El empresario tiene que delegar, y pagar por ello, muchas funciones que no puede realizar él mismo. Nadie es capaz de ocuparse de las ventas, de las compras, del personal y de hasta el más mínimo detalle del funcionamiento del negocio. Pero el empresario suele costear los errores de los demás.
Nos vamos a fijar ahora en qué sucede si nuestra asesoría contable “mete la pata”. Pues lo normal es que el error lo pague el empresario, por ejemplo abonando más impuestos de los debidos que si no se hubiese cometido el error. A no ser que disponga de unos servicios de asesoría contable de calidad contrastada.
Gestiun es una gestoría y asesoría, ubicada en Madrid, que, entre otras especialidades, presta asesoramiento contable a pequeñas, medianas y grandes empresas -también autónomos- desde hace más de 20 años. Son corresponsales en España de la red internacional HTL, con presencia en 40 países, lo que les permite prestar servicios globales a las compañías que lo precisen. Casi todos los profesionales que integran el equipo dominan el inglés por lo que pueden atender a firmas internacionales o sucursales de empresas españolas en el extranjero.
Ofrecen distintos niveles de asesoría, desde la llevanza completa de la contabilidad hasta la supervisión de aquellas contabilidades hechas en las propias empresas. Disponen de un sistema informático compatible con casi todos los programas de contabilidad presentes en el mercado, por lo que pueden importar y exportar los datos fácilmente. Y una pyme o un autónomo podría llevar su contabilidad con una sencilla herramienta que les facilita Gestiun.
En el caso de empresas de tamaño medio o grande se encargan, a través de su equipo de asesores especializados, de la elaboración de los libros oficiales, de las cuentas anuales o del informe de gestión. También se ocupan del mantenimiento de los libros del IVA y de los libros de actas o de socios, entre otros. Mencionamos estos aspectos como ejemplo de todo lo que Gestiun puede hacer para resolver las necesidades, en materia contable, de sus clientes.
También ponen al día contabilidades atrasadas, revisan los asientos realizados para asegurar la correcta aplicación de las normas contables o supervisan los estados financieros, lo que permitirá detectar a tiempo posibles desviaciones o ineficiencias, por ejemplo en la gestión de stocks. Esto es particularmente útil para autónomos o pequeñas pymes que no puedan sostener un departamento de administración, que analice periódicamente los resultados del negocio. Tendremos así un asesor que, a través del examen de los números de nuestra actividad, nos alertará de posibles problemas actuales o posiblemente futuros y que el pequeño empresario no puede ver, porque está mucho más centrado en la actividad diaria que en la planificación y el control.
Pero empezábamos hablando de quién paga los platos rotos en caso de error. Gestiun garantiza su servicio de calidad haciéndose cargo del coste derivado de alguna gestión suya. Para ello, tiene suscrita una póliza de responsabilidad civil que cubre cualquier eventualidad. Esto, desde luego, es un plus en sus servicios y en la confianza que pueden lograr en sus clientes. Se les puede contratar con la seguridad de que se hacen responsables de su trabajo. No todo el mundo hace lo mismo.
Si (
No(
