Las cortinas de lama de PVC son ideales en la industria por su asepsia

Cuando un emprendedor o emprendedores deciden montar una empresa y esa empresa se dedica a la manipulación de alimentos, a la fabricación de los mismos, o si se monta una industria química, relacionada con laboratorios farmacéuticos o, simplemente, un restaurante o un hotel, se debe tener en cuenta el material que se aplica en cada espacio y qué uso va a tener.

En esa apuesta por tomar las mejores decisiones es bueno contar con una serie de expertos y de marcas que tengan solvencia en el mercado y que sean capaces de solventar los escollos iniciales. Por ejemplo, pongamos a imaginar que se monta una fábrica de magdalenas donde no solo se van a amasar las materias primas, sino que se van a hornear, embalar y almacenar.

Toda esa cadena dispensa de varios espacios que, por ley e higiene, han de estar separados, pero que, entre ellos, exista una comunicación visual continua. ¿Qué solución existe para ello?, pues, las cortinas de lamas PVC, son resistentes, fáciles de colocar, se adaptan a los espacios y, además, son económicas.

Sin duda, contar con un buen proveedor de cortinas de PVC es esencial, ya que mantienen los espacios comunicados, incluso sonoramente. También es fácil que con las aberturas de esas cortinas transiten carretillas industriales para transportar la mercancía y que las personas empleadas puedan entrar y salir con facilidad. Sin embargo, diferencia los espacios y mantiene, en cada uno, las características que precisa.

Y, ¿por qué hay razones que llevan a separar espacios? Es fácil mantener la higiene, también la temperatura y otros factores que pueden ser determinantes para cada una de las industrias. Cuando se trata, por ejemplo, de un laboratorio, este tipo de cortinas puede servir para pasar de un espacio a otro sin tener que rozar con las manos, por manipulaciones de elementos peligrosos.

En cualquier caso, es bueno contar con proveedores de cortinas de PVC flexible que salvan muchos de los escollos industriales que le exige la propia legislación para cumplir con parámetros higiénico sanitarios, así como de peligrosidad y de prevención de riesgos laborales.

Una gran solución para las cámaras frigoríficas

Otro de los usos que pueden ser muy habituales de este tipo de cortinas es en las instalaciones de cámaras frigoríficas, así como en mataderos. También en aquellas industrias de ultra conservación por congelación. Ya que la instalación de este tipo de cortinas para cámaras frigorificas solucionan gran parte del problema. Son muy utilizadas en las cocinas de los grandes restaurantes y de los hoteles. Dentro de las cámaras de frío existen diferentes tipos de alimentos, a lo mejor se separa una parte de conservación, de otra de congelación. Estas cortinas permiten un paso fácil, pero también mantienen a raya la temperatura.

Está claro que la enorme resistencia que ofrecen, entre los 50ºC y los hasta -35ºC da buena cuenta de que es un material muy útil, duradero y que, además, precisa de poco cuidado y mantenimiento. Todo ello lleva a pensar que es una de las mejores fórmulas, la de las cortinas industriales PVC para soportar esas temperaturas, mantenerlas, aislarlas y servir, además, de elemento de seguridad.

En el mercado, hay diferentes anchos y alturas de estas cortinas, con ello lo que se pretende es cubrir todo tipo de espacios. En cualquier caso de que los estándares no cumplieran con esas medidas, existen rollos continuos de PVC flexible con el que se pueden elaborar a medida sin ningún inconveniente. Además de que se pueden hacer a medida, los packs de este tipo de cortinas traen, también, las pletinas y contra-pletinas necesarias, fabricadas con acero inoxidable que tienen como función cerrar y sujetar cada una de las lamas, al mismo tiempo, que estas se puedan colgar a la barra que también ofrece la empresa distribuidora y fabricante.

En definitiva, una solución sencilla para situaciones de gran envergadura y a precios muy asequibles. En eso consiste aplicar los conocimientos de la ingeniería de materiales, en facilitar aquellas cuestiones que, en principio, parecen complicadas y, como se demuestra en este caso, han encontrado el perfecto remedio.