El Gobierno de Nicaragua, a través de su Embajada ante el Reino de España, contando con el apoyo de la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB), organizó este jueves, 18 de enero, un evento artístico literario en celebración del 151 aniversario del nacimiento de Rubén Darío, en el Salón de Actos de la SEGIB, en Madrid.
En este emblemático escenario, se escuchó sin previo anuncio, un fuerte sonido: Si pequeña es la patria, uno grande la sueña; acto seguido, Ilseth María Rivas Guevara, directora del ballet nicaragüense Nicatepetl, surgió entre el público, danzando el poema de Rubén Darío, Caupolicán, musicalizado por el grupo nicaragüense Jazz Ensamble. Continuó, la bienvenida de la Excma. Sra. Rebeca Grynspan, Secretaria General Iberoamericana, quien al finalizar, dio la palabra al Embajador de Nicaragua, Carlos Midence, quien saludó a los más de 160 asistentes, entre los que se encontraban los Embajadores de Centroamérica, los ministros consejeros de Venezuela y Panamá, el Alcalde del Ayuntamiento de Morata de Tajuña, entre otras personalidades.
La introducción del diplomático inició el programa que contó con la participación del Catedrático y estudioso español Manuel Neila, experto en Rubén Darío, quien presentó su ponencia: Rubén Darío, El Prosista. El poeta y cronista español, Apuleyo Soto personalizó un magistral recital poético performativo de algunos poemas de Rubén Darío: Del Trópico, Filosofía, Melancolía, Thánatos, y un poema de su propia pluma: Letanía y elogio a Lengua Española. A continuación, el Ballet Nicatepetl interpretó Que el Amor no admite cuerdas reflexiones, Poema de Rubén Darío, musicalizado por el renombrado rockero español Enrique Bunbury.
El público en general quedó impactado al escuchar la poderosa voz del director de teatro nicaragüense Charles Delgadillo Cuadra, quien escenificó el cuento de Rubén Darío, El Rey Burgués.
Como fondo de escenario de estas espectaculares presentaciones literarias y representaciones artísticas, lucía una imagen del cuadro Pintura-homenaje al poeta Rubén Darío en su 151 aniversario, oleo pintado para la ocasión, por el nicaragüense José Aragón, ORGULLO DE MI PAÍS.
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