La escasa inversión pública y la reducción del mercado por las adjudicaciones a Ineco provocan que las ingenierías privadas tengan ya menos del 10% de su negocio en España, con el riesgo de deslocalización. id:42529
El Foro para la Ingeniería de Excelencia (
FIDEX), que agrupa a las diez principales ingenierías españolas, lamenta que ADIF Alta Velocidad haya adjudicado directamente a la ingeniería pública Ineco la redacción del proyecto de la remodelación de la estación de Chamartín en Madrid, una nueva estocada para el sector que viene sufriendo en estos últimos años los efectos de la escasa inversión pública en licitación de ingeniería, ya que en 2017, último dato anual disponible, se licitó la cuarta parte de hace una década.
La entidad recuerda a ADIF Alta Velocidad y al Ministerio de Fomento que a Ineco sólo se le deberían adjudicar contratos directamente si concurren supuestos de urgencia, seguridad nacional o concurso desierto.
Para FIDEX no se da ninguno de estos supuestos en este caso, ni siquiera el de urgencia pues la remodelación de Chamartín es un proyecto que lleva tiempo sobre la mesa y el objeto del contrato es definir las actuaciones necesarias para ampliar la capacidad de la estación ante el aumento de demanda previsto en los próximos años tanto de alta velocidad (nuevos servicios en el norte peninsular y conexión con Atocha para servicios del sur peninsular) como de cercanías.
La “españolidad”, en riesgo
A pesar de que el escenario de contratación en España ha mejorado con la entrada en vigor hace un año de la nueva Ley de Contratos del Sector Público, que otorga más importancia en el peso de las ofertas a los criterios técnicos que al precio, al contrario que la legislación anterior, la escasa inversión pública en ingeniería y la reducción del mercado causada por las adjudicaciones a Ineco provocan que las ingenierías privadas españolas tengan que acudir a concursos casi en exclusiva a los mercados internacionales.
Así, FIDEX recuerda que en la actualidad más del 90% de la actividad de las grandes ingenierías españolas está fuera de España, cuando nuestras homólogas de otras potencias económicas tienen alrededor de un 40% en sus países de origen y el 60% restante en los mercados internacionales.
Este desequilibrio de actividad conlleva un alto riesgo de deslocalización, ya que mantener la sede central de una compañía en un país que representa el 5% de su negocio, cuando otros mercados llegan a representar cuatro o cinco veces más, puede provocar que alguna se plantee un cambio. Además, la contracción del mercado nacional ha provocado que el tejido empresarial de las ingenierías en España se reduzca un 50% en la última década
Según el director general de FIDEX, Fernando Argüello, “lo imposible que casi resulta conseguir trabajo en España también está provocando en los últimos cinco años un proceso continuo de venta de importantes ingenierías españolas a grupos extranjeros, con lo que estamos perdiendo la españolidad de una parte notable de nuestro bagaje técnico, tan reconocido en el resto del mundo”.
El Foro para la Ingeniería de Excelencia (FIDEX) agrupa a las diez principales y más internacionalizadas ingenierías de España, que emplean a más de 23.000 profesionales y facturan en conjunto más de 6.000 millones de euros al año, de los que el 95% procede de mercados exteriores. Además, esta actividad internacional supone las tres cuartas partes de todo el negocio del sector de la ingeniería civil española en el extranjero. El objetivo de FIDEX es alcanzar la máxima calidad en la planificación, proyecto, control de la ejecución, mantenimiento y explotación de las infraestructuras como la única vía para obtener la mejor relación calidad-precio y evitar posteriores sobrecostes y retrasos en los plazos de ejecución de las obras.
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