Los cambios que existirán en las relaciones entre Reino Unido y España afectan a los permisos de residencia y trabajo, impuestos y finanzas, Seguridad Social, convalidación de estudios y programas de movilidad de estudiantes, entre otros. id:66737
La salida de Reino Unido de la Unión Europea está causado incertidumbre y dudas en la opinión pública, sobre todo con respecto a los ciudadanos británicos residentes en España. El periodo de transición para la salida de Gran Bretaña de la UE finaliza hoy, día 31 de diciembre del 2020:
a partir del 1 de enero de 2021 regirán nuevos acuerdos entre los países.
Pese a la salida de la Unión Europea, en las relaciones entre España y la isla británica “se protegen los derechos de los que puedan demostrar que vivieron en España antes del 31 de diciembre de 2020. Los que no lo hicieron, tienen que pasar por los trámites de extranjería que son comunes para cualquier persona que no sea de la Unión Europea”, según explica Raisa Venermo, socia fundadora de AvaLanding, firma especializada en movilidad internacional para empresas e inversores extranjeros que buscan abrir negocio en España.
En este sentido, los británicos que tengan su casa y trabajo en España, que - según los datos el Instituto Nacional de Estadística - suman un total de 250.000 ciudadanos, podrán mantener sus derechos, siempre y cuando estuvieran viviendo legalmente en España antes de la finalización del periodo de transición. La misma fórmula se aplica a la tarjeta sanitaria, por lo que quienes tenían derecho a la Seguridad Social antes del 31 de diciembre de 2020 seguirán teniendo este beneficio.
Gracias a los pactos de salida, los derechos de los ciudadanos españoles en Gran Bretaña también se seguirán respetando. Además, el acuerdo de doble imposición de impuestos quedará vigente, “evitando así que los ciudadanos tengan que pagar las tasas tanto en Reino Unido como en España”, aclara Venermo.
Según algunas predicciones de los organismos mundiales y económicos, tras el Brexit la misma Gran Bretaña saldrá más afectada que la Unión Europea por esta decisión. Sin embargo, las relaciones entre Reino Unido y España se complican, ya que esta última, en específico, se verá influenciada a nivel económico por la salida de Gran Bretaña de la UE. Esto se debe a que casi un 10% de las exportaciones de España fueron a Reino Unido en 2019 y el 20% de turistas en España fueron de nacionalidad británica.
Aun así, Raisa Venermo aborrece los alarmismos, ya que “habrá cambios, pero las relaciones con la isla británica seguirán existiendo. Reino Unido hasta ahora era más parecido a Francia o Alemania; a partir de 2021, se podrá comprar a Canadá o Estados Unidos en este sentido”.
¿Qué trámites tendrá que hacer un británico que quiera residir en España tras el Brexit?
Los británicos que quieran permanecer en la Unión Europea por un período superior a los 90 días deberán obtener un visado, por lo que los turistas podrán circular libremente entre Reino Unido y España.
En el caso de que un ciudadano británico quiera residir en España y no haya obtenido la residencia o los permisos antes de tiempo, existen varias opciones: las personas que dispongan de una tarjeta NIE verde, podrán canjearla por la tarjeta de residencia española TIE hasta el 30 de junio 2021, documentación que más de 50.000 ciudadanos británicos ya han solicitado desde su introducción en julio de 2020.
Aquellos que hayan adquirido desde 2013, o piensan adquirir en el futuro, propiedades por un valor total superior a los 500.000€ podrán ser elegidos para el programa Golden Visa, el mejor permiso de residencia y trabajo que España tiene para ofrecer a inversores de fuera de la UE. Además, emprendedores podrán comenzar su proyecto empresarial en España y obtener de esta forma la residencia.
Para los que no necesiten trabajar en España, porque ya están jubilados o por cualquier otro motivo, la solución perfecta será el visado no lucrativo, o visado de jubilación, con el que se puede vivir libremente en España sin limitaciones, sin tener el permiso para trabajar.
Variaciones que afectarán al vínculo con Gran Bretaña
Los cambios que existirán en las relaciones entre Reino Unido y España no solo afectan a los permisos de residencia y trabajo, impuestos y finanzas y Seguridad Social, sino también a otros temas vinculados a la convalidación de estudios: “Algunos profesionales, como arquitectos, enfermeros y médicos, que antes podían ejercer inmediatamente y sin ningún trámite adicional, ahora tendrán que pasar por una convalidación de estudios al cambiar de país”, señala Venermo. Este procedimiento, en todo caso, se aplicará a todos aquellos británicos que lleguen a España a partir del año nuevo.
Además, al estar fuera de la Unión Europea y ser considerados como cualquier otro país extracomunitario, los animales domésticos británicos que quieran entrar en España deberán pasar por más controles y no se aceptará el pasaporte de la UE, por lo que la libre circulación de las mascotas entre los dos países se verá complicada. Según la socia fundadora de AvaLanding, “esta situación puede parecer poco relevante, pero preocupa a muchos británicos que quieren venir a España. De hecho, a este cambio en la movilidad de los animales se le ha llamado irónicamente ‘Petxit’”.
Con respecto a los programas de movilidad para estudiantes, como el reconocido Erasmus+, programa promovido por la UE desde 1987, el Reino Unido quedará excluido de los países participantes, aunque “los beneficiarios del Reino Unido pueden seguir participando en le programa hasta la fecha de finalización, aunque sea posterior al año 2020”, explica Raisa Venermo. A partir de 2021, la voluntad de Gran Bretaña es impulsar un programa de intercambio paralelo al Erasmus+.
Finalmente, otro cambio secundario, pero relevante sobre todo para los turistas, será la finalización de la garantía de roaming gratuito, que a partir del 15 de junio de 2017 se había vuelto de obligado cumplimiento para todos los países de la Unión Europea.