A pesar de la mejora de los resultados económicos de los países del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG), las condiciones monetarias y financieras siguen siendo más estrictas que las previas a 2015. id:48851
El acceso a la financiación continúa siendo una cuestión clave para las empresas, en particular para las pymes. El crecimiento de los préstamos en la región se ha recuperado ligeramente gracias al aumento del precio del petróleo, aunque aún permanece por debajo de su media histórica.
A esto han contribuido numerosos factores, entre los que se encuentra el aumento de los precios de la energía, que provocó la retirada de los fondos de emergencia que habían inyectado los gobiernos cuando se desplomó el precio del petróleo. También ha influido la normalización de la política de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), ya que desde que anunciase su normalización en 2013, los bancos centrales del GCC han aumentado su tipo de referencia, en línea con la estrategia de salida de la Fed.
Estas estrictas condiciones de acceso al crédito bancario han forzado a las empresas a buscar fuentes alternativas de financiación en los últimos años, como es el caso de las emisiones de bonos y sukuk, el crédito comercial y las salidas a bolsa. Sin embargo, a pesar de la rapidez en su crecimiento, estas opciones de financiación no representan más que alrededor del 5% del crédito bancario habitual.
Las empresas del CCG esperan con impaciencia la política monetaria expansionista prevista en Estados Unidos, que debería favorecerles.
El crecimiento de los préstamos ha regresado, pero sigue siendo limitado.
Como siempre, la principal incógnita para los bancos del CCG tiene que ver con el precio del petróleo (el escenario de referencia para Coface es de 65 dólares por barril de Brent).
Habida cuenta del aumento del precio del petróleo y la mejora del crecimiento, el conjunto de los préstamos del sector privado en la región del CCG debería aumentar sólo un 5% en 2019, una tasa sensiblemente inferior a la media del 9% registrada entre 2013 y 2015. La encuesta realizada por el Instituto de Finanzas Internacional (IFI) sobre las condiciones de los créditos bancarios evidencia un débil crecimiento de los préstamos en el curso de los próximos trimestres: los bancos continuarán endureciendo las condiciones de crédito en la región de Oriente Medio y el Norte de África en el primer trimestre de 2019.
Los datos relativos a la circulación monetaria en los países del CCG presentan la misma dinámica: un crecimiento positivo, pero débil. Las políticas de la Fed y el precio del crudo juegan un papel importante en las condiciones de liquidez del sector bancario del Golfo. Los países del CCG, excepto Kuwait, siguen un régimen de tipo cambiario fijo, vinculando sus monedas al dólar americano.
En el futuro, la nueva orientación de la política monetaria americana (en el marco de una desaceleración del crecimiento económico en Estados Unidos), debería impulsar el crecimiento del crédito en los países del CCG.
La recuperación del precio del petróleo está ayudando, pero la volatilidad es un reto.
A pesar de que los países del CCG han progresado significativamente diversificando sus economías más allá del petróleo, éste todavía representa la mayor proporción de sus ingresos fiscales (en 2018, el porcentaje de los ingresos de los hidrocarburos en los ingresos fiscales totales ascendió al 70% en Arabia Saudí, 80% en Omán y Bahréin, 60% en Kuwait y Qatar y 55% en Emiratos Árabes Unidos).
Actualmente, el hecho de que el precio del petróleo se encuentre a niveles altos, constituye una seguridad para los bancos, sin embargo, la volatilidad que le rodea sigue siendo un riesgo, sobre todo teniendo en cuenta la decisión de algunos gobiernos del CCG de suavizar algunas de las medidas fiscales de austeridad.
Las empresas optan cada vez más por otras fuentes de financiación.
El crecimiento gradual y moderado de los precios y el endurecimiento de las condiciones de liquidez respecto al período anterior a 2015 han remarcado la importancia de las fuentes de financiación alternativas para las empresas, entre las que se encuentran la emisión de bonos y sukuk.
El mercado de la deuda del CCG tiene que hacer frente a algunos desafíos. La prosecución de los proyectos de infraestructuras y de construcción es clave, ya que constituyen un pilar importante de la diversificación económica y sustentan las necesidades de financiación de proyectos, así como la creciente apertura de los mercados a los inversores internacionales o incluso el progresivo conocimiento de estos instrumentos financieros.