La agencia inmobiliaria Monika Rüsch vende esta joya del modernismo declarada Bien Cultural de Interés Nacional.
Pocas veces se tiene la oportunidad de poder comprar una casa singular como la que está a la venta en la localidad de
La Garriga (Barcelona). Se trata de una
joya del modernismo firmada por uno de los arquitectos más destacados de su época,
Manuel Joaquim Raspall. El inmueble, conocido como
La Bombonera, está a la venta en la agencia inmobiliaria
Monika Rüsch, empresa con más de 25 años de trayectoria en el mercado residencial de Barcelona y líder en clientes Internacionales, y se vende por un
precio de 780.000 euros. Según explica su director, Jordi Gruart Rüsch, “vender una propiedad declarada Bien Cultural de Interés Nacional es una suerte que se da muy pocas veces”.
La historia que hay detrás de este tipo de viviendas es tan importante como la propia casa. En el caso de La Bombonera, fue un encargo de Cecília Reig i Argelagós a Manuel Joaquim Raspall, el arquitecto municipal de La Garriga que fue discípulo de los grandes maestros del modernismo catalán, Domènech i Muntaner y Puig i Cadafalch. Se construyó con el objetivo de alquilarla a los veraneantes. A principios del siglo pasado, la moda de los balnearios llevó a la burguesía catalana a construir residencias de veraneo cerca de agua termales, y La Garriga, con su balneario Blancafort y a menos de 40 kilómetros de Barcelona, se convirtió en uno de sus destinos predilectos. De hecho, La Bombonera se encuentra dentro de la manzana Raspall, donde se ubican cuatro casas modernistas del arquitecto, todas ellas declaradas Bienes Culturales de Interés Nacional a finales de los 90.
Cada una de estas casas se caracteriza por el predominio de un color: La Casa Barbey es de color rosa, la Torre Iris es amarilla, la casa Antoni Barraquer es azul, y La Bombonera es de color verde y ocupa una superficie de 262m2. Esta última fue construida en 1910, época del modernismo tardío del incipiente “noucentisme”, y es, sin duda, una de las mejores obras de Raspall. El verde predomina en toda la vivienda: cerámica, vallas del jardín, ventanas, pintura exterior e interior, e imprimen a la casa una personalidad singular.
Ya desde la calle se puede apreciar la magia que desprende La Bombonera, con un acceso de entrada formado por un muro bajo de piedra con piezas de cerámica verdes y blancas, y una reja de forja trabajada en “coup de fouet”. Su fachada, estucada en verde y blanco, tiene puertas y ventanales de medio punto que se cierran con unas persianas de librillo de madera móvil, con motivos florales. Los cristales de las ventanas son emplomados dando una luz mágica a la vivienda.
En la planta baja encontramos un espléndido recibidor que da acceso a una galería con cristales emplomados y vistas al jardín. Dos habitaciones dobles comparten un baño con ducha. Su cocina está adaptada a las necesidades actuales, y todo ello cuidado con el más mínimo detalle: radiadores de hierro forjado con hendiduras florales, suelos hidráulicos y alicatado a media altura con diseño típicamente modernista.
En la primera planta se encuentra una amplia suitte con baño con bañera y ducha. Tiene salida a una amplia terraza y a un balcón con vistas al jardín. La planta que da acceso al jardín consta de 3 habitaciones, sala de máquinas, lavadero y un baño con ducha. Ya en el jardín, un precioso porche o comedor de verano permite disfrutar de su espléndida fachada posterior.
Esta obra de arte está en venta a través de Monika Rüsch Real Estate Barcelona.
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