www.economiadehoy.es

Observatorio Financiero del Consejo General de Economistas

Se desacelera la industria, segundo sector después del de servicios con mayor peso en nuestro PIB

Se desacelera la industria, segundo sector después del de servicios con mayor peso en nuestro PIB
viernes 30 de agosto de 2019, 12:45h
Mantenemos nuestra previsión de crecimiento del PIB para este año en el 2,2%. id:49293
Las previsiones de crecimiento de la tasa de inflación vuelven a ajustarse con respecto a meses anteriores. Entendemos que no debe superar el 1,3 % al final del ejercicio.

OBSERVATORIO FINANCIERO, AGOSTO 2019

2019

2020

PIB

2,2%

1,9%

Inflación

1,3%

2%

Paro

13,7%

13,25%

Consumo

1,7%

1,6%

Exportaciones

2%

3%

Tasa de ahorro

5%

6%

Bono a 10 años

-0,1% / 0,3%

0,3% / 0,8%

Continuamos con nuestra previsión de crecimiento en el año del 2,2%, incluso con sesgo bajista. En esta línea de prudencia nos hemos mantenido a lo largo del año, cuando se han visto previsiones de cierre por parte de diferentes organismos, tanto internacionales como nacionales, del 4% y similares.

El dato de crecimiento del último trimestre, 0,5%, marca la posible proyección de los dos próximos trimestres, dando absolutamente por sentado que el crecimiento del 0,7% del primer trimestre fue un mero rebote técnico.

La caída del sector exteriorha seguido creciendo, pero en menor porcentaje que en el año anterior, lo que supone una aportación prácticamente nula al crecimiento, motivada por la crisis que afecta a los países de la zona euro, principal destino de nuestras exportaciones. Ello ha hecho que el superávit de nuestra balanza por cuenta corriente que arrastrábamos pase a niveles negativos. También se constata la debilidad de la demanda interna por la pérdida de confianza de empresas y el aumento de la prudencia en los hogares, haciendo que aumente el ahorro, tanto tiempo estancado en mínimos. En ambos casos influye la inestabilidad geopolítica mundial y a la incertidumbre interna por la falta de Gobierno. Es arriesgado decir cuánto está afectando esto último al crecimiento; en nuestro caso estimamos que algunas décimas, quizás no más de tres. Nos parece exagerado hablar de que sean puntos porcentuales. No podemos olvidar tampoco que Cataluña, que sumaba al PIB de forma positiva al crecer por encima del resto del país, se ha igualado en crecimiento a éste e incluso con signos de hacerlo de forma menor. No solo no suma, sino que puede estar comenzando a restar.

La inversión –por desconfianza empresarial–y el consumo –por similares razones en los hogares– se debilitan. Desde junio también se nota un cambio de signo en la evolución exacerbada de la vivienda. Se desacelera la industria, segundo sector después de servicios con mayor peso en nuestro PIB. Ello unido a que el mercado de trabajo presenta después de los datos de julio signos de estancamiento, así como un turismo que se resiente, aunque todavía sin sufrir las consecuencias de lo que está por venir por el Brexit. Todo esto contribuye a pensar que estamos ante una desaceleración económica, que debe confirmarse en los próximos trimestres.

Las previsiones de crecimiento de la tasa de inflación vuelven a ajustarse con respecto a meses anteriores. Entendemos que no debe superar el 1,3 % al final del ejercicio.Transcurridos 8 meses del ejercicio 2019, el IPC es del orden del 0,5% en tasa anual.

En el caso del bono español a diez años, el miedo que ha inundado los mercados y la huida de los inversores hacia la renta fija, el oro o divisas refugio hacen que nuestras previsiones se adapten a una situación tan atípica, en la que la política de los bancos centrales y ese pavor de los inversores nos acerquen al modelo japonés.

En este contexto de falta de Gobierno, se ve aparcado el grave problema de las pensiones que afecta al control del déficit y la deuda, que sigue disparándose (aunque afortunadamente baja el coste de su financiación y se alarga su duración media), así como el problema sobrevenido en las Comunidades Autónomas al no cobrar los anticipos del presupuesto 2019 y la liquidación del IVA correspondiente al ejercicio del 2017. Ello está poniendo en peligro no solo la atención de servicios básicos de las mismas, sino también el control del déficit en la parte que les corresponde.

Resumimos la situación como preocupante, tanto por la gravedad de las causas geopolíticas externas como por la parálisis política interna a la que asistimos.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios