El autobús emplea asimismo un sistema de suministro energético externo de alta capacidad: alcanza una potencia máxima de 9 kW y ofrece una gran capacidad de suministro eléctrico, con 235 kWh. Ello permite que el Toyota FC Bus se puede emplear como fuente de alimentación en caso de catástrofes, por ejemplo en puntos de evacuación como polideportivos escolares, y su suministro eléctrico también se puede aprovechar para el uso de electrodomésticos. Las pruebas de desarrollo y demostración del Toyota FC Bus fueron realizadas como parte del Proyecto de Demostración de Sistemas Energéticos y Sociales de Nueva Generación —Next-Generation Energy and Social Systems Demonstration Project— del Ministerio de Economía, Comercio e Industria de Japón y el Programa de Investigación y Desarrollo en Tecnologías Bajas en Carbono —Low Carbon Technology Research and Development Program— del Ministerio de Medio Ambiente de Japón. Posteriormente se incluyeron en el Programa de Promoción de una Baja Carbonización del Transporte Local —Program for Promoting Low Carbonization of Local Transportation— del Ministerio de Territorio, Infraestructura, Transporte y Turismo de Japón.
El Grupo Toyota considera que el uso del hidrógeno es una potente fuente de energía para el futuro. Además de comercializar el Mirai, Toyota también ha impulsado el desarrollo tecnológico y de producto de autobuses de hidrógeno, carretillas elevadoras de pila de combustible y sistemas fijos de pila de combustible para su uso doméstico. De cara al futuro, el grupo acelerará los avances de forma unificada, para contribuir a la consecución de una sociedad basada en el hidrógeno.