«Desde la fabricación de productos hasta la relación con el cliente, pasando por el equipamiento o la cadena de suministro, estar al día con los últimos avances de la industria es, sin duda, un elemento diferenciador clave para el éxito de cualquier negocio», explica Emilio Rodríguez Jerez, director de Retail and Food Franchising (RFF), matriz de las marcas de restauración Piccolo Andrea y Andrea e i suoi Amici.
En opinión de este empresario, el tener presente que un negocio debe arrancar desde el primer momento con la vista puesta en progresar, y adaptarse «es fundamental. Incluso para aquellos dedicados a la restauración, que quizás se trate de uno de los sectores con mayor número de negocios tradicionales. Hasta en estos casos, la innovación ha llegado en forma de proveedores, logística o presencia en Internet».
Para Emilio Rodríguez, emprendedores e inversores conseguirán ventajas si apuestan por un sistema de colaboración como la franquicia al poner en marcha su negocio de restauración. «Porque el desempeño de una central franquiciadora no es servir cafés. El día a día del negocio ya ha sido probado y estandarizado con anterioridad a su expansión, por lo que su dedicación es asegurar la rentabilidad de toda la cadena».
«Pero ojo, porque no todos los conceptos son los adecuados para según qué perfiles, y muchos no lo son, a secas. La transparencia e historial de las marcas, por un lado, y una labor de investigación del propio interesado, por el otro, son imprescindibles para tener ciertas garantías de éxito», finaliza Emilio Rodríguez.