El Ibex conserva los 9.000 puntos a pesar de la caída de bancos y acereras

En una sesión bajista como la de hoy, las caídas del Ibex se han limitado al -0,18% en comparación con la caída del -0,40% de la Bolsa de Fráncfort o del -1% en Londres. Wall Street, por su parte, retomaba hoy la negociación tras el festivo de ayer con recortes que rondaban el -1% a unas horas del cierre.

Sorprende la resistencia del índice español en un día en el que no hemos contado con noticias positivas, sino todo lo contrario. Sigue sobrevolando la rebaja de expectativas del PIB mundial por parte del FMI y la oleada de cambios de recomendación negativos para muchas de nuestras cotizadas. Por si fuera poco, el asunto del Brexit se encuentra en una fase de máxima incertidumbre. Son varias las voces que han apuntan a que la desconexión no se aplazará más allá del 29 de marzo y que veremos un Brexit sin acuerdo, que es considerado el peor de los escenarios.

Dentro del Ibex dista mucho el comportamiento que han tenido hoy valores como ACS (+1,95%) y AENA (+1,59%), del de compañías de carácter cíclico como bancos y las acereras. Estas últimas se han visto penalizadas por la rebaja de precio objetivo que ha realizado JP Morgan sobre Acerinox (-2,67%), que ha terminado arrastrando a Arcelormittal (-4,71%). Mientras tanto, Bankia ha acusado con una caída del -2,58% un informe de HSBC que apenas le otorga potencial en bolsa. El sector bancario ha caído en bloque a pesar del dato de morosidad facilitado por el Banco de España, que sitúa la mora en el 6,01% en lo que es su nivel más bajo desde 2011.

IAG ha sido otro valor que ha sufrido un cambio de recomendación negativo, en este caso por parte de Morgan Stanley. Sin embargo, sus acciones subían hoy un 0,11% gracias a las caída del petróleo y a los buenos resultados presentados hoy por la aerolínea lowcost británica EasyJet. Por su parte, Repsol escapaba de las pérdidas (+0,20%) al publicar ayer al cierre sus datos de producción, que se incrementó un 2,9% en 2018 y un 4,5% en el cuarto trimestre del año pasado.

Ha sido un día ajetreado para el Tesoro español, que a la vez que colocaba Letras a 3 y 9 meses por valor de 1.300 millones de euros, ha culminado con éxito la adjudicación de un bono sindicado a 10 años. El importe asignado ha sido de 10.000 millones de euros frente a una demanda de 47.000 millones, lo demuestra el apetito que existe por nuestra deuda. En el mercado secundario ha sido un día de caída de rentabilidades, con el bono a diez años alemán otorgando una rentabilidad del 0,24%, el estadounidense del 2,75% y el español del 1,34%.

En el plano macroeconómico conocíamos la encuesta ZEW alemana, que ha mostrado una cara bien distinta en su vertiente de situación actual que en la de expectativas. Esta última encadena 2 meses subiendo, un optimismo que coincide con la tregua firmada entre EE.UU. en el G20 de finales de noviembre. Sin embargo, la encuesta de situación actual ha descendido por cuarto mes consecutivo hasta mínimos de 2015.