Si es residente en España, debe pagar impuestos españoles sobre sus ingresos mundiales. Los impuestos se aplican en una escala progresiva, aunque existen deducciones fiscales. Si es usted no residente en España, sólo paga impuestos en España sobre los ingresos españoles, normalmente a tanto alzado. Esto también incluye los posibles ingresos de la propiedad española, incluso si no alquila su propiedad. El impuesto español también se aplica a la propiedad de bienes inmuebles, a los intereses de las inversiones y a los bienes y servicios en España.
Los impuestos en España se dividen entre el Estado y las Comunidades Autónomas. Esto significa que los tipos impositivos españoles pueden variar en todo el país para el impuesto sobre la renta, el impuesto sobre la propiedad, el impuesto sobre el patrimonio, el impuesto sobre las ganancias de capital y el impuesto sobre sucesiones. Además, los trabajadores en España deben contribuir con sus cotizaciones a la Seguridad Social. El año fiscal español va del 1 de enero al 31 de diciembre. En consecuencia, aunque el Estado ha simplificado los tramos del IRPF, el sistema fiscal en toda España sigue siendo complejo. En términos más sencillos, la cantidad de impuestos que usted paga en España depende de su lugar de residencia.
Si ha vivido en España durante seis meses -183 días- o más del año natural -no necesariamente de forma consecutiva- o tiene sus principales intereses vitales en España -por ejemplo, su familia o su negocio están en España-, entonces se le considera residente español a efectos fiscales.
Impuestos en España para no residentes
Si vive en España durante menos de seis meses -183 días- en un año natural, es un no residente y sólo paga impuestos sobre los ingresos procedentes de España. Los impuestos se aplican a sus ingresos a tanto alzado, sin bonificaciones ni deducciones. Para ahorrar impuestos es recomendable que obtenga más información sobre la Ley Beckham aquí. Si no es residente y es propietario de un inmueble en España, tanto si lo alquila como si no, deberá presentar una declaración de la renta y pagar los impuestos sobre la propiedad española para no residentes -o el impuesto sobre la renta imputado a su propiedad-, así como los impuestos locales sobre la propiedad española.
Acuerdos de doble imposición
España ha firmado muchos tratados con otros países para evitar la doble imposición. La autoridad fiscal española mantiene una lista actualizada de los tratados.
Darse de alta para tributar en España: residentes y no residentes
Tendrá que darse de alta para pagar impuestos en España con la autoridad fiscal española, tanto si es residente como si no lo es. En primer lugar, necesitará su número de Tarjeta de Identidad de Extranjero (NIE), que puede obtener a través de la Oficina de Extranjeros local o de la comisaría de policía en los 30 días siguientes a su llegada a España.