Cada vez son más las personas que deciden alquilar espacios para almacenar todo aquello que no pueden guardar en casa. id:45723
La demanda de trasteros en los centros urbanos es una tendencia en alza. La falta de espacio en las viviendas, con el auge de los mini pisos en el centro de ciudades como Madrid o Barcelona y, la subida de los precios del alquiler -un 1,8% en 2018 con respecto a 2017, según un
informe realizado por el portal inmobiliario Fotocasa-, hace que cada vez sean más las personas que deciden
alquilar espacios para almacenar aquello que no pueden guardar en casa.
Otro factor a tener en cuenta es que solo el 23% de los pisos en alquiler en España tienen trastero y el precio del alquiler de estas viviendas asciende entre un 14% y un 20% en comparación con los inmuebles que no cuentan con este espacio, según datos del portal Idealista.
En este contexto, no es de extrañar que el sector del Self Storage (alquiler de trasteros en inglés) ya crezca a un ritmo superior al 15% cada año, según la AESS (Asociación Española de Self Storage).
“Esta demanda del alquiler de trasteros se incrementa en momentos puntuales como mudanzas, el nacimiento de un hijo, reformas, etc. en los que alquilar un trastero es una solución temporal muy efectiva, pero también se puede prolongar en el tiempo, adaptándose a cada necesidad. De hecho, los trasteros se han convertido en una habitación más de la casa donde guardar todos aquellos objetos que queremos conservar, pero para los que no tenemos espacio suficiente”, explica Nicolás Pérez, CEO y cofundador de OhMyBox!, empresa líder en alquiler de trasteros urbanos.
Desde esta compañía afirman que son ya muchas las personas y empresas que utilizan este tipo de servicio por sus diferentes ventajas.
Alquiler según las necesidades: se puede ampliar o disminuir el espacio alquilado en función de lo que se necesite en cada momento.
Sin permanencia: la principal ventaja de alquilar un trastero es que no es necesario tenerlo en propiedad indefinidamente. En numerosas ocasiones, la demanda de espacio se produce por una situación personal puntual y de forma temporal. Es posible alquilar estos espacios para ciertos días, sin obligación de contratar por meses o semanas.
Proximidad, libertad de horarios y seguridad. Otra de las ventajas es la cercanía de los trasteros. Al estar situados en núcleos urbanos, es muy sencillo acceder a ellos cuando sea necesario sin tener que realizar grandes desplazamientos. Además, son accesibles 24 horas durante los 365 días del año y están continuamente vigilados por sistemas de cámaras de seguridad.
Atención personalizada: los usuarios cuentan con el asesoramiento de profesionales que informan y aconsejan sobre los espacios disponibles, sus características y las condiciones de arrendamiento en función de cada caso.
Una habitación más de la vivienda: debido a su cercanía y a su ubicación céntrica, los trasteros se convierten en una habitación más de la vivienda que visitar cuando sea necesario, donde guardar la ropa de temporada, almacenar libros y fotos o incluso practicar algún pasatiempo.