Seres propone un sistema de Factura Electrónica Unificada a las empresas españolas que operan en Latinoamérica
viernes 19 de febrero de 2016, 18:49h
Las empresas consiguen una gestión más clara y en tiempo real de la situación de sus filiales al tiempo que cumplen con la obligatoriedad y requisitos de cada autoridad tributaria en América Latina. El servicio unificado evita dispersión de esfuerzos y recursos, además de unificar la gestión en un punto compartido de colaboración entre la filial y la matriz sin necesidad de cambiar los ERPs o programas de gestión de cada empresa. Seres ofrece una solución global que hace sacar a las empresas el máximo partido del cambio al automatizar los procesos y la relación con sus socios de negocio, proveedores y clientes, en cada país.
La utilización de un sistema de Factura Electrónica Unificada basada en los servicios de un operador global simplifica la gestión de las empresas españolas con filiales en Latinoamérica, reduce coste y mejora la coordinación, según Seres, líder global en el intercambio electrónico seguro de documentos.
De acuerdo con Seres, el sistema permite a las empresas conseguir una gestión más clara y en tiempo real de la situación de sus filiales, además de cumplir con la obligatoriedad y requisitos de cada autoridad tributaria en América Latina.
“En la mayoría de los países de Latinoamérica, la factura electrónica es obligatoria o lo va a ser a corto plazo, explica Alberto Redondo, Director de Marketing para Iberia y Latam de Seres, y la implantación de un sistema unificado de facturación electrónica elimina muchos quebraderos de cabeza dado que clarifica y agiliza la gestión de las cuentas”. Según Alberto Redondo “el servicio unificado evita la dispersión de los esfuerzos y recursos, además de crear un punto compartido de colaboración entre la filial y la matriz lo que aporta mayor claridad, llegando a tener una visión inmediata de la situación de las cuentas a cobrar y pagar en cada país”.
Las empresas españolas tienen en el mercado latinoamericano el paso natural para su expansión, de hecho, según Seres, la mayoría de las grandes empresas no cuentan con una gestión unificada y se ven obligadas a adaptarse y mantener los diferentes sistemas de facturación electrónica impulsados por sus gobiernos para mejorar el control fiscal sin obtener ninguna mejora en la productividad.
Según Seres, la factura electrónica abre las puertas a una manera de gestión unificada, “no estamos hablando de cambiar los sistemas de información o ERPs de la matriz y cada filial, lo que sería una locura, sino crear un entorno para gestionar la información, gracias a la factura electrónica donde, en tiempo real y de forma actualizada, se pueda anticipar, por ejemplo, la respuesta y planificación a necesidades de financiación y gestión de la tesorería”.
Al no estar unificados la información de los sistemas de facturación, no existe un control eficaz ni en tiempo real de la actividad de las filiales, al tiempo que aumentan los costes, puesto que cada filial debe adecuar su tecnología y procesos a los requerimientos específicos de cada país.
Además de estas mejoras, la adopción de una solución global de factura electrónica, permite sumar las ventajas de este sistema al proyecto. No sólo se cumple con la normativa de obligatoriedad sino que se trabaja para agilizar la gestión con sus socios de negocio, dado que la relación entre sus proveedores y clientes se automatiza, reduciendo los tiempos de gestión de las facturas. “Es aquí, indica Alberto Redondo, donde entra la figura del operador global de factura electrónica”.
Las compañías centran sus esfuerzos en cumplir con la obligatoriedad con premura en vez de pensar el cambio como una mejora en la competitividad de la empresa. “En el caso de Seres, concluye Redondo, nuestro servicio ofrece cobertura total en el cumplimiento de la obligatoriedad, además de un conjunto de herramientas que mejora la relación y comunicación con sus socios. Ofrecemos una solución global que hace sacar a las empresas el máximo partido del cambio al automatizar los procesos y la relación con sus socios de negocio, proveedores y clientes, en cada país”.