“Somos una fuente de reclutamiento de personas en situación de exclusión social. generamos un impacto medible en la sociedad ya que nuestro trabajo, además de reducir la criminalidad, supone un ahorro para la Administración; y tenemos en cuenta la Cadena de Valor involucrando a clientes y proveedores de la empresa”, declara el equipo directivo con Íñigo Sánchez Asiaín de Portobello Capital en su último informe sobre la medición de su huella social.
Durante los últimos años, la gestora de fondos de capital privado ha dirigido sus esfuerzos para contribuir a grandes resultados en el aporte en los dos grandes pilares de impacto social: mejorando la empleabilidad a través de participación directa con sus empleados e involucrando a las empresas participadas de Portobello a la cadena de valor.
Las iniciativas y aportes de alto impacto social desarrolladas por Íñigo Sánchez Asiaín con Portobello Capital con la Fundación Integra
Desde su fundación en 2010 por los socios de Portobello Íñigo Sánchez Asiaín, Juan Luis Ramírez, Luis Peñarrocha, Carlos Dolz, Ramón Cerdeiras Checa y Norberto Arrate, Portobello Capital ha seguido el objetivo de potenciar el valor de sus operaciones de forma consistente y responsable. En este sentido, la empresa busca apoyar y ayudar a crecer a sus empleados fomentando el desarrollo de las capacidades del equipo.
Una de las iniciativas que realiza Íñigo Sánchez Asiaín con Portobello para potenciar las capacidades de sus empleados es el Voluntariado Corporativo, con el apoyo de la Escuela de Fortalecimiento de la Fundación Integra. Esta serie de talleres influye positivamente en la motivación del equipo, alimenta su sentido de pertenencia y repercute en la atracción y retención del talento. Según el equipo de Portobello, se genera “un impacto en la sociedad mejorando la empleabilidad de las personas en exclusión social severa”.
Por otro lado, una de las claves de la estrategia de inversión responsable de la gestora de fondos es involucrar a su cartera de participadas, stakeholders y a la sociedad con los criterios de sostenibilidad que cubren los factores ambientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG). “En Portobello Capital cada decisión responde a nuestro compromiso con la sociedad en la que operamos”, postula el equipo de socios fundadores.
De esta manera, Íñigo Sánchez Asiaín de Portobello y su equipo de profesionales trabajan la dimensión social de su corporación junto con la Fundación al incorporar a las empresas participadas al proceso de toma de decisiones, a las políticas de inversión y a la promoción continua por medio de conversaciones con los accionistas, entre otros grupos de interés.
“Portobello lleva años identificando y generando la oportunidad de proponer a sus empresas participadas que integren a personas en exclusión social severa y con discapacidad con las que trabaja Fundación Integra, dado que éstas compañías tienen cabida para estos perfiles. Esto, sin duda, alinea los compromisos sociales de Portobello con sus participadas”, expone el equipo de la gestora en su informe de medición.
Gracias al trabajo realizado en todos los proyectos sociales que los socios fundadores como Íñigo Sánchez Asiaín de Portobello llevan a cabo dentro de su planificación, así como las donaciones realizadas a la Fundación, se ha visto un incremento en el impacto económico en la sociedad que tiene la gestora. El equipo de analistas de Portobello ha concluido que para este 2022: “Gracias a la aportación económica realizada por las empresas participadas del GRUPO PORTOBELLO de 153.500€, se ha generado un retorno social de 1.228.000€”.