Calidad, innovación y atractivo son los conceptos que mejor definen la propuesta hotelera de Hoteles Silken. Un total de 29 establecimientos enfocados al segmento urbano, ubicados en más de una veintena de destinos (en España y Bruselas), en los que la atención al cliente, las instalaciones, el equipamiento y los servicios han sido concebidos para ofrecer el máximo nivel de confort y hacer la estancia lo más agradable posible, creando una experiencia que fidelice al visitante. Pasión por la excelencia es el lema que conduce los pasos de Hoteles Silken, siempre con el objetivo de ofrecer el mayor grado de satisfacción a sus usuarios.
Urbanos, funcionales, confortables, singulares, atractivos, cercanos... Innumerables adjetivos son aplicables a los establecimientos de Hoteles Silken, cuya filosofía es trabajar por un fin claro: la máxima satisfacción del cliente. Para llegar a ello, la cadena, fundada en 1995, engloba 29 hoteles que responden a un mismo lema: pasión por la excelencia.
Con presencia en más de una veintena de destinos, repartidos entre España y Bélgica, los establecimientos Silken han sido concebidos para ofrecer el mayor confort al cliente y crear una experiencia única. Destaca, así, la singularidad de sus alojamientos, con su diseño y arquitectura como valor añadido a su inquietud por ofrecer el mayor grado de satisfacción a sus visitantes, a través de la fusión entre creatividad –tanto en la estructura de los edificios como en el equipamiento de los espacios- y operatividad.
Originalidad y armonía son pilares que también forma parte del concepto de alojamientos que emanan de la filosofía de Hoteles Silken, ya que la cadena planteó desde sus inicios una estrategia basada en productos diferentes para el viajero, especialmente en lo que a diseño se refiere (los hoteles cuentan con la búsqueda de los valores estéticos como común denominador).
En la lista destacan nombres reseñables de la escena hotelera nacional, como es el Hotel Silken Gran Havana de Barcelona, cuyos vanguardistas interiores contrastan con su bella fachada clásica (el alojamiento se encuentra establecido en la histórica Casa Lorenzo Fradera). En Sevilla se alza el Hotel Silken Al-Andalus Palace, que cuenta con una planta Victorio &Luchino decorada con obras de arte, antigüedades y tapices entre otros elementos. No pasa desapercibido el Hotel Silken Diagonal, también en la Ciudad Condal, que se distingue por su moderna arquitectura y diseño, que firma el arquitecto JuliCapella. Madrid brilla en el mapa de Hoteles Silken con el establecimiento Puerta América, un proyecto único que ha reunido a 19 de los mejores estudios de arquitectura y diseñadores del mundo.
A ello se suman los avances tecnológicos implementados, que reflejan la preocupación de la cadena por el respeto al medio ambiente y la ecología. Así, se potencian el uso de materiales reciclables y aplicaciones de sistemas de control para evitar pérdidas de energía. Cabe destacar que Hoteles Silken fue la primera cadena a nivel mundial en emprender la sustitución integral de su iluminación convencional por lámparas de tecnología LED (más de 150.000 unidades serán sustituidas).
El impulso que Hoteles Silken realiza por la calidad queda reflejado en la Escuela Silken Alimentos y Bebidas (ESAB), puesta en marcha en 2011 y presidida por el prestigioso cocinero Martín Berasategui. Se trata del primer centro puesto en marcha por una cadena hotelera española para la formación continua de sus empleados, en su origen tanto en las áreas de Cocina y gestión de Sala, como con posterioridad para la formación del resto de áreas operativas. Allí, los alumnos adquieren nuevas ideas, habilidades culinarias (empleando el estilo del Chef, adaptado a la cultura gastronómica de cada región en la que los establecimientos tienen presencia y a la identidad de cada restaurante) y las competencias necesarias para el crecimiento personal y profesional, además de renovar sus actitudes y aptitudes en gestión de equipos y atención al cliente.
El lema ‘Pasión por la excelencia’ se extiende, así, a todas las áreas de la filosofía de Hoteles Silken. El gusto estético en los espacios, la confortabilidad del equipamiento, la practicidad de sus instalaciones y la calidad en la atención al cliente, amparada por una apuesta por la formación continua de los empleados de la cadena, forman un todo que emerge ante el viajero como la opción ideal entre toda la oferta para los viajes urbanos, ya sean por motivos de negocio o por escapadas de tiempo libre. Así es como la cadena consigue que el visitante se sienta como en casa.