Con Wall Street cerrado por festivo, la sesión en Europa ha transcurrido más tranquila y con un claro descenso en el volumen de negociación. id:47354
Los principales índices europeos han cerrado con
pequeños avances como el del Ibex, que ha sumado un 0,07% hasta los 9.401 puntos. La única bolsa que se ha desmarcado ha sido la de Milán (+0,98%), que sigue celebrando que finalmente la Comisión Europea no le haya abierto un procedimiento disciplinario a Italia a cuenta de su excesivo déficit.
Dentro del Ibex ha vuelto a destacar Masmovil (+3,17%), que acumula un avance del 8% en apenas dos sesiones. Con subidas similares han cerrado hoy Caixabank (+3,2%) y Ence (+3,17%), mientras que por el lado de los descensos, la peor parte se la han llevado Enagás (-4,3%) y Naturgy (-3,3%) ante la incertidumbre regulatoria que rodea al sector del gas en España.
En un discurso de Luis de Guindos en Lisboa, el vicepresidente del BCE se ha encargado de recordar que los vientos en contra que sufre la economía de la eurozona, hacen necesaria una postura acomodaticia. Ha subrayado la importancia de que las entidades financieras refuercen sus balances ante una eventual sacudida, destacando en este sentido que los ratios de capital de la banca son a día de hoy muy superiores a los que había en 2010.
Mientras tanto, el mercado sigue tratando de interpretar la manera en la que Christine Lagarde presidirá el BCE. Dando por asumido que en política monetaria mantendrá una línea continuista a la mostrada por Mario Draghi, algunos quieren buscar algo positivo en su perfil, que es claramente más político que el de sus antecesores. Quizá ella consiga influir en los diferentes gobiernos de los países de la eurozona y convencerles de la necesidad de realizar reformas estructurales y adecuar su política fiscal, que es una vieja reivindicación del organismo.
A nivel macro, todas las miradas se centrarán mañana en la publicación del informe de empleo de EE.UU. De la agenda de hoy apenas cabe mencionar el dato de ventas minoristas de mayo en la zona euro, que ha quedado algo por debajo de lo previsto (+1,3% vs +1,6% estimado); este indicador llega creciendo de manera ininterrumpida desde 2014.
En el mercado de renta fija se ha frenado el descenso que venía sufriendo el bono alemán, que se ha anclado en el -0,38%. En el caso del bono español, la rentabilidad incluso ha subido ligeramente hoy, desde el 0,21% hasta el 0,24%. Sorprende también ver al bono portugués en el 0,33%, teniendo en cuenta que ofrecía a finales de 2018 un 2% y ya no digamos en 2011, cuando llegó a tocar el 13%.