Aunque los perros y los gatos se presentan a menudo como enemigos, si se les presenta cuidadosamente, pueden llevarse muy bien. Sin embargo, es conveniente tomarse las cosas con calma siguiendo este consejo: una introducción suave es mucho más segura que una apresurada, y es de esperar que ambas mascotas se hagan buenas amigas. id:81008
Tanto si presenta un nuevo gato a su perro como si lo hace a la inversa, deberá crear una zona segura para el gato a la que su perro no pueda acceder. Si va a acoger a un nuevo gato, lo ideal es una habitación libre, ya que necesitará tiempo para adaptarse a su nuevo entorno.
Las puertas para escaleras son muy útiles para introducir a los gatos y a los perros, ya que permiten que las mascotas se vean y se huelan con seguridad, y permiten crear "zonas libres", que son esenciales hasta que ambos animales se vean como uno más de la familia. Hay varias alturas, así que elija la que más le convenga. También hay trampillas para puertas, que permiten que el gato se mueva con facilidad -muy útiles para los gatos mayores o artríticos-, aunque no serán adecuadas si tiene un perro pequeño que pueda pasar por el hueco.
Instalar un difusor Feliway unos días antes de llevar a su nueva mascota a casa es una buena idea, especialmente si el gato no ha convivido antes con perros o tiene un carácter nervioso. Un difusor Feliway como el que podemos encontrar en Barakaldo vet shop emite feromonas que ayudan a los gatos a sentirse seguros, por lo que puede ayudar al gato a sentirse más cómodo durante el periodo de introducción. También es importante asegurarse de que su casa tenga algunos lugares altos a los que el gato pueda acceder fácilmente. A los gatos les gusta por naturaleza descansar y esconderse en lugares altos, y esto será especialmente importante más adelante en el proceso de introducción.
Cuidado extra al introducir gatitos
Los gatitos son mucho más vulnerables debido a su tamaño y, como suelen ser más juguetones y activos que un gato adulto, es más probable que exciten a un perro. Si va a presentar un gatito a un perro, una puerta de escalera no será práctica, ya que podrá colarse fácilmente a través de los barrotes, así que, por razones de seguridad, la introducción inicial se realiza mejor colocando al gatito en una jaula para animales, que debe ser lo suficientemente grande como para tener una bandeja sanitaria, un poste para rascarse, una cama y lugares para esconderse. Permita que el gatito se acostumbre a estar en la jaula antes de conocer al perro, colocando la jaula en la zona que haya elegido lejos del perro, para que se acostumbre a entrar y salir. Coloque una manta en uno de los lados para que el gatito se sienta seguro.
En cualquier caso, el lugar en el que se lleve a cabo la presentación dependerá de la distribución de la casa, pero asegúrese de que el gato tenga un camino fácil para volver a su "zona segura". Si su perro se excita con facilidad, es mejor que las primeras presentaciones se lleven a cabo después de hacer ejercicio, cuando su perro pueda estar tranquilo.
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