El 40% de las empresas españolas del sector IoT cree que hay una falta de inversión pública en I+D+I

Oasys, empresa española que centra su actividad en el desarrollo de software industrial y nuevas tecnologías, ha realizado el informe Situación actual y retos de futuro del mercado del IoT en España y Europa, en el que se estudia el estado del mercado tecnológico español y europeo en el marco del IoT World Congress. Los datos han sido extraídos de una encuesta realizada a empresas asistentes al evento con resultados significativos, haciendo hincapié en los principales retos que quedan por afrontar para abordar con éxito la transformación digital.

El 40% de las empresas españolas del sector IoT cree que hay una falta de inversión pública en I+D+I. En este sentido, se puede observar una diferencia entre ambos mercados en cuanto a la inversión en I+D+I. Mientras que parte de las empresas españolas encuestadas la categorizan como un reto y piensan que es el estado el que debe impulsar la innovación en la industria mediante subvenciones y otros fondos destinados al progreso del tejido industrial, en Europa las compañías tienen una cultura empresarial más individualista, pues creen que son ellas las que deben invertir en nuevas tecnologías para conseguir mantenerse a la vanguardia de la competitividad en el mundo. Según Miguel Sepúlveda y Daniel Rallo, expertos de Oasys, la principal diferencia entre el mercado español y el europeo es cultural.

Según el informe, el 20% de las empresas españolas cree que el mercado debe todavía superar la resistencia al cambio de los trabajadores para adoptar la transformación digital, una cifra que contrasta con la opinión de empresas extranjeras (34%), que creen que vencer el miedo al cambio es uno de los principales retos nivel europeo. La interrelación entre los niveles de preocupación respecto a la resistencia al cambio y la necesidad de modernizar la cultura empresarial es también destacable. En España la preocupación por la cultura empresarial (25%) es significativamente menor que la de Europa (34%). Desde Oasys comentan que “mientras que en España estamos todavía evaluando los potenciales beneficios y las grandes inversiones necesarias para llevar a cabo la Transformación Digital, en Europa ya comienzan a plantearse los retos que supone implantarla”.

Dudas e inquietudes en el mercado tecnológico actual

Actualmente, las compañías se plantean cómo puede beneficiales invertir en tecnología IoT, y es que parte de los participantes de la encuesta opinan que existe un desconocimiento latente de los beneficios que supone la transformación digital a corto y largo plazo. Miguel Sepúlveda, Business Manager Digital Transformation de Oasys, explica que “las empresas comienzan a intuir los posibles beneficios que les reportaría invertir en IoT y tecnologías relacionadas, pero todavía no se tiene un conocimiento real de los beneficios potenciales que estos pueden suponer en su trabajo diario”. Y añade: “todavía es difícil demostrar cuál es el retorno real de la inversión que deben hacer las empresas, ya que estos generalmente están vinculados con la competitividad y la productividad de las mismas, lo que dificulta su demostración”.

La ciberseguridad también preocupa a los clientes de las compañías vinculadas al IoT, “dato que refleja el nivel de madurez de aquellos clientes que conocen medianamente bien este tipo de tecnologías, ya que los que aún están conociéndolas se preocupan más por la inversión inicial que deben afrontar”, afirma Daniel Rallo, Infraestructure Business Director de Oasys. Es importante destacar que los sectores más estratégicos son los que presentan mayores dudas respecto a la seguridad de sus datos, como por ejemplo, la banca.

La conclusión principal que se extrae del Informe Oasys 2017 es que existe poca disposición para invertir en nuevas tecnologías debido a los beneficios intangibles y poco mesurables que el IoT ofrece. Respecto a las inquietudes del mercado en el momento de adquirir nuevos recursos y herramientas digitales, cabe destacar que para la mayoría de empresas encuestadas su intención es mejorar la competitividad y aumentar la productividad, conceptos muy ligados entre sí. Desde Oasys comentan que en estos momentos las necesidades de las compañías pasan por la adquisición de herramientas más flexibles que permitan una adaptación más rápida a los cambios, es decir, conseguir un proceso de trabajo más eficiente y eliminar aquellos trabajos no productivos, como los trámites burocráticos, que dificultan la toma rápida de decisiones.