Más de 500 trabajadores autónomos fueron consultados sobre las facilidades que ofrecen las distintas comunidades a la hora de abrir un negocio. id:55657
¿Cuál es la región de España donde es más fácil abrir un nuevo negocio? Esta fue la pregunta que hizo el
Observatorio Prontopro a los trabajadores españoles inscritos en el portal
Prontopro.es, profesionales que provienen de las diversas categorías disponibles en la plataforma que reúne la oferta y la demanda de servicios: desde fontaneros a abogados, psicólogos, pintores, electricistas y entrenadores personales.
Se solicitó a 500 autónomos que indicaran su nivel de satisfacción con las instituciones locales y nacionales. ¿El resultado? Una visión general de las comunidades donde es más sencillo o más complicado emprender, basada en factores tales como: la percepción del apoyo recibido por parte de las instituciones locales y el gobierno nacional, las regulaciones fiscales, las condiciones de trabajo, la burocracia y las expectativas para el futuro.
La encuesta permitió obtener evaluaciones del 1 a 10 en cada una de estas métricas, que luego se utilizaron para elaborar el ranking de las regiones más adecuadas para la iniciación y gestión de una actividad profesional. El análisis completo y más detalles están disponibles en la página web dedicada al Observatorio.
Islas Baleares, Aragón y País Vasco en el podio
Del estudio se desprende que Islas Baleares, Aragón y País Vasco son consideradas por los trabajadores como las mejores comunidades para abrir un negocio propio. Un resultado que se debe principalmente a la presencia de programas de capacitación y buenas expectativas hacia el futuro.
En País Vasco, por ejemplo, más del 80% de los entrevistados ha declarado que sus expectativas para el futuro de su negocio son positivas, tanto en términos de facturación como en cuanto al número de empleados a contratar. Por su parte, en Islas Baleares y Aragón, casi el 90% de los entrevistados considera útiles los eventos de capacitación y networking que se ofrecen en su región, e incluso más del 30% de ellos han indicado una calificación de 10 puntos.
Asturias, Comunidad Valenciana y Cataluña, las comunidades más complicadas para emprender
Las regiones que, según los propios autónomos, resultan más desfavorables a la hora de abrir un nuevo negocio son Asturias, Comunidad Valenciana y Cataluña. La calificación total sobre la percepción de los profesionales en cuanto al apoyo que reciben de los organismos locales y nacionales no supera los 4 puntos. ¿La calificación más baja? En los tres casos es en el apoyo percibido por parte del gobierno nacional.
Sorprendentemente, Madrid quedó relegada a un octavo lugar. Pese a que esta comunidad lideró durante el 2019 las cifras de creación de empresas a nivel nacional, la percepción de los autónomos es que la región no ofrece las mejores condiciones para desarrollar su labor.
Madrid, Cataluña y Andalucía concentran casi el 50% de las PYMES españolas, perolas perspectivas de los trabajadores a la hora de poner en marcha su negocio son mejores en otras comunidades. En el ranking Andalucía quedó en el noveno puesto y Cataluña en el decimotercero.
Las críticas de los autónomos hacia las instituciones
El estudio realizado por el Observatorio Prontopro revela un descontento general de los trabajadores autónomos con respecto al apoyo ofrecido por las instituciones. El 82% de los encuestados cree que la ayuda de su región es insuficiente, y el porcentaje aumenta al 90% si se evalúa el apoyo que proviene del estado nacional. Por su parte, para el 77% de los profesionales consultados la burocracia es demasiado compleja, un factor que afecta tanto el inicio de nuevas actividades como la gestión del negocio en la vida cotidiana; además, para el 92% de los trabajadores consultados, el gobierno no gestiona los impuestos de manera óptima.
Encuesta de ProntoPro sobre pequeñas empresas en España
La encuesta llevada a cabo a fines del 2019 fue dirigida a profesionales autónomos y propietarios de pequeñas y medianas empresas en toda España, incluyendo trabajadores de entre 20 y 60 años empleados a tiempo parcial y completo. Se contó con respuestas de 13 de las 17 comunidades autónomas españolas.