La accesibilidad auditiva constituye un derecho universal, pero también puede convertirse en una forma de atraer viajeros. El sector turístico debe reflexionar sobre la oportunidad de contar con hoteles accesibles para personas con discapacidad auditiva. id:79992
Esta semana (del 19 al 23 de enero) se celebra en Madrid Fitur (Feria Internacional de Turismo). Las cifras anuales de visitantes no representan ninguna tendencia porque la pandemia de COVID-19 ha lastrado considerablemente el desarrollo del sector. AG Bell International, entidad que trabaja para mejorar la calidad de vida de las personas con sordera e hipoacusia, recuerda que, según datos de prevalencia de la presencia de pérdida auditiva en la población, el 16% de los turistas que viajan a España tiene problemas de audición.
La accesibilidad auditiva constituye un derecho universal, pero también puede convertirse en una forma de atraer viajeros. El sector turístico debe reflexionar sobre la oportunidad de contar con hoteles accesibles para personas con discapacidad auditiva. A este respecto, AG Bell International sugiere que se introduzcan mejoras en la accesibilidad auditiva de la red hotelera.
En el documento La accesibilidad en hoteles para personas con discapacidad, la entidad explica cómo adaptar los establecimientos. “Con solo una pequeña inversión -explica Carmen Abascal, directora de AG Bell International- se puede lograr que el sector ofrezca más servicios; así los hoteles serán más rentables”.
Entre las sugerencias de AG Bell Internacional figuran el uso de materiales absorbentes que contribuyen a mejorar el confort y pueden incorporarse como elementos decorativos. Además del cuidado de los ruidos del entorno, disponer de despertadores y sistemas de alerta individuales para los clientes o la instalación de bucles magnéticos en recepción y salas de reuniones ayudan a mejorar la accesibilidad de los hoteles.
La formación específica del personal que atiende a los turistas también en estrategias de comunicación favorece la accesibilidad: hablar de frente, escribir o dibujar, proporcionar información escrita y ofrecer la posibilidad de comunicarse por un sistema de chat o por sms. Además, debe tenerse en cuenta la contratación de algún empleado que conozca la lengua de signos o un servicio de tele interpretación. También debe incluirse en el plan de prevención de riesgos el personal responsable en la evacuación de personas con discapacidad. AG Bell International aconseja consultar con profesionales especializados para implementar las medidas de acondicionamiento auditivo.
En su página web hay una sección de Lugares accesibles en la que se pueden encontrar los sitios y los servicios accesibles de la ciudad que se visita. En cualquier caso, se aconseja que, antes de realizar una reserva, el cliente consulte sobre las distintas adaptaciones que tiene el hotel mediante fax o correo electrónico.
El problema de las mascarillas
Un problema añadido para los viajeros con pérdida auditiva es el uso de la mascarilla. La crisis de la pandemia afecta a las personas con problemas de audición en el acceso a la información. Las mascarillas higiénicas y quirúrgicas dificultan la comunicación porque impiden la lectura labial y amortiguan el volumen de la voz. Las mamparas en algunos establecimientos tampoco ayudan. AG Bell International recomienda usar otras formas de comunicación, como lápiz y papel, la grabadora de audio del móvil o tableta o el uso de asistente virtual. Además, la interpretación de voz a texto está disponible a través de aplicaciones para teléfonos móviles y puede utilizarse en las interacciones cotidianas para proporcionar subtítulos en directo de la conversación.