Cada empleado fija la cuantía de la aportación que desea realizar cada año y MAPFRE aporta el doble de lo que aporta el empleado con los siguientes límites:
El plan de pensiones de MAPFRE registra ganancias no sólo en el último ejercicio sino también en la serie histórica. Así, por ejemplo, en los últimos cinco años, la revalorización anual de este plan es de cerca del 6%, una cifra significativa, sobre todo teniendo en cuenta la situación de los mercados en los últimos ejercicios.
Esta no es la única medida que MAPFRE incentiva para que sus empleados ahorren y puedan disfrutar de una buena jubilación en el momento en que finalicen su vida profesional. Para ello, cuenta también con un seguro de ahorro, en el que MAPFRE aporta inicialmente 300 euros anuales por empleado y en función de las aportaciones que cada trabajador realice a su plan de pensiones, se incrementa esa cantidad. Así, MAPFRE aporta 100 euros más si el empleado realiza una aportación al plan de pensiones de, al menos, 400 euros; y 200 euros más si la aportación del empleado al plan de pensiones es igual o superior a 1.000 euros.
Asimismo, la compañía tiene para sus empleados un seguro mixto de vida, accidentes y ahorro, que incluye, entre otras medidas, cobertura de fallecimiento y por incapacidad, así como un sistema de ahorro. En este seguro toda la aportación corre a cargo de MAPFRE, que destina anualmente una cantidad en función, entre otros, del salario y de la antigüedad de cada empleado.
MAPFRE dedicó en 2016 alrededor de 21 millones de euros a estas medidas de previsión social, de los que más de 14 millones correspondieron a aportaciones al plan de pensiones y el resto al seguro de ahorro y al de vida, accidentes y ahorro.