La resiliencia de las pequeñas empresas en el punto de mira

La tercera encuesta del Índice de Resiliencia Organizacional anual, realizada a líderes empresariales de todo el mundo, fue publicada por BSI a finales de 2019. Un estudio que no podría haber llegado en un momento más oportuno ya que se realizó unas pocas semanas antes de la pandemia de COVID-19 y destaca los principales desafíos que influyen en la capacidad a largo plazo de una organización para sobrevivir, crecer y prosperar.

Conclusiones generales

El Índice revela que, en todos los sectores, la innovación, el análisis del entorno y la capacidad de adaptación son las cuestiones que más afectan a la resiliencia organizacional, pero que el rendimiento de estas áreas ha disminuido en los últimos 12 meses.

También pone de relieve que los directivos de las empresas están tratando de adaptarse a la aparición de nuevas tecnologías en medio de la incertidumbre política y económica e identifican dicha aparición como la mayor oportunidad y la más grave amenaza para su éxito.

El reto que tienen por delante las organizaciones en crecimiento

Dada la coyuntura actual, el impacto adicional del COVID-19 amenaza algunos resultados aleccionadores para muchas pequeñas empresas.

La pandemia del coronavirus ha afectado a todos los sectores de las pequeñas empresas, y sus daños se han sentido en todo el mundo. Tras haberse preparado para el crecimiento y, por lo tanto, para niveles más altos de actividad, muchas empresas se enfrentan ahora a una crisis de flujo de caja debido a que han perdido repentinamente sus negocios y se han visto obligadas a pisar el freno.

Las cadenas de suministro interrumpidas, el cierre de instalaciones, las líneas de producción detenidas y un flujo de caja reducido son los retos a los que los directivos de la industria de pequeñas empresas se están enfrentando ahora, lo que pone de relieve la necesidad constante de que se cuestionen la resiliencia de sus organizaciones.

Además de ayudarles a gestionar y mitigar diversos riesgos, la resiliencia de la organización puede reforzar su capacidad para aprovechar las oportunidades – porque incluso en una crisis, pueden surgir oportunidades, por ejemplo, para algunas organizaciones sanitarias, tecnológicas y de alimentación durante la pandemia de coronavirus.

Más allá de los acontecimientos recientes, las pequeñas empresas seguirán desempeñando un papel fundamental en las economías de todo el mundo, generando empleo, añadiendo valor y contribuyendo a la innovación. Se beneficiarán enormemente de una mayor comprensión de lo resilientes que son.

El Índice de Resiliencia Organizacional de BSI

El Índice de Resiliencia Organizacional de BSI puede proporcionar una visión más profunda al indicar el rendimiento de las pequeñas empresas en los elementos fundamentales de la resiliencia, y luego al destacar el impacto de estos aspectos en el sector.

Debe tenerse en cuenta que este es un estudio "relativo" ya que los líderes pueden pensar que los 16 elementos fundamentales tienen un impacto en su negocio, pero no los ven con el mismo grado de impacto y los han clasificado en consecuencia. Del mismo modo, perciben variaciones en el rendimiento entre los 16 elementos, lo que también da lugar a un ranking.

A través del uso de rankings, la resiliencia de las organizaciones puede medirse de dos maneras: primero, viendo dónde rinden relativamente bien; segundo, y más importante, centrándonos en lo bien que rinden en los elementos que tienen más impacto en su negocio.

Se considera que el liderazgo y la capacidad de adaptación son los factores que más influyen en el mantenimiento de la resiliencia organizacional en el ámbito de las pequeñas empresas.

Sin embargo, la capacidad de las organizaciones para adaptarse a los cambios ha disminuido por primera vez debido a la agitación del mercado. El Índice sugiere que el aumento de los efectos disruptivos de la tecnología son la fuerza motriz detrás de la capacidad de adaptación, y esta tendencia a largo plazo parece destinada a continuar.

Se necesitan líderes fuertes para adaptar la estrategia a las circunstancias cambiantes, es decir, la implicación del personal, la dirección clara y el rendimiento empresarial se valoran ahora con más fuerza que la innovación y la perspicacia política como habilidades fundamentales de liderazgo. En momentos de volatilidad, los líderes resilientes de las organizaciones en crecimiento reconocen el valor de invertir en una cultura que inculca un claro enfoque estratégico junto con la confianza y la libertad táctica para tomar la ruta más efectiva.

¿Dónde están sus fortalezas y debilidades?

Corresponde a las juntas y a cada uno de los dirigentes de las pequeñas empresas el crear resiliencia organizacional tanto a nivel estratégico como operacional. Existen instrumentos de ayuda, desde normas específicas para cada sector hasta certificaciones más amplias para disciplinas como la gestión de la continuidad de negocio y la gestión de la seguridad de la información, así como para la propia Resiliencia Organizacional.

Para conocer las fortalezas y debilidades de su organización - y cómo se compara con las organizaciones que se encuentran en el Índice de Resiliencia Organizacional de BSI - rellene nuestro índice comparativo sobre resiliencia organizacional , un sencillo cuestionario que se encuentra online aqui.

Este índice le mostrará sus resultados en un diagrama de araña. Le permitirá comparar cómo percibe su rendimiento en los 16 elementos fundamentales con los resultados generales.

Nota: 93 de las 807 organizaciones encuestadas identificaron la pequeña empresa como su área de trabajo.