El crecimiento de la compañía, que cerrará el año con un volumen de operaciones de 12 millones de euros, 115% más que el año anterior, refleja el aumento del interés en la figura del personal shopper inmobiliario entre los particulares e inversores que buscan una vivienda, y que a lo largo de 2016 se ha incrementado un 30%. Un Personal Shopper Inmobiliario es un experto que ofrece un servicio personalizado para la búsqueda de inmuebles, que se posiciona y defiende, de forma exclusiva, los intereses de su cliente comprador o inversor.
Así, la contratación de este servicio ha aumentado en SOMRIE un 10%, y las operaciones cerradas ante notario un 100%. Esto permitirá a la empresa duplicar en 2016 la suma de la facturación de los años 2014 y 2015, hasta acercarse a los 2 millones de euros en el grupo, incluidas las obras que se generan a través de la parte constructora de AC-SOMRIE.
Según explica Enric Jiménez, socio fundador de SOMRIE, también hay que destacar que el interés de los compradores nacionales en el servicio de personal shopper inmobiliario, se consolida: un 60% frente al 40% de clientes extranjeros. “Cuando comenzamos a ofrecer este servicio, la demanda era principalmente extranjera”. No obstante, el interés ha crecido considerablemente entre ambos perfiles.
Respecto al tiempo que se necesita para cerrar una operación inmobiliaria con el servicio de un personal shopper inmobiliario, actualmente se sitúa entre los 3 y los 4 meses, y se consigue una rebaja en el precio de venta de la vivienda de un 10%, según datos de SOMRIE.