La carretilla elevadora autónoma con contrapeso se guía con inteligencia de enjambre

Con el ONE, la línea de producto de carretillas elevadoras de alta eficiencia y ultraligeras de AGILOX, la compañía ha rediseñado el concepto de los vehículos AGV. Las flotas funcionan sin necesidad de un sistema central de control, es decir, los vehículos navegan por las instalaciones de producción o almacén de manera totalmente autónoma. Los IGV increíblemente compactos de AGILOX organizan sus rutas según los principios descentralizados de la inteligencia de enjambre, permitiéndoles así ser mucho más flexibles que los AGV tradicionales. Además, la programación o la "enseñanza" de los vehículos es considerablemente más sencilla y hace que los programas de software centrales que incluyen mantenimiento, actualizaciones y otras características sean cosa del pasado. Representan una innovación que reduce los costes operativos.

AGILOX amplía ahora su gama de vehículos IGV para incluir el OCF, abreviatura de "Omnidirectional Counterbalanced Forklift" (carretilla elevadora ominidireccional con contrapeso). Mientras que la ONE está equipada con un elevador de tijera como dispositivo para controlar la carga y, por ende, transportar la carga dentro del perímetro del vehículo, la OCF está diseñada según los principios de la carretilla elevadora con contrapeso. De esta manera, puede recoger paletas, cajas de rejilla y otros portacargas con un peso máximo de 1500 kg (3300 libras), transportarlos hasta el destino y colocarlos a una altura de hasta 1600 mm (63 pulgadas).

El concepto inteligente y económico IGV de AGILOX abre nuevos campos de aplicación. Los vehículos ONE se utilizan principalmente para el suministro de materiales durante la producción, pero los OCF facilitan las tareas clásicas de intralogística en la entrada y salida de productos, la preparación de pedidos y el almacenaje, igual que en la producción, siempre que el transporte se realice con paletas.

Al igual que el ONE, el OCF utiliza un concepto de desplazamiento omnidireccional. De esta manera puede moverse lateralmente en pasillos estrechos, girar sobre sí mismo y maniobrar en los espacios más angostos. La misma tecnología de batería de iones de litio (LiFePO4) garantiza tiempos de carga cortos y grandes autonomías: en solo tres minutos de carga se obtiene hasta una hora de funcionamiento.

Las flotas de IGV pueden conectarse con los sistemas de software del cliente (LVR, ERP, WMS, MES, etc.) mediante un interfaz API abierto. Hay una caja IO opcional que facilita la integración de infraestructuras externas como, por ejemplo, puertas deslizantes y sistemas de transporte estacionario, en el sistema de control inteligente. Un módulo de análisis ofrece al usuario todos los datos importantes de funcionamiento e indicadores KPI.

El Ing. Dipl. Franz Humer, máster, cofundador y CEO de AGILOX subraya que "el OCF es una incorporación lógica para redondear nuestro catálogo de productos. Con él abrimos nuevas posibilidades para la tecnología de almacenamiento y preparación de pedidos y, por lo tanto, accedemos a un gran mercado en el cual los IGV pueden exhibir sus ventajas sobre los AGV y las carretillas elevadoras guiadas por personas".

El funcionamiento combinado de la ONE y la OCF en un "enjambre" proporciona también grandes ventajas. Por ejemplo, los pequeños vehículos pueden realizar tareas de entrega a las estaciones de trabajo de montaje o ir a estanterías e-Kanban mientras que los OCF pueden encargarse del transporte de paletas utilizando el mismo sistema de control e infraestructura Wi-Fi.

La serie de prueba OCF ya ha sido probada con éxito en Vorchdorf, Austria. La producción en serie comenzará en breve y está prevista la entrega de las primeras carretillas OCF a los clientes el primer trimestre de 2021.