa, ya que es muy probable que si está hipotecada tenga un seguro con el banco que concedió la hipoteca. Y ahí podremos ahorrar.
Como todos ustedes deberían saber, la nueva normativa que regula la concesión de hipotecas por los bancos impide a estos obligarnos, para el otorgamiento de la hipoteca, a suscribir con ellos cualquier tipo de producto vinculado, sea un seguro de vida, un seguro sobre la propiedad o una tarjeta de crédito, por ejemplo.
Los seguros contratados con los bancos pueden llegar a ser hasta un cincuenta por ciento más caros que los contratados directamente con las compañías de seguros o con las corredurías que, además, ofrecen un servicio mucho más personalizado.
Elegir la alarma adecuada
Ahorrando en otros gastos o no, tenemos que ponernos a buscar la alarma que cubra todas nuestras necesidades. Buscar a través de Google en Internet puede resultar bastante pesado, sobre todo porque todos dicen que son los mejores, e ir revisando cada web, que suelen estar llenas de términos técnicos que no siempre entendemos no es una opción, por la pérdida de tiempo y la escasa información realmente útil que vamos a obtener después de tres o cuatro horas frente a la pantalla del ordenador.
Nosotros hemos vuelto a revisar alarmadoo que es una página web centrada en comparar alarmas, cámaras IP, sistemas de video vigilancia y de circuitos cerrados de televisión para particulares o empresas. Usar esta página para comparar las alarmas que ofrecen distintas empresas es mucho más cómodo que hacerlo de una en una, sobre todo porque la información tiene siempre la misma estructura: muestran de cada modelo de alarma que analizan las ventajas y desventajas de su instalación.
Este comparador, además de ofrecer de un vistazo las similitudes y diferencias entre las distintas alarmas, muestra información muy completa sobre cada una de ellas si es que nos interesa investigar tanto. Y está repleto de información útil tanto para el novato en temas de seguridad como para quien quiera saber qué es necesario para montar la alarma de una joyería.
Desde esa web también podemos redirigirnos a cada una de las páginas de cada empresa de seguridad y, en algunas ocasiones, obtener algún descuento o ventaja que no lograríamos si entramos desde Google, por ejemplo. Como explica el comparador en su sección dedicada a la transparencia de su negocio: “Para mantener nuestros servicios gratuitos para usted, le proporcionamos números de teléfono, formularios y enlaces para comprar los productos que revisamos. Al hacer clic en estos enlaces, podemos recibir una compensación, pero los resultados de nuestras revisiones editoriales se basan en evaluaciones objetivas en la mayor medida de lo posible con la información de que disponemos.
Este tipo de comparadores, en cierto sentido, se parecen a las corredurías de seguros que, al no depender de ninguna compañía de seguros en concreto, pueden recomendar el seguro que de verdad creen más adecuado para cada cliente.
Aspectos más importantes al contratar una alarma
Alarmas se pueden instalar de todos los tipos, desde muy sencillas y económicas hasta otras muy buenas e integradas en modernos sistemas de domótica. Pero siempre habremos de fijarnos en dos aspectos clave:
El coste, que no es lo mismo que el precio inicial. Una alarma generalmente conlleva un mantenimiento anual que también hay que tener en cuenta. En el mercado existen alarmas que podemos comprar nosotros directamente en una ferretería o en una gran superficie e instalarla en casa. Lógicamente las prestaciones de estas alarmas son bastantes limitadas. Si pensamos en la alarma como una inversión en seguridad y tranquilidad para toda la familia, es bueno tener en mente el refrán de que “lo barato sale caro”. Así que busquemos en el comparador la mejor opción para nosotros.
La atención al cliente de la compañía de seguridad. Lo mejor que puede pasar es que la alarma no suene nunca. Eso es posible, quizá, debido a que los signos externos de su instalación ya disuaden a la mayoría de los posibles intrusos. Pero, si llega a surgir un incidente, la compañía de seguridad debe reaccionar como es debido. Si vamos a instalar una alarma con el servicio de central receptora de alarmas tenemos que asegurarnos de su capacidad de respuesta, de que de verdad funciona las 24 horas del día durante todos los días del año.
Bueno, y ahora a elegir alarma, antes de que les roben.