En Lexus, la artesanía es, sobre todo, maestría. Cada detalle se piensa y se mejora de manera constante. id:57056
Este impulso surge de una tradición arraigada en lograr que incluso los objetos cotidianos de alta calidad se conviertan en creaciones excepcionales. Esa precisión se trabaja independientemente de si el propietario final de un vehículo lo apreciará o no. Para el maestro artesano
Takumi, lograr la excelencia es su propia satisfacción.
Lexus hoy se vale de la más moderna tecnología para diseñar y fabricar sus vehículos, pero todo lo que hace sigue girando en torno a las personas. Fiel a su condición de compañía centrada en las personas, Lexus confía en las habilidades de sus maestros Takumi para alcanzar las más altas cotas de calidad. El talento de estos entregados artesanos no tiene parangón, y son ellos quienes dirigen y forman a los hombres y mujeres que aportan una calidad muy especial a cada Lexus producido.
En Lexus, los maestros Takumi de la fábrica son los mejores entre los mejores. Por ejemplo, entre los 7.700 trabajadores de la planta de Lexus Miyata en Kyushu, Japón, solamente hay diecinueve Takumi. Cada uno cuenta, como mínimo, con un cuarto de siglo de experiencia, tras haber pasado miles de horas perfeccionando sus habilidades y aprendiendo a detectar hasta las imperfecciones más pequeñas. Cada uno se centra en un elemento en particular del proceso de fabricación de automóviles (fundición del motor, pintura y estampado de la carrocería, por nombrar algunos).
Los Takumi tienen la tarea de inspeccionar meticulosamente y garantizar, personalmente, de modo manual y visual, que las más de 30.000 piezas que componen cada vehículo estén montadas con precisión. La influencia del Takumi resuena en todas las instalaciones de montaje de Lexus. No solo diseñan los procesos que mantienen las líneas funcionando sin problemas, sino que también son responsables de la formación de otros técnicos. Todos los miembros del equipo de la planta trabajan de manera continua para mejorar sus habilidades y alcanzar el nivel de Takumi.
Incluso los robots son discípulos del Takumi. Las habilidades altamente desarrolladas del Takumi se han digitalizado y programado en muchas de las funciones robóticas. Por ejemplo, se mapean los movimientos de los brazos de un pintor maestro, mientras pinta el panel de un automóvil y posteriormente son repetidos por robots. Una vez digitalizados, algunos de los talentos del Takumi son altamente transferibles de forma mecánica a otras plantas de ensamblaje. En palabras de Akio Toyoda, Presidente de Toyota Motor Corporation, “un coche solo debe fabricarse si es excelente, y el rol de los Takumi en las plantas de Lexus es un pilar esencial en este objetivo”.