Con motivo de la celebración San Valentín, thyssenkrupp Home Solutions da las claves para vivir una nueva relación con independencia de los años. id:55321
El amor romántico puede surgir a cualquier edad. Y es bueno que así sea, porque las personas que viven en pareja tienden a vivir más y con mejor salud que quienes permanecen solas. Pero dicho esto, no hay por qué convivir tan solo para ser más longevos, porque si algo está claro es que resulta preferible la soledad a vivir con alguien insoportable. Según un reciente estudio de la compañía líder en salvaescaleras para el hogar
www.thyssenkrupp-homesolutions.es,
ocho de cada diez clientes solteros o viudos dicen que les gustaría tener una pareja «con la que compartir la vida». Solo
dos de cada diez afirman sentirse muy a gusto sin nadie. Pero unos y otros coinciden en que no aguantarían vivir con cualquiera.
El
aislamiento es nocivo para la salud y tiene relación con la depresión. Por el contrario, disfrutar de las relaciones sociales, incluidas las románticas, reduce el estrés y beneficia el corazón.
El contacto físico, ya sea cogerse la mano, abrazarse, besarse o practicar sexo,
resulta beneficioso porque libera hormonas del bienestar, tan relacionadas con los estándares de vida saludable.
Así que ¿por qué no estar abiertos a encontrar una nueva pareja? Para ello
thyssenkrupp Home Solutions da una serie de claves para vivir una nueva relación independientemente de los años que uno tenga:
Saber qué se quiere
Hay quien busca pareja para compartir sus aficiones, quien lo hace para huir de la soledad o quien pretende enamorarse locamente. Otros están interesados en contar con alguien que cuide de ellos. Los hay que tienen un sentido práctico de la vida: todo es más barato dividido entre dos. Ninguna opción es censurable.
Cada uno debe tener claro qué es lo que necesita y si está abierto o no a adaptarse según qué condiciones.
Establecer el plan de búsqueda
Es difícil encontrar al amor de nuestra vida en el pasillo de casa. Por eso conviene
participar en actividades que permitan relacionarse y conocer gente nueva:
- Hacer turismo con viajes del Imserso o en grupo con amigos o como uno prefiera.
- Apuntarse a excursiones de un día en los alrededores del lugar de residencia.
- Acudir a exposiciones, visitas guiadas a parques, etc.
- Inscribirse en cursos de yoga, taichí, gimnasia de mantenimiento...
- Acudir a las actividades culturales que organicen los ayuntamientos, como teatro, conferencias, etc.
- Apuntarse a clases de baile.
- Recurrir al concurrido turismo termal.
- Hacer voluntariado, además de conocer a gente no hay cosa mejor que ayudar a los demás.
- Los más modernos y atrevidos también pueden apuntarse a aplicaciones para conocer gente como Meetic que recientemente ha lanzado Ourtime, una nueva aplicación de citas cuyo principal objetivo es ayudar a los solteros mayores de 50 años a disfrutar de la vida en pareja. Otra aplicación es Stitch, en la que los usuarios no solo buscan encontrar su media naranja sino simplemente compañía, para ello realizan salidas en grupo, viajes, cenas... Finally, Más 40 y Lumen son otras aplicaciones que ayudan a las personas mayores a volver a enamorarse o hacer amigos.
En definitiva, se trata de buscar ocasiones propicias para encontrar pareja y para pasarlo bien. Así, aunque se fracase en el intento, al menos será posible tener un envejecimiento activo y enriquecedor.
Cuidar el aspecto
Cuidarse físicamente no significa inyectarse bótox cada mes. O sí; allá cada uno. Lo verdaderamente necesario es esmerarse en la higiene,
tener una adecuada higiene dental, llevar el pelo arreglado, renovar el vestuario adaptándolo a los cambios físicos... Los jóvenes se arreglan mucho más que los mayores. ¿No debería ser al contrario? Ellos no lo necesitan, en cambio, conforme pasan los años, hay que esforzarse más por estar presentables.
Ser realistas
No hay que luchar contra el tiempo, porque es una batalla perdida. Las personas que tratan de parecer jóvenes a toda costa, vestirse y comportarse de manera no acorde con su edad están en su derecho de hacerlo, por supuesto, pero pueden resultar ridículas a los ojos de los demás. Igualmente, pretender establecer una relación sólida con una persona mucho más joven suele ser perder el tiempo.
No comparar
Después de una convivencia satisfactoria, pueden surgir las comparaciones, pero
hay que superar esa tendencia y pensar que cada persona es única e insustituible, y que, precisamente por eso, es posible conocer a gente diversa y vivir nuevas experiencias. Estemos abiertos.
También es posible que en nuestra relación anterior cometiéramos errores que, en una segunda (o tercera...) oportunidad, no hay por qué repetir. Quizá fue un motivo de fricción con nuestra pareja la poca colaboración en el hogar o la obsesión por el orden.
Nunca es tarde para empezar de cero y corregir los fallos.
Potenciar la autoestima
Las personas deprimidas o ansiosas deben buscar ayuda profesional, pero el resto pueden aprender a quererse a sí mismas si aún no lo han conseguido.
No estar quizá en el mejor momento físico de la vida no significa vivir acomplejados. Un día no hubo canas ni arrugas, los dientes eran los originales y todo se mantenía en su sitio desafiando la ley de la gravedad. Sin embargo, hoy... El envejecimiento es un proceso natural e inevitable y, sobre todo, equitativo:
los años pasan para todos. No hay por qué avergonzarse de ser mayor.
Frente al deterioro físico, con los años crece la experiencia, la sabiduría, la tranquilidad de espíritu... Los mayores tienen mucho que ofrecer, con independencia de su edad.
Transmitir seguridad
Hay que resignarse a que el rechazo entra dentro de lo normal. No conviene mostrar inseguridad ni quedarse en la inacción por temor a una negativa. Lo mejor es
transmitir confianza en uno mismo.
Ser tolerantes
Cada persona es diferente y, a estas alturas, arrastra una larga historia detrás que la hace aún más diferente. Su origen, su pasado o incluso sus preferencias electorales no deben ser relevantes a la hora de establecer una relación amorosa y de compañerismo. Bastará con
compartir determinados principios y pasar por alto las divergencias.
Hablar sobre sexualidad
La sexualidad de las personas mayores sigue siendo un tabú social. La mayoría de la gente rechaza las manifestaciones eróticas entre ancianos mientras celebran los besos de película entre gente joven. Sin embargo,
no hay por qué renunciar a una vida sexual activa a cualquier edad..., salvo que se decida lo contrario, porque también es posible tener una satisfactoria relación de pareja que no incluya la sexualidad y sí el afecto. Cada pareja es muy libre de vivir su intimidad como ambos prefieran.
Perseverar
Más de dos millones de personas mayores de 65 años viven solas, y de ellas, un millón y medio son mujeres (el 72 %), según últimos datos del INE. Esto significa que no es sencillo encontrar un hombre conforme avanzan los años porque fallecen antes. Por ejemplo,
entre los 60 y los 70 años hay en España doscientas mil mujeres más que hombres, y
entre los 70 y los 80 la diferencia aumenta a trescientas cincuenta mil. Así todo,
no hay por qué abandonar: la vida en pareja tiene una influencia directa en la calidad de vida y en la mayor longevidad, proporciona tanto apoyos afectivos y sentimentales como materiales. Con toda seguridad, el mundo está lleno de personas también deseosas de encontrar pareja. ¿Por qué no intentarlo?
Belén Galán, directora de Marketing y Comunicación de thyssenkrupp Home Solutions ha dicho: “Entre nuestros clientes, nos encontramos con que muchos de quienes han logrado rehacer sus vidas no quieren que sus hijos lo sepan porque creen que no lo verían bien, temen sus críticas, se avergüenzan... Es una pena. Todo el mundo debería alegrarse cuando algo así ocurre, porque tener pareja proporciona un gran apoyo a las personas mayores, muy distinto del que da la familia o los amigos. Nosotros les aconsejamos siempre que sean dueños de sus vidas, que busquen su independencia y que disfruten abiertamente de su relación.”