Integrada por las principales compañías del sector, la Plataforma de Autoescuelas Digitales (PAD), representa un creciente modelo de enseñanza que aprovecha los recursos de las nuevas tecnologías para crear entornos de interacción eficaces con sus alumnos. id:41709
Las principales autoescuelas digitales, representadas por Dribo, MiCarnet, Miteórico, Obikar, PracticaTest y Súper Express entre otras, han creado una plataforma con el fin de defender la educación vial online y apostar por un modelo de enseñanza basado en la innovación y el uso de las nuevas tecnologías.
Alejadas de los sistemas de “test online”, las autoescuelas digitales abogan por una formación integral, creando entornos de interacción eficaces con contenidos audiovisuales, seguimiento de alumnos y una asesoría permanente con profesores altamente cualificados. De hecho, conscientes de la importancia de concienciar y sensibilizar hacia actitudes responsables al volante, la PAD (Plataforma de Autoescuelas Digitales) ha propuesto un proyecto educativo para preconductores como alternativa a la formación obligatoria teórica presencial que pretende entrar en vigor en julio de 2019. El informe, presentado ya a la DGT, basa su actuación en un enfoque preventivo y busca potenciar la creación de actitudes y comportamientos para la convivencia pacífica y el uso eficiente y sostenible de nuestro entorno vial.
El nuevo Real Decreto impulsado por la DGT, que aún se encuentra en borrador, plantea introducir importantes cambios a la hora de obtener el carnet de conducir. Uno de ellos es la obligatoriedad para los alumnos de recibir 8 horas de formación presencial en las autoescuelas. Según Miguel González-Gallarza, portavoz de PAD, que considera que la medida no se adapta a la realidad de la sociedad contemporánea, “esta propuesta incrementaría el precio del carnet de conducir, añadiría costes extras de desplazamiento y dificultaría el acceso a colectivos especialmente vulnerables. La formación online es un modelo plenamente integrado en el sistema educativo español y utilizado por las mejores instituciones académicas. No se puede justificar científicamente que la formación presencial garantice una mejor calidad educativa para obtener el carnet”.
Nuevos modelos de enseñanza
Los millennials, pero sobre todo los jóvenes de la generación Z (nacidos entre 1994 y 2010), considerados nativos digitales, están revolucionando todos los sectores, incluidos el pedagógico, y es necesario establecer fórmulas innovadoras que garanticen una educación personalizada adaptada a perfiles de alumnos habituados a comunicarse e interactuar en la red. En PAD reconocen que resulta paradójico que desde el gobierno se trabaje para liderar la revolución digital y crear un “país de startups”, y que se pretenda poner freno a la formación online favoreciendo sistemas de enseñanza más conservadores. “Estamos totalmente comprometidos con la necesidad de mejorar la formación de los futuros conductores, pero no entendemos que para ello sea necesario exigir una asistencia presencial, coartando así la libertad del alumno para elegir dónde y cómo quiere estudiar, y erosionando la libre competencia, así como el esfuerzo económico y personal que han realizado muchas pequeñas autoescuelas por digitalizarse”, asegura Miguel González-Gallarza.
La formación presencial no garantiza una menor siniestralidad
El último Informe Anual de Seguridad Vial (2017) realizado por la OCDE revela que España es el sexto miembro de la Unión Europea con menos muertes, con 3,6 fallecidos por cada 100.000 habitantes, en una clasificación que encabeza Noruega (2,3), Suecia (2,7), Reino Unido (2,8), Dinamarca (3,1), e Irlanda (3,5), países donde la formación, a excepción de en Dinamarca, es completamente libre. Los estados que mantienen la educación vial presencial tienen peor índice de siniestralidad; es el, caso de Grecia (7,3), República Checa (7,0), Hungría (6,5), Bélgica (6,5) o Portugal (5,7). Además, en concreto en España, desde el 2010, año en que empezaron a operar las autoescuelas digitales, la tasa de accidentes con víctimas en vías interurbanas de conductores noveles ha bajado de un 2,11 a un 1,56 (año 2017[1]). Estos datos reflejan no solo la no correlación entre formación presencial y baja siniestralidad, sino que avalan el papel educativo que se realiza desde los nuevos modelos de enseñanza digitales.
Miguel González-Gallarza, portavoz de PAD cree que “no se puede tratar a los nuevos conductores como futuros infractores, ofreciendo un curso similar al que se realiza para la recuperación de puntos. Debemos incidir en elaborar herramientas de prevención y ofrecer plataformas e-learning de calidad”.
La PADtiene como principal objetivo defender los derechos de sus estudiantes y proteger un espacio virtual de aprendizaje, que fomenta la interacción entre tutores y alumnos, el intercambio de información, la realización de evaluaciones en línea o el uso de nuevas herramientas sociales. Las actuales plataformas de e-learning, concebidas como aulas virtuales, no sólo son más flexibles y económicas, sino que posibilitan un aprendizaje constante, más dinámico, sin ritmos ni tiempos impuestos y sin barreras geográficas. “No somos un medio para realizar test en casa. Las autoescuelas tradicionales y digitales podemos y debemos convivir en un mercado que cada vez más exige propuestas rupturistas, adaptadas al entorno digital. Este freno normativo nos hace retroceder muchos años. Es como si se prohibiese por decreto el modelo de las universidades a distancia para proteger los intereses de la universidad convencional”.
[1] DGT