El presidente de ASAJA, que participó en una mesa redonda sobre ‘La PAC desde la perspectiva agraria y medioambiental’ junto a responsables de organizaciones ecologistas, hizo hincapié en la necesidad de que la PAC siga siendo como una prioridad básica en la agenda comunitaria porque debemos afrontar nuestro compromiso de alimentar a 500 millones de europeos y al mismo tiempo conservar el territorio y crear empleo en el medio rural y en nuestros pueblos, es decir lograr cohesionar económica, social y territorialmente la U.E.
Para esto necesitamos “una PAC consecuente con los tiempos que nos toca vivir, con mercados globalizados y extremadamente volátiles, que sea capaz de dar soluciones eficaces de gestión de mercados e imponer transparencia y equidad en las relaciones comerciales. Pero también queremos una PAC que promueva la innovación a favor del desarrollo productivo sostenible”, sin más limitaciones que las que la ciencia pueda imponer para proteger la salud humana, animal y medioambiental.
Cada vez son más los agricultores que conjugan prácticas de agricultura de conservación, como la siembra directa, con la última tecnología en agricultura de precisión, y la unión de ambas está dando muy buenos resultados en reducción de emisiones, fijación de carbono, ahorro de agua y costes de producción. Año tras año, crecen las Superficies de Interés Ecológico y las hectáreas dedicadas a pastos medioambientalmente sensibles porque pocas políticas agrarias hay en el mundo que tengan más en cuenta el medioambiente que la PAC a través una legislación muy rigurosa y conservacionista.
Por tanto, desde ASAJA entendemos que ciencia, tecnología y biotecnología son herramientas indispensables para afrontar los retos del siglo XXI, retos alimentarios, nutricionales y sanitarios y también retos medioambientales. Por eso defendemos una PAC sostenible desde el punto de vista ambiental pero también desde el punto de vista socio-económico y territorial.