Se dispara la intención de contratar servicios funerarios online en la Comunidad de Madrid hasta el 63% respecto al 44% que lo hubiera hecho antes de la pandemia. id:77403
La startup
Death Tech Funos, el Rastreator de las funerarias,
es el primer comparador de precios online de funerarias de España, 100% objetivo, transparente e independiente.
La tecnológica acaba de lanzar su informe “Las 12 tendencias que marcarán el futuro del sector funerario”, con datos nacionales y específicos de la Comunidad de Madrid. En vísperas del Día de Todos los Santos, el documento aglutina una guía sobre el estado actual del sector y las tendencias que marcarán los próximos años. Desde funerales más ecológicos, hasta cenizas al espacio, pasando por nuevas formas de entender la muerte y celebrar la vida. Mayor digitalización y sostenibilidad son las principales demandas de los usuarios.
“La idea de nuestro informe de tendencias es aportar una visión sobre el mercado funerario en España y en Madrid, pero, sobre todo, de las principales tendencias que se impondrán los próximos años. Nuestro país se encuentra a la vanguardia en infraestructura funeraria y contamos con empresas pioneras; pero la gran oportunidad vendrá con la digitalización”, señala Marc Vallhonesta, CEO y Fundador de FUNOS.
El informe argumenta con datos, estadísticas, encuestas propias y fuentes internacionales, cuáles serán las 12 principales tendencias que marcarán la industria funeraria en los próximos años.
- Aumento de las incineraciones
Desde la instalación del primer horno crematorio en el país, en 1973, las tasas de cremaciones en España no han parado de aumentar. Con 464 hornos crematorios, España se sitúa como el Estado de Europa con mayor número de instalaciones de este tipo, muy por encima de los 185 de Francia o los 164 de Alemania. Una capacidad que triplica la demanda actual. En la Comunidad de Madrid hay 29 hornos instalados, siendo la segunda comunidad con menos hornos por fallecido, después de Canarias.
La cremación como destino final pasó del 16% en 2005 al 44,5% en 2019 y, según estimaciones de la patronal del sector funerario, para el año 2025 llegará al 60%. Menores costes del servicio y de mantenimiento, falta de espacio en cementerios, menores ataduras, y la tendencia al laicismo, junto a que la Iglesia Católica aceptó esta práctica años atrás, son las principales razones de esta tendencia. En ciudades como Sevilla o Málaga, esta tasa llega al 70%. Sin embargo, esta práctica se encuentra más desarrollada en ámbitos urbanos que rurales.
Este fenómeno global se encuentra en alza también en los países de nuestro entorno, y alcanza cotas máximas en el norte de Europa, donde las cremaciones superan el 80% del total.
- Mayor digitalización de las funerarias
El sector funerario se ha caracterizado históricamente por ser muy tradicional. En los últimos años, sin embargo, se ha observado una fuerte demanda de los consumidores hacia una mayor digitalización de las funerarias. La pandemia no ha hecho más que acelerar estas demandas. De hecho, según una encuesta de FUNOS, el 63% de los madrileños contrataría servicios funerarios por internet si estuvieran disponibles, comparado con un 44% que lo hubieran hecho antes de la pandemia. Hoy, son muy pocas las empresas que ofrecen este servicio online.
En este sentido, otra de las demandas claras de los usuarios es poder disponer de un comparador de precios. Así, el 44% de los madrileños desearía poder comparar precios online con un comparador de precios como Funos.
Una tendencia global, y que también está teniendo un fuerte impacto en España, es la aparición de startups innovadoras “death tech”, como Funos, que dan respuesta a esta necesidad de digitalización e impulsan la transformación digital del sector.
- Funerales cada vez más sostenibles y ecológicos
La sostenibilidad es una demanda cada día mayor en la sociedad, y el sector funerario no es ajeno a ello. En España, el 87% de los ciudadanos madrileños pide servicios ecológicos y el 41% estaría dispuesto a pagar más por estos servicios.
Las funerarias españolas, especialmente las más grandes, han sabido leer esta demanda y las ventas de ataúdes y urnas ecológicos son hoy la tendencia dominante. En el caso de Mémora, la funeraria más grande de España, más del 77% de los ataúdes vendidos en 2019 contaban con el sello ecológico.
En el futuro también llegarán los ecofunerales, un concepto más amplio de despedidas más naturales y que reducen al máximo el impacto ambiental de los productos y servicios que intervienen. Esta tendencia se viene observando en otros países de nuestro entorno como Francia, Reino Unido o Estados Unidos.
- Ceremonias de despedida: menos religiosas y nuevas religiones
Con el importante cambio demográfico que ha vivido España en las últimas décadas, sumado a una mayor secularización de la sociedad española, están creciendo constantemente la cantidad de ceremonias de despedida laicas. En 2019, el 18% de las ceremonias fueron laicas, frente al 82% de religiosas, con diferencias significativas entre las grandes ciudades (donde las laicas ganan más peso) y las zonas rurales (donde las laicas son casi residuales).
Crecen también los funerales de creencias religiosas diferentes al catolicismo, como el islam. No en vano, en España existen 35 cementerios islámicos, y Andalucía es la comunidad que acoge más de éstos (11).
Paralelamente a este cambio, el impacto de las migraciones está suponiendo un crecimiento en la demanda de traslados internacionales y repatriaciones de cuerpos.
La realización de vídeos conmemorativos de las personas fallecidas ha crecido notablemente en los últimos años. Las memorias multimedia utilizan todo el contenido que una persona genera hoy en día con el móvil para convertirlo en audiovisuales para el recuerdo. Estos recuerdos se proyectan cada día más en los velatorios y en las ceremonias de despedida.
En nuestro país, más de la mitad de las personas madrileñas (53%) compartiría estas memorias multimedia del fallecido en un velatorio o una ceremonia de despedida, en línea con el 54% de media en España. Los Millennials, y todavía en mayor medida la Generación Z, por su parte, ven esta práctica aún con mayor naturalidad y el 77% de ellos no dudaría en proyectar este tipo de material.
Esta práctica explotó con la pandemia como solución para quiénes no podían asistir a las ceremonias de despedida debido a las restricciones de aforo en los tanatorios. Sin embargo, la transmisión online de funerales es un servicio que no gusta a todos. A pesar de ir sumando adeptos, la mayoría de los españoles aún considera que participar de manera presencial en un funeral es algo irremplazable. De hecho, un 72% de los madrileños preferiría no asistir a una despedida por streaming en la post pandemia, comparado con el 68% de españoles. Entre los mayores de 45 años, el porcentaje de quienes no participarían es incluso mayor, llegando al 81%.
- Mayor impacto de las redes sociales
La importancia de las redes sociales en nuestro día a día ya no resulta novedad. Lo que sí aparece como una tendencia disruptiva es el mayor impacto que estas están teniendo en nuestra vinculación con la muerte.
En España, el 74% de los madrileños utiliza habitualmente mensajes privados a través de sistemas de mensajería instantánea como WhatsApp para enviar condolencias y notas de pésame. Lo que antes podía resultar impersonal, hoy parece la regla general a la hora de acompañar a una persona que ha perdido a un ser querido.
Por el contrario, en lo que se refiere a los posts en abierto (aquellos que se exponen de manera pública en los muros y en los feeds) existen importantes reticencias. Aunque cada vez se ven más mensajes públicos en las redes sociales anunciando un fallecimiento, la mayoría de la gente prefiere no hacerlo (solo el 26% lo haría). Se reservan estas comunicaciones para los mensajes privados. Los motivos principales por los que no hacerlo son la falta de privacidad, el alcance que pueda tener la comunicación, y que la familia no quiera.
- Mayor personalización y participación directa en los funerales
En muchas partes del mundo, los funerales son cada vez más celebraciones de la vida del difunto, y se tiende a reducir la carga del sentimiento de pena y dolor. Esta tendencia también va llegando progresivamente a España.
Cada vez más, las personas buscan involucrarse en la organización de los servicios de sus seres queridos para que estos resulten verdaderos homenajes. Los funerales son cada día más personalizados. Desde la inclusión de objetos que representen los gustos y pasiones del difunto, hasta la organización de “Ceremonias del recuerdo” en lugares diferentes a los tradicionales, estas nuevas formas de participación incluyen cada vez más música, discursos por parte de los allegados e incluso comidas o banquetes de celebración.
- Gestión del legado o huella digital
Es tal la cantidad de información que se deja en internet y las redes sociales que, para muchos, resulta una preocupación saber qué es lo que ocurrirá con todo eso después de su muerte. Así, muchas empresas ofrecen la posibilidad de gestionar la huella digital: desde cerrar perfiles en redes sociales o convertir las cuentas en conmemorativas, programar posts o enviar mensajes a familiares y amigos después de la partida. A esto también se suma la opción de redacción de testamentos digitales, entre otros documentos para la administración del legado.
- Auge de la contratación y planificación en vida
Dejar todos los arreglos funerarios listos antes de morir es una tendencia que ha crecido mucho en los últimos años. El objetivo es quitar un peso a los seres queridos y que no tengan que hacer frente al coste del servicio funerario en un momento de dolor. A esto se suma la posibilidad de dejar decidido de antemano todos los detalles.
Como consecuencia de ello, el volumen de primas de los seguros de decesos creció un 79% entre 2005 y 2019, el 39% de la población madrileña dispone de este seguro (comparado con el 46% de la media nacional), y estos seguros se hacen cargo del 60% de servicios funerarios a nivel nacional. En paralelo, muchas empresas funerarias que ofrecen la opción de contratación en vida están viendo crecer sus contrataciones pre-necesidad de manera acelerada.
- Mayor transparencia de las funerarias
Los madrileños aprueban la transparencia de las funerarias con una nota media de 5,6 sobre 10.
La mejora de la transparencia de las funerarias en España va ligada a una mayor digitalización de los servicios. La demanda de los consumidores en este aspecto es clara: el 85% de la población madrileña no contrataría en un futuro a una empresa funeraria que no mostrara sus precios en su página web. Por eso, se verá cada vez más transparencia en el sector. Será posible consultar toda la información de los servicios y precios por Internet, poder comparar y, finalmente, contratar online. Las funerarias parecen haber tomado nota de esta demanda.
- Servicios funerarios del futuro
El futuro, y en algunos casos el presente del mercado funerario, no se parece a la realidad actual. Entre las tendencias que seguramente aparecerán en unos años, el informe de Funos señala el envío de las cenizas al espacio, la transformación de los restos en diamantes, la criogenización de los cuerpos o la cremación al agua, entre otras.