Una sociedad inactiva, ya registrada en el Registro Mercantil, es una sociedad que no opera en la actualidad, pero que sigue registrada a nombre de una persona o empresa determinada. Suele darse el caso de que la empresa no haya operado nunca, sino que se haya constituido únicamente para proteger un nombre de empresa o para su uso en el futuro.
¿Por qué utilizar una sociedad inactiva?
Veremos ahora que la compra de una sociedad inactiva como alternativa a la creación de una nueva empresa tiene algunas ventajas que la mayoría de la gente no conoce o no ha tenido en cuenta.
Un nombre establecido
Aunque no sea el suyo propio o un nombre que usted pueda elegir una sociedad inactiva ya está registrada con un nombre de empresa. Cuanto más tiempo lleve registrada la empresa, más valor tendrá ese nombre. Hay varias razones para ello, pero la primera es un simple factor de seguridad. Si decide comprar una empresa inactiva o antigua con un nombre que le guste utilizar, ese nombre ya ha sido aceptado por el Registro Mercantil y es más seguro que uno que se le ocurra a usted.
Durante el proceso de formación de la empresa, al formar una nueva empresa, con un nuevo nombre, algunas personas encuentran su nombre objetado por otra persona o, directamente, rechazado por el Registro por una serie de razones. Si una empresa ya ha tenido su nombre en el registro durante algún tiempo, es menos probable que se presenten objeciones si el Registro ya ha aceptado el nombre. Por tanto, el riesgo es mucho menor.
Una empresa nueva puede tener problemas en sus primeros días, semanas, meses e incluso años. Es menos probable que la gente quiera comprar o vender a una empresa que acaba de crearse que a una con más antigüedad. Lo mismo ocurrirá con las entidades financieras y otras empresas con las que podría interactuar en el ejercicio de su actividad. Las empresas con una fecha de registro más antigua tienen más valor, ya que cualquiera que las utilice puede comunicar la fecha de fundación a cualquiera que pueda estar interesado. Esto resultará atractivo tanto para los clientes, los proveedores y las entidades financieras, ya que en algunos casos, las cuentas y declaraciones de las empresas inactivas se han presentado, como debe ser, cada año durante su período de registro. Todo esto puede tener beneficios financieros de forma similar a los otorgados por la antigüedad del establecimiento en términos de solvencia crediticia y otras cosas substanciales en los negocios.
Ventajas de comprar una sociedad inactiva
Como ya indicábamos en esta otra noticia las ventajas son:
- Al estar la sociedad ya constituida ya tiene una denominación si bien es posible cambiarla.
- No hace falta desembolsar el capital social que ya fue desembolsado por los socios constituyentes.
- En el Registro Mercantil no queda reflejado el nombre de los socios adquirientes.
- Se puede disponer de una sociedad limitada operativa en menos de 24 horas.