Este miércoles se ha presentado La contribución de la cultura al desarrollo económico en Iberoamérica, un estudio pormenorizado que da cuenta de cuál es el aporte de este sector al conjunto de la economía iberoamericana. id:77346
Este miércoles, 27 de octubre, en el paraninfo de la Universidad de Alcalá de Henares, la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI) y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe de la ONU (Cepal) han presentado el estudio
La contribución de la cultura al desarrollo económico en Iberoamérica. Se trata de una investigación conjunta regional que presenta las cifras más actualizadas sobre el aporte de la cultura a la economía de Iberoamérica a partir de los datos oficiales de los países en aspectos como oferta, consumo, empleo, importaciones, exportaciones y gasto público en materia de cultura.
Durante la presentación, Mariano Jabonero, secretario general de la OEI, ha destacado el valor de la cultura en la región al subrayar que “la cultura es riqueza y empleo”,ya que “aporta entre el 2 y el 4% del PIB de nuestros países y genera millones de puestos de trabajo”. Asimismo, ha puntualizado en que desde la OEI “se apuesta por las industrias culturales y creativas como manifestación de nuestra diversidad y potencial de riqueza”, y estudios como este“son valiosos porque ofrecenevidencia para construir políticas exitosas en esta materia”.
Alicia Bárcenas, secretaria ejecutiva de la Cepal, en un mensaje por vídeo, ha señalado que el estudio, además de exponer las discusiones teóricas que vinculan a la cultura y la economía, “intenta responder a la gran tarea que significará en los próximos años la reconstrucción del sector cultural en el marco de una recuperación en igualdad”. Por su parte, Ernesto Espíndola, coordinador de la Cepal para esta publicación, ha advertido de que “el desarrollo de la cultura es una condición necesaria para alcanzar los objetivos de la Agenda 2030”, al tiempo que ha expuesto que la COVID-19 ha servido como “un llamado de atención” para que los líderes tomen en cuenta el valor de la cultura en sus economías.
Oferta y consumo cultural
El estudio advierte de que, en general, existe un marcado déficit en la región en oferta cultural, especialmente en sectores como el patrimonio —material, natural e intangible—, así como en las presentaciones artísticas, las celebraciones y las artesanías. Sin embargo, con la digitalización que ha experimentado el sector, otros formatos se han visto fortalecidos, como los libros digitales, cuya proporción de títulos con registro ISBN en formato digital pasó del 21 % al 25 % en 2017, alcanzando la proporción más alta de la década.
Con la pandemia, la aceleración de digitalización impulsó un incremento sin precedentes del acceso a la cultura online. El estudio señala que museos, galerías y librerías han abierto sus puertas a las visitas virtuales y han expandido el acceso a los e-books, en una región con una amplia brecha en cuanto al acceso a internet, con España y Chile a la cabeza con 85 % y 82 %, respectivamente, y Nicaragua en último lugar, con un 28%.
En cuanto a consumo, España, Brasil, México y Argentina presentan las cifras de más participaciónen actividades culturales, y el consumo de televisión y radio sigue siendo la actividad predilecta en Iberoamérica. Destaca Portugal, que con un 46 %, es el país iberoamericano donde sus ciudadanos más asisten a museos; por su parte, en España y Uruguay alrededor de un cuarto de su población asistió a una función de teatro en el último año. Respecto al consumo de libros, Chile y Brasil están a la cabeza, en ambos países más de dos tercios de sus habitantes leyó al menos un libro en 2017.
Empleo: predomina el sector privado
En 2019, el sector cultural representó el 1,7 % del empleo total de Iberoamérica. De acuerdo con el estudio, el sector público continúa la tendencia a la baja en su participación en los puestos de trabajo de cultura: entre 2012 y 2019la participación del sector público bajó un 2,3 %. Por el contrario, el sector privado lleva la batuta con el 98,6 % de los empleos, de los cuales, un 56 % lo ofrecen microempresas.
Asimismo, en cuanto a la composición y condicionesde los trabajadores iberoamericanos en el sector, se destaca que dos de cada tres son hombres, y en su mayoría tienden a ser más jóvenes que los trabajadores del mercado laboral total. Esto, sumado al hecho de que la tasa de paralización entre los trabajadores culturales rondó el 26% en once países de Iberoamérica (Mercosur más México y Costa Rica) entre julio y agosto de 2020, mientras que un 55% de los encuestados reportó caídas mayores al 80% de sus ingresos, según otro estudio recientemente hecho por ambas instituciones, en conjunto con Mercosur, el BID y la Segib.
Importamos más de lo que exportamos
En cuanto a comercio exterior, el estudio refleja que la región importa más de lo que exporta en bienes y servicios culturales. Con México y España liderando el volumen de transacciones internacionales en esta materia,las importaciones de la región en 2019 supusieron casi 50 millones de dólares—un 4,4 % del total de la región—, frente a 43 millones de dólares en exportaciones, lo que equivale a un 4,2 % del total de las exportaciones de Iberoamérica ese año.
En lo relativo al gasto público, la región se acerca al objetivo común de lograr el 1 % del total de la región, según lo pactado en la XVI Cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de 2006, en Montevideo. En 2019, con grandes diferencias entre países, el gasto público compartido en cultura alcanzó el 0,9 %, siendo un 0,23 % del PIB iberoamericano, según el estudio.
Esta publicación forma parte de una serie de investigaciones conjuntas realizadas por ambas organizaciones con el ánimo de generar conocimiento para la formulación y ejecución de políticas públicas en materia de cultura. Así, destacan los estudios Avanzar en un espacio cultural Compartido. Desarrollo de la Carta Cultural Iberoamericana, realizado en 2012y Cultura y Desarrollo Económico en Iberoamérica, que se publicó en 2014.