Según el sondeo realizado por la CEOE el 45% de las empresas quieren acceder a los Fondos Europeos Next Generation pero desconocen si cuentan con un proyecto elegible. id:66996
El Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Economía Española, va asentándose tras ser aprobado el decreto ley que regulará la gestión del plan de recuperación para canalizar los fondos europeos destinados a relanzar la economía tras el impacto del virus. Con un capital pactado de 140.000 millones de euros en subvenciones y créditos europeos hasta 2026, España recibirá en esta primera instancia hasta 27.400 millones durante el año próximo 2021. En este sentido, la consultora de innovación y expertos en la gestión de fondos
The Flash Co aporta algunos consejos que facilitarán el acceso de las compañías a los Fondos Europeos.
A la espera de que el Parlamento Europeo resuelva el reglamento que regirá su funcionamiento, el grueso de las empresas españolas ya está al tanto de cuáles son los ejes estratégicos sobre los que pivotarán las ayudas; La transición ecológica, la digitalización, la reindustrialización, son los grandes escenarios que protagonizarán la transformación y recuperación económica para los próximos años, cobrando especial interés aquellos proyectos cuyo efecto se prolongue más en el tiempo mediante la implementación de un plan concreto bien definido.
Según el CEO de la consultora The Flash Co Francisco Vera, “ Es necesario que todas las empresas interesadas en acceder a los fondos manifiesten su interés por participar en el desarrollo de ambiciosos proyectos de transformación y modernización, y cuando llegue el momento presenten la solicitud de ayuda conforme a las bases con las se vayan publicando. Todas tienen posibilidades de obtenerlos, los criterios de adjudicación serán claros y transparentes, pero para ello es preciso que las empresas interesadas diseñen su plan de crecimiento basado en la transformación digital y en la innovación.
Los proyectos han de destacar en términos de viabilidad, sostenibilidad y creación de empleo a largo plazo y deberán erigirse sobre criterios de eficiencia y transparencia.
Una vez aprobados los fondos, resulta crucial para las empresas estar al tanto de cuáles son los pasos previos para poder optar a estas ayudas. Eloy Herrero, presidente de The Flash co. explica las principales claves que deberán seguir las compañías interesadas desde este momento para presentar sus proyectos:
1- Asesoramiento de expertos en la adjudicación de ayudas públicas.
Debido al alto grado de exigencia que acompañará el proceso de evaluación de las propuestas, resultará crucial contar con el mejor asesoramiento para que los proyectos presentados por las empresas no solo formen parte de la interminable lista de elegidos, sino que tengan la capacidad de lograr el éxito en el reparto de ayudas.
En este sentido, lo más recomendable es dejarse guiar por expertos en la gestión y tramitación de subvenciones, que sean capaces de sacar a la luz el potencial de cada empresa, no solo a la hora de plantear el proyecto, sino en una primera fase en la que se determine si la compañía es o no viable como candidata a recibir los fondos.
2- Planificación y puesta en marcha inmediata.
La antelación en este tipo de procedimientos es esencial. Por este motivo las empresas interesadas deben comenzar a trabajar desde ya en la detección y definición exacta de sus necesidades, centrándose en la elaboración de proyectos estratégicos de innovación e inversión, que estén enmarcados en los tres ejes estratégicos estipulados por la Comisión Europea.
De esta forma, todo plan detallado que esté acompañado de una descripción clara de los objetivos, así como de unos indicadores de resultados y un presupuesto de gastos elegibles en función de un calendario preciso, resultarán adecuados para la aprobación de la correspondiente ayuda.
3- Optar por proyectos colaborativos entre diversos actores.
La predisposición de las empresas candidatas a la cooperación con más organizaciones entre distintos sectores, resultará muy ventajosa a la hora de acceder a las ayudas públicas.
Serán de interés los proyectos orientados a la creación de empleo, la transformación energética, el aprovechamiento de renovables y otras fuentes como el hidrógeno, la innovación en movilidad sostenible, la digitalización empresarial y la Industria 4.0, la modernización de infraestructuras, la redes de comunicaciones 5G, la formación especializada, y las actuaciones estratégicas en los sectores claves para España; turismo, automoción, o los servicios orientados a la sociedad cada vez más envejecida, y al medio rural.
Por otro lado, también supone una oportunidad para incentivar la colaboración público-privada enfocada a la modernización y digitalización de las AAPP.
Ya se están recibiendo por parte de las Administraciones públicas Manifestaciones de Interés para llevar a cabo grandes proyectos. De hecho, la recuperación de nuestra economía dependerá en gran medida del efecto multiplicador de los fondos que la colaboración público-privada sea capaz de generar.
4- Contar con especialistas estratégicos.
Por último, para definir el plan estratégico, cada empresa debería contar con la participación de un equipo multidisciplinar, con conocimientos específicos no solo de cada uno de los principales objetivos prioritarios que han marcado desde Bruselas y desde el Gobierno de España, también será necesaria la visión estratégica para acomodar estos nuevos proyectos empresariales dentro de las futuras líneas de ayuda que se planeen a lo largo de 2021-23.
En definitiva, ha llegado el momento de modernizar la economía productiva española a través de una reindustrialización más sostenible y sobre todo, que genere empleo de calidad. Para ello, la clave estará en maximizar el potencial de los fondos a través de proyectos concretos de alto valor que estén alineados con las directrices marcadas por la Unión Europea y de España.
La oportunidad que ofrece la llegada de estos fondos europeos a España resultará única, pero también se plantean grandes retos para asegurar que estos fondos puedan ser asumidos y canalizados a través de propuestas de calidad por nuestro tejido empresarial, compuesto en su mayoría por pequeñas y medianas empresas.