«Por supuesto, dando una altísima calidad en todos ellos y en los productos que usamos», explica Marina Corpa, cofundadora de la marca junto a sus dos socias, su hermana Maribel Corpa, y Marina Assir. «Por otro lado, vimos que era un sector descuidado en algunos aspectos y que no tenía la imagen ni el reconocimiento que merecía. Quisimos crear un concepto donde los profesionales fueran cualificados, usar una estética científica y dar un servicio integral a la altura, algo que nos diferencia de muchísimos centros que abren y cierran cada mes».
Ahora se habla mucho de emprender, pero ustedes lo hicieron hace algo más de una década, y ante la inminente llegada de la crisis…
El mercado siempre ofrece oportunidades que explotar; y no es una cuestión de ser más o menos visionario, sino de saber ver negocio donde otros no aprecian más que peligro. Además, no hay que quejarse, sino hacer cosas.
Todo el mundo se lamenta de su situación, de su trabajo, de la crisis. Pues deja de dar vueltas sobre lo mismo, sal a la calle y cambia tu vida. Además, si pones en marcha un negocio haces algo bueno por los demás, como generar empleo y bienestar».
¿Cuándo y cómo pusieron en marcha la marca?
Mis dos socias y yo entramos en el mundo de la estética, la belleza y los masajes en el año 2005, un poco por casualidad. Hasta ese momento, la idea que tenía de cualquier tratamiento de este tipo estaba relacionada con los servicios de las peluquerías. En ese sentido, la percepción generalizada entre mis conocidos consistía en que el oficio de peluquera era fácil, rápido y hecho para cualquiera: no había que estudiar mucho y –por lo visto– daba para vivir.
La empresa la creamos al darnos cuenta de que el nicho de mercado de los masajes no estaba explotado, ni sus ventajas suficientemente difundidas en nuestro país como en culturas como la asiática. Por otra parte, se pretendía ofrecer servicios tradicionales de estética como la manicura, pedicura o depilación con cera pero ampliando la oferta a servicios más novedosos.
¿Qué tipo de tratamientos ofrece un Templo del Masaje?
Cualquiera de nuestros cinco centros abiertos fundamenta su actividad en dos áreas concretas: el masaje, o manipulaciones que se realizan a los músculos para conseguir su relajación mediante técnicas de calor y estiramientos, y un amplio abanico de servicios estéticos, los cuales se realizan dentro de la más estricta higiene y usando los productos de máxima calidad.
Los masajes los realizan quiromasajistas con formación y experiencia en diferentes especialidades: relajante, estético, terapéutico descontracturante, shiatsu, reflexología podal, ayurveda… Y pueden ser de tipo terapéutico (aromaterapia, descontracturante, deportivo, con piedras calientes, con ventosas…), de belleza y bienestar (drenaje linfático, facial, a embarazadas, anticelulítico-reafirmante, ‘body flow’…) o mediante técnicas orientales (shiatsu, reflexología podal, tailandés, ayurveda…).
En cuanto a los tratamientos de estética, la lista sería interminable: faciales, corporales, manicuras-pedicuras, depilaciones tradicionales…
Pero sí que habrá algún masaje que sea el más demandado…
Los clientes vienen con molestias por el estrés y las malas posturas. Quieren alivio. También últimamente aumenta el masaje en pareja para enamorados y el masaje para embarazadas.
Dado que cada cuerpo es diferente, cada persona tiene un grado de sensibilidad distinto y sobre todo, tiene unas preferencias en el momento de recibir un masaje, el terapeuta, irá ajustando el masaje a las preferencias de la persona de manera que cada masaje sea personalizado y único. Disponemos de un sinfín de técnicas y movimientos que, ajustándolos a las necesidades de cada cliente, harán que la sesión se convierta en un éxito.
¿Podría decirse que los masajes son “su fuerte”?
Claro, sin duda. El acercamiento con el cliente es integral. Asesoramos a quienes así nos lo solicitan, y lo que suelen desear es cómo mejorar sus molestias y que éstas desaparezcan lo antes posible o durante el mayor tiempo que sea viable. Y lo logramos a través de las correcciones posturales, como se ve en el ‘reality’ que hemos puesto en marcha, y con otros diagnósticos adaptados a cada cliente.
Lo cierto es que contamos ya con una pequeña legión de adictos a nuestros tratamientos terapéuticos y de relax, que consideran el cuidarse como algo irrenunciable. Siempre digo que la experiencia debe de resultarles muy grata, o de lo contrario más del 50% no repetiría con frecuencia. Lo cual tiene mérito, teniendo en cuenta que en este tiempo habremos practicado algo más de 185.000 tratamientos terapéuticos o de relax…
¿Qué resultados está teniendo el proyecto del 'reality'?
La gente tiene sobre todo dos reacciones: se ríe y se escandaliza. Se trata de cinco mujeres de edades comprendidas entre los 20 y los 45 años, y con trastornos como sobrepeso, celulitis o retención de líquidos, pasan por un diagnóstico en la cadena para decidir cuál de ellas recibirá un tratamiento corporal para cambiar su estilo de vida y solucionarlos, sin "recetas milagrosas".
Esperamos que lo vea más gente a medida que vayamos subiendo más capítulos. Creemos que tiene un gran potencial educativo sobre todo en lo que a imagen del sector se refiere. Porque escuchar «quiero solucionar todos mis problemas en dos días, y sin esfuerzo», como principal demanda de un perfil de cliente cada vez más frecuente, especialmente entre los 'millennials', demuestra el desconocimiento que existe sobre el mundo de la salud, el bienestar y la belleza. De ahí que pensáramos en esta iniciativa de divulgación, con un formato poco corriente, el de 'reality'.
Y es que, programas de televisión que se han popularizado en nuestro país, como 'Chapuzas estéticas' o 'Mi vida con 300 kilos', pero sobre todo la publicidad en la que sólo aparecen cuerpos perfectos, provocan –según explican desde la enseña– que el público perciba una imagen irreal de los resultados y exigencias de los tratamientos estéticos.
Queremos mostrar de forma totalmente transparente que las terapias para modelar la silueta funcionan, pero nosotros sólo ayudamos a conseguirlo; el éxito llega con el esfuerzo del cliente y, en muchas ocasiones, no sin dolor.
¿A cuánta gente esperan llegar con él?
Estamos en conversaciones con algunas productoras porque creemos que el formato es novedoso y puede llegar a tener cabida no solo en YouTube, sino en otros medios y canales.
¿Cómo ve su proyecto en el futuro?
Si fijamos la vista en los próximos años, los aspectos que habrá que tener en cuenta quien apueste por un concepto de negocio de salud, bienestar y belleza –porque van a marcar una diferencia entre los que nos quedemos y los que se vean obligados a abandonar–, en mi opinión son tres: ofrecer un servicio innovador, saber adaptar la tecnología a estos servicios y cuidar la fidelización del cliente.
Con servicio innovador me refiero concretamente a ir adaptando la gama de tratamientos a las nuevas demandas de productos "bio", a los servicios más enfocados a la salud integral, y a los últimos avances tecnológicos, todo ello combinado con las sólidas bases del saber ancestral. Esto es, estar a la última, con resultados mejores y más rápidos, y sin efectos negativos. Para ello la formación es imprescindible, y ahí también juegan un factor muy importante los laboratorios. Los socios que puedan ayudar en estos aspectos son la diferencia entre avanzar o quedarse en el mismo sitio.
Con respecto a la tecnología adaptada a los centros, quiero decir que al igual que en las tiendas de moda ya existen probadores virtuales, los centros de estética tienen que poner facilidades a sus clientes. Esto es, reservas y diagnósticos 'online', recomendaciones, seguimientos...
Sobre el último aspecto, la fidelización, es importante que el cliente se identifique con la marca. Esto ya lo dicen las que son grandes, pero para los pequeños comercios y cadenas quizás sea difícil de entender. Se consigue con la cercanía al cliente, tratando a cada uno de ellos como si fuera parte de una familia, y eso, además de lograrlo mediante el personal –la primera cara que ven–, se puede hacer con la tecnología y la comunicación.