El Tribunal de Justicia de la Unión Europea establece que la limitación de reserva de contratos públicos a determinados centros especiales de empleo es compatible con la normativa comunitaria. id:76680
La
Federación Empresarial Española de Asociaciones de Centros Especiales de Empleo (FEACEM) ha valorado positivamente la sentencia emitida por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea que avala la Ley de Contratos del Sector Público, que circunscribe la reserva de licitaciones públicas solo a los centros especiales de empleo (CEE) de iniciativa social.
Tal y como ha recordado el presidente de FEACEM, Daniel-Aníbal García, y así viene recogido en la sentencia, la Unión Europea sienta las bases mínimas para los procedimientos de contratación pública con reserva, pero son los Estados miembro quienes tienen potestad para, a la hora de legislar, ser más restrictivos y, de este modo, perseguir fines de política social y de empleo mediante instrumentos de contratación pública.
García ha asegurado que desde la Federación consideran que los requisitos establecidos por la legislación española “respetan los principios de igualdad de trato y proporcionalidad que exige la normativa europea”. En este sentido, la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) afirma que “procede señalar que tanto el requisito relativo al apoyo y a la participación, directa o indirecta, en más del 50 % de entidades sin ánimo de lucro como el relativo a la obligación de reinvertir la totalidad de los beneficios en los centros especiales de empleo de iniciativa social, indicados en el apartado 34 de la presente sentencia, parecen adecuados para garantizar que tales centros especiales de empleo tengan como objeto principal la inserción de las personas con discapacidad o desfavorecidas”.
Esta sentencia, por tanto, está en línea con la legislación española, “que apostó en su momento por la reserva para los centros especiales de empleo de iniciativa social y reconoció el valor de la iniciativa social; y ahora, así lo han confirmado los tribunales”, ha indicado el presidente de FEACEM, que ha agradecido “la apuesta de nuestro país para la plena inclusión de las personas con discapacidad y, en concreto, que haya tenido en cuenta a los centros especiales de empleo de iniciativa social en la reserva de la contratación pública”.
Estos CEE de iniciativa social tienen prioridades y objetivos diferenciados de los de iniciativa empresarial. Por un lado, están motivados por una finalidad social reforzada, no lucrativa, que tiene a las personas en el centro. El objetivo final y último de la actividad es la creación de oportunidades laborales para las personas con discapacidad y la mejora continua de la actividad y de los servicios que ofrecen. Además, están promovidos o participados en más de un 50% por una entidad sin ánimo de lucro y tienen la obligación de reinvertir íntegramente sus beneficios para la creación de oportunidades de empleo para personas con discapacidad y la mejora continua de su competitividad y actividad de economía social. Esta reinversión puede realizarse en el propio centro especial de empleo o en otros centros especiales de empleo de iniciativa social.
Según García, “la labor diferencial de los centros especiales de empleo de iniciativa social, su naturaleza y su contribución al empleo de las personas con discapacidad y a la economía social son criterios que bien merecen ser tenidos en cuenta en diferentes ámbitos, como el de la reserva de licitaciones públicas solo a los centros especiales de empleo de iniciativa social contemplada en la Ley de Contratos del Sector Público”. Así, con esta sentencia, los CEE de iniciativa social encuentran “respaldo a su actividad y pueden mantener su labor social como hasta ahora, viendo reforzado el marco legal de la contratación pública que nos ampara”.
“Desde FEACEM vamos a seguir trabajando para que los centros especiales de empleo de iniciativa social tengan la consideración que merecen, y para que su contribución al empleo de las personas con discapacidad y a la economía social sea tenida en cuenta en todos los ámbitos. Creemos en este modelo, en lo que reporta a la sociedad y a las personas con discapacidad”, ha concluido García.