La reunificación de deudas consiste en agrupar todos los préstamos e hipotecas que se tienen contratados en un único préstamo. De esta forma, sólo se tendrá que afrontar el pago de una única cuota mensual de un importe inferior a la suma de las diferentes cuotas que se tenían que afrontar. id:84381
Es decir, se trata de recoger las deudas para reducir considerablemente lo que se paga al mes. Por otro lado, se incrementa el plazo de amortización y el coste final de la operación debido a los intereses.
Si se pregunta cómo reunificar deudas, tiene que saber que esta operación sólo la pueden realizar empresas especializadas. Estas nos permiten unificar préstamos e hipotecas que tengamos con diferentes bancos o con diferentes tipos de interés. También podemos reunificar deudas a través de un banco con el que tengamos la mayor parte de los préstamos o hipotecas pendientes.
El proceso de reunificación
¿Cómo puedo reunificar mis deudas? Seguro que alguna vez se ha hecho esta pregunta. Lo primero es que la empresa mediadora estudie el caso concreto. Se analizarán las deudas, los intereses y los plazos de amortización. La idea es que, una vez aprobada la operación, se puedan empezar a negociar las nuevas condiciones de pago con los diferentes bancos.
Cuando el proceso esté en marcha, se cancelarán todos nuestros préstamos e hipotecas para reunificarlos en una única hipoteca con las nuevas condiciones negociadas. Esta nueva hipoteca tendrá un nuevo tipo de interés y un nuevo plazo de amortización, normalmente más largo para reducir la cuota mensual a pagar.
Gastos derivados de la reunificación de deudas
Además del coste de los intereses, existen otros gastos. Teniendo en cuenta que los préstamos de reunificación de deudas implican la cancelación anticipada de todos los préstamos, lo más habitual es que haya que pagar las comisiones habituales de cancelación o amortización anticipada.
Además, para reunificar las deudas es necesario formalizar la apertura de una nueva hipoteca, con todos los gastos asociados: comisión de apertura de la hipoteca, gastos de tasación de la vivienda o inmueble hipotecado, impuesto de actos jurídicos documentados y gastos de notaría.
Por último, si se opta por gestionar la reunificación a través de una agencia mediadora, hay que tener en cuenta que ésta tendrá sus propios honorarios.
Requisitos para reunificar deudas
El primero es que no se puede optar por unificar unas deudas y otras no. Es decir, hay que agrupar todos y cada uno de los préstamos que tengamos bajo la misma hipoteca.
El segundo requisito es que el importe de la nueva hipoteca no supere el 80% del valor del inmueble hipotecado. Lo habitual es que también se pidan los requisitos habituales que se dan para la concesión de cualquier hipoteca: ingresos mensuales estables y demostrables, no estar en ninguna lista de morosos y presentar un avalista.
Como ve, los beneficios de la reunificación de deudas son evidentes pero hay muchas variables a tener en cuenta y es conveniente consultar con una asesoría experta en procesos de reestructuración financiera y empresarial.