Dos ojos son sólo dos ojos
Los motivos, de lógica por los que depositar tantas responsabilidades en un empleado es una pésima idea, parecen no obstaculizar a algunos gerentes, que pretendiendo ahorrar sueldos, creen que esta opción es válida y sensata.
Las razones por las que contratar a una sola persona para desarrollar muchas tareas, ser verá traducida en:
-Falta de calidad en los trabajos
-Retrasos en las entregas
-Estrés por parte del empleado
-Rotación constante en el puesto
-Una clara falta de profesionalidad
Un profesional para cada puesto
A nadie se le caen los anillos por ayudar a un compañero a desempeñar una tarea para la que no estamos formados. A eso se le llama compañerismo, colaboración, sentido común.
Lo que resulta frustrante y un peligro para el futuro de muchos desempleados, es ponerse al frente de un departamento para el que no no está ni formado, ni preparado ni para el que tiene una mínima experiencia.
Un profesional del Marketing no tiene que conocer cómo desempeñar el trabajo de un administrativo. Y viceversa. Si la empresa prefiere abaratar los costes de un contrato a diversos profesionales, sería mejor optar por echar la persiana.
Conclusión
No sólo infravalora al trabajador que pretende contratar, sino que fulmina los puestos de otros que estarían encantados de ofrecer sus servicios y con ello, garantizar la solvencia en el resultado del trabajo final.
El contenido de este comunicado fue publicado primero en la web de Pymes y Autonomos
Nota de prensa Las empresas cometen graves errores contratando a personal para realizar múltiples tareas para las cuales no están especializados en comunicae.es