Los mercados comienzan octubre con buen pie

En Estados Unidos, el Senado aprobó la propuesta republicana de elevar el techo de la deuda en 480.000 millones de dólares hasta el 3 de diciembre, evitando así un impago el 18 de octubre. Joe Biden propuso recortar su programa de reforma social en materia de educación, sanidad y clima de 3,5 billones de dólares a 1,9-2,2 billones. Joe Manchin, el senador demócrata cuyo voto es crucial en la negociación, mantuvo su propuesta de 1,5 billones de dólares.

A pesar de la creciente demanda de petróleo, la OPEP+ mantuvo el actual aumento mensual de 400.000 barriles adicionales, lo que hizo que el crudo Brent superara los 80 dólares. La subida de los precios del gas se detuvo el miércoles después de que Vladimir Putin dijera que Rusia aumentaría las exportaciones a Europa en las próximas semanas.

Christine Lagarde reiteró su postura sobre la inflación, afirmando que la situación no requiere que el BCE reaccione. Añadió que el BCE podría crear un nuevo plan de compra de activos para sustituir al PEPP cuando éste finalice en marzo de 2022.

Los indicadores adelantados estadounidenses confirmaron que la economía estaba experimentando una sólida recuperación, con un aumento del empleo y una fuerte inflación. El ISM no manufacturero de septiembre subió de 61,7 en agosto a 61,9, es decir, más de los 60 previstos. Esto se debió al aumento de los nuevos pedidos (63,5 frente a 63,2), reflejo de la resistencia de la demanda estadounidense a pesar de la situación sanitaria y de la inflación. El índice de precios subió de 75,4 a 77,5.

Las cifras de la encuesta ADP y de las solicitudes semanales de subsidio de desempleo también fueron sorprendentemente optimistas.

Y otra buena noticia vino de la mano de Merck y Ridgeback, que declararon que los resultados intermedios de fase 3 de su tratamiento antiviral Covid mostraban una reducción de las hospitalizaciones y las muertes entre las personas frágiles de alrededor del 50%. Las tasas de mortalidad fueron del 7,3%, frente al 14,1% de los sujetos que habían tomado el placebo.

Seguimos siendo neutrales en cuanto a los activos de riesgo, pero con una preferencia por la renta variable japonesa. En renta fija, preferimos los bonos corporativos a la deuda pública.

MERCADOS EUROPEOS

Los mercados de renta variable tuvieron una semana muy agitada debido, una vez más, a la crisis energética. Los mercados sólo se calmaron cuando Vladimir Putin dijo que Rusia tenía intención de aumentar sus exportaciones de gas a Europa. La apuesta geopolítica del presidente ruso sigue siendo la puesta en marcha del proyecto Nord Stream 2. Mientras tanto, el BCE redujo las compras semanales de activos de 30,2 a 27,8 millones de euros. El banco central sigue apoyando la economía, aunque admite que la inflación podría aumentar más de lo previsto en los próximos meses.

Muchas empresas están recortando sus previsiones de beneficios debido a la subida de los precios de las materias primas y a diversas carencias. La tendencia fue especialmente notable en el sector del automóvil, donde la mayoría de las empresas ya han recortado sus previsiones.

BMW y Renault confían en que el aumento de los precios de los automóviles compense en parte las pérdidas derivadas de la escasez de semiconductores. El grupo alemán de semiconductores Infineon Technologies espera ahora que sus márgenes operativos alcancen la cifra récord del 20% y la dirección cree que la tendencia al alza podría continuar en los próximos años. El sector de la construcción espera conseguir la misma hazaña que BMW y Renault. Saint-Gobain y su división Sika confían en que los costes de los insumos puedan trasladarse a los productos finales. En el sector turístico, las reservas para las vacaciones de medio año son bastante alentadoras. El sector está empezando a recuperarse, a juzgar por el factor de carga de Ryanair, que aumentó al 81% desde el 71% interanual. Deutsche Post ha aumentado sus previsiones gracias a los buenos resultados de su división de comercio online, que sigue funcionando bien en el periodo posterior al cierre. Las reacciones mixtas al videojuego Far Cry 6 de Ubisoft han llevado a los analistas a preguntarse si la empresa puede cumplir sus objetivos para todo el año. El precio de las acciones cayó.

MERCADO EE.UU.

Los principales índices terminaron la semana en positivo. El Dow ganó un +2,69%, el S&P500 un +2,14% y el Nasdaq un +1,42%, aunque con importantes disparidades sectoriales, ya que los inversores se decantaron por el valor y no por el crecimiento. Las acciones de automóviles del S&P500, por ejemplo, subieron un +9,6% en las últimas 5 sesiones, y las ferroviarias un +7,9%. Por el contrario, el comercio retail perdió un -2% y los valores de semiconductores también se vieron afectados. Todo ello refleja la preocupación de los mercados por el posible descontrol de la inflación, la interrupción de la cadena de suministro y la falta de visibilidad sobre el aumento del techo de la deuda estadounidense.

Los precios del petróleo WTI siguieron subiendo hasta un nivel que no se veía desde 2014, después de que la cumbre de la OPEP+ decidiera continuar con su política de aumentar solo gradualmente la producción. Varios países habían pedido un aumento excepcional de la producción para contrarrestar la actual crisis energética, pero el cártel se negó, alegando los persistentes riesgos de la Covid-19 para la recuperación económica. El Departamento de Energía de EE.UU. también dijo que no tenía intención de utilizar las reservas estratégicas para aliviar la subida de los precios.

Los mercados, sin embargo, tuvieron un respiro el jueves por la noche, cuando el Senado aprobó una ampliación del techo de la deuda hasta el 3 de diciembre.

Por otra parte, el presidente de la Fed de St. Louis, James Bullard, dijo que tenía dudas de que la inflación volviera al objetivo del 2% de la Fed. Espera una inflación más alta de lo habitual durante cierto tiempo. Mientras tanto, Nancy Pelosi fijó el 31 de octubre como fecha límite para la aprobación del paquete de estímulo a las infraestructuras en el Congreso.

Facebook, Instagram y WhatsApp reanudaron su servicio después de una interrupción sin precedentes de 6 horas que planteó serias dudas sobre el monopolio del grupo. Facebook sigue en el punto de mira después de que un denunciante sugiriera que el grupo estaba más interesado en los beneficios que en la seguridad de los usuarios.