¿Cómo funciona el amor casual en tiempos de coronavirus?

Todos alguna vez hemos estado tentados a descargar una aplicación de citas con el propósito de conocer nuevas personas. Sea por amistad o por algo más, las aplicaciones como Tinder y Meetic han servido de intermediarios entre las personas que buscan conocer a su Match o pareja ideal.

Si estás buscando a tu alma gemela o a alguien que comparta tus intereses, que tenga respuestas para todas tus preguntas, cómo ¿cuántas estrellas hay en el cielo? o ¿dónde aprender a jugar a la ruleta? (puedes aprender aquí) las aplicaciones de citas pueden y van a ayudarte.

La dinámica de la aplicación es simple. Descargas la aplicación, creas un perfil con algunos datos: tu nombre, apellido, fotos, tus intereses y pasatiempos. Luego debes enlazar tu perfil a una o varias redes sociales, como por ejemplo Facebook o Instagram. En cuanto consideres que tu perfil refleja lo que quieres mostrar de ti al mundo, estarás listo para dar like o dislike a prospectos de citas en tu misma situación.

Citas en línea y ciberacoso

Mucho se ha hablado sobre los peligros del amor digital. La mayoría de los beneficios que ofrecen estas aplicaciones pueden ser tambien ventajas para los ciberacosadores y poner en riesgo a las personas que solo buscan conocer personas nuevas.

El problema con las aplicaciones de citas es que nunca sabes con quien puedes estar hablando en realidad. Puede que Juana de Madrid, con la que llevas hablando por semanas sea en realidad un estafador con talento, para hacerte pensar que es una atractiva jovencita. Muchas mujeres han sufrido el acoso al ser espiadas en sus domicilios o sitios de trabajo gracias a las fotografías que comparten.

Sin embargo, las aplicaciones de citas han logrado sobrevivir. Son muchas las personas que han conocido amigos, citas de una noche o incluso a su cónyuge a través de una aplicación de citas.

Estos casos de éxito, donde las personas han logrado alcanzar el objetivo de la aplicación, nos muestran el otro lado de la moneda. Donde la responsabilidad recae en nuestro juicio y sentido común:

• Si es la primera vez que verás a alguien, procura concretar una cita en algún lugar público. De esa forma habrá más personas a tu alrededor en caso de que no todo salga como pensabas.
• No compartas fotografías que puedan revelar información delicada: tu domicilio, el domicilio de tus padres, amigos, tu sitio de trabajo.
• Sé honesto con tus intenciones. Con frecuencia estas aplicaciones son usadas para tener citas rápidas, si no es tu caso, manifiesta a tu match tus verdaderas intenciones.

Amor casual en tiempos de coronavirus

Con la llegada del coronavirus Covid-19 y las restricciones a la movilidad, conocer personas se ha convertido en algo complicado. Si bien se han levantado la mayoría de las restricciones a la movilidad, el virus sigue latente y las autoridades recomiendan mantener distanciamiento social ya que temen una segunda oleada de contagios.

Se podría pensar que las aplicaciones de citas registrarían una disminución en sus usuarios o menos trafico en sus servidores. La realidad indica todo lo contrario, parece que el amor puede contra todo, incluso contra una pandemia y el confinamiento nacional.

Elie Seidman, el CEO de Tinder ha reportado un incremento del 26% en las conversaciones entre usuarios y ninguna cifra considerablemente baja de nuevos registros. Con el fin de ser consecuentes con la situación que atraviesa el país y el mundo, Tinder ha habilitado la opción de tener videollamadas entre matches. De esta forma las parejas podrán tener conversaciones más “intimas” sin comprometer su salud ni la de sus familiares. Podrán hacer match con personas en todo el mundo ya que, de todas formas, justo ahora la distancia no es solo geográfica.

Algunas personas pueden considerar que mantener múltiples conversaciones en Tinder es igual que apostar en simultaneo a todos los números de la ruleta. Sin embargo, ya que las citas presenciales no son por el momento una posibilidad, poder conectar con miles de personas sin importar en que lugar del mundo estén brinda una experiencia digital que remplaza las citas presenciales.

Tinder ya no es solo una aplicación de citas sino también un recurso digital que contribuye a la estabilidad emocional de jóvenes y adultos. En confinamiento, sin poder entrar en contacto con amigos y realizar las actividades a las que estaban acostumbrados, Tinder se presenta como una oportunidad para relacionarse con múltiples personas y compartir los diferentes espectros de emociones que la pandemia a ocasionado.