En un contrato de renting realizado con la colaboración de Alphabet, el Cuerpo Nacional de Policía utilizará un total de 1.551 vehículos nuevos de Peugeot, Citroën y Opel, entre ellos 642 SUV Citroën C5 Aircross y 300 Peugeot 3008 Hybrid, que operarán como automóviles “Z”, con equipamiento específico y rotulación con los colores del CNP. id:64208
El Cuerpo Nacional de Policía tiene a su cargo una de las mayores flotas de vehículos de España con 14.000 unidades, contando turismos, camiones, motocicletas… que se renuevan periódicamente. Este cuerpo policial utilizará, en los próximos años y en régimen de renting, 1.551 vehículos de Groupe PSA, que prestarán servicio como coches patrulla “Z” o como automóviles camuflados “K”.
Los 642 SUV Citroën C5 Aircross con motor PureTech 130 y caja de cambios EAT8, que ya han entrado en servicio y los 300 Peugeot 3008 Hybrid 225, que se entregarán a principios de 2021, cumplirán funciones de automóviles “Z”, sustituyendo a 942 Citroën C4 Picasso. Cuentan con equipamientos específicos como la señalización óptico-acústica, un kit de detenidos y rotulación con imagen corporativa. Están dotados con los sistemas de seguridad activa más avanzados, además de asegurar un amplio espacio interior, para transportar el equipamiento policial, y un alto nivel de confort para sus ocupantes.
El SUV Citroën C5 Aircross PureTech 130 se caracteriza por aportar placer de conducir y bajos consumos y emisiones, a lo que hay que añadir el confort y las prestaciones de la caja de cambios automática EAT8. Cuenta con los últimos avances técnicos y tecnológicos desarrollados por Citroën, como la Suspensión de Amortiguadores Progresivos Hidráulicos®. Con el Peugeot 3008 Hybrid 225, el Cuerpo Nacional de Policía elige una alternativa sostenible y de altas prestaciones. Esta versión híbrida enchufable de dos ruedas motrices suma las prestaciones de un motor gasolina PureTech de 180 CV a las de un propulsor eléctrico de 110 CV situado en la parte delantera del vehículo. Este conjunto está asociado a la caja de cambios e-EAT8. Sus cifras de consumo y emisiones le sitúan como una de las alternativas más eficientes de su categoría, con 1,3 l /100 Km y 30 g/Km de CO2. Además, puede circular 56 Km (WLTP) en modo “cero emisiones” a una velocidad de hasta 135 Km/h, lo que le convierte en un automóvil ideal para recorridos urbanos. Además, 365 Peugeot 308 y 244 Opel Astra se han incorporado al Cuerpo Nacional de Policía como vehículos camuflados.
Estos automóviles continúan la relación de Groupe PSA con el Cuerpo Nacional de Policía, iniciada hace 35 años con el Talbot Horizon, fabricado en el actual Centro de Madrid, que se incorporó como coche patrulla al Cuerpo de Policía Nacional con el color marrón que distinguía sus uniformes. En 1988, se incorpora a la flota el Citroën BX que queda en el imaginario colectivo como el coche de policía por excelencia de los años 80 y 90. Fue uno de los primeros modelos en mostrar el color azul que identifica al Cuerpo Nacional de Policía, creado en 1986. Se fabricó en la planta de Vigo entre 1983 y 1996. A mediados de los 90, el Peugeot 306 vestiría el uniforme. Las unidades con motor 2.0 HDi se convertirían en el primer turismo diésel de la Policía mientras que el Citroën Xantia, entre 1998 y 2002, incorporaría la versatilidad de la suspensión Hidractiva.
Con el siglo XXI llegarían los monovolúmenes de la serie Picasso fabricados en Vigo, iniciada por el Citroën Xsara Picasso, elegido por su amplitud interior y su polivalencia, al que sucedería como vehículo policial el Citroën C4 Picasso.