El proyecto buscará el fortalecimiento de intervenciones afuera del ámbito escolar para promover el desarrollo infantil, teniendo como población objetivo a niños de 45 días a 4 años de edad que viven en situación de vulnerabilidad social, priorizando a los niños de las provincias del Noroeste y Noreste Argentino y del Gran Buenos Aires.
También se espera incrementar el acceso de esta población a centros de educación temprana para la primera infancia que cumplan con estándares de calidad; y desarrollar herramientas analíticas dirigidas a incrementar la efectividad de las intervenciones para mejorar las prácticas de crianza en las 200 localidades con mayores necesidades básicas del país.
Se financiará además la expansión y mejoramiento de la infraestructura educativa, incluyendo la construcción o ampliación de 98 jardines de infancia, y la adquisición de equipamiento pedagógico. Se apoyará también a la formación de equipos técnicos, supervisores, directores y docentes de la Provincia de Buenos Aires, introduciendo modelos pedagógicos innovadores en educación inicial y la implementación de una evaluación de la calidad de los ambientes de aprendizaje en los jardines.
El proyecto, que ha sido preparado de manera conjunta con el Ministerio de Educación y Deportes y el Ministerio de Desarrollo Social, se enmarca en la necesidad de cerrar las brechas de desarrollo en las dos regiones de mayor prevalencia de pobreza en Argentina. Se estima que 15 por ciento de los niños de entre 3 y 5 años del país no alcanzan el nivel de desarrollo esperable para su edad, siendo este rezago más pronunciado para los niños de hogares de menor nivel socioeconómico.
El préstamo del BID es a 25 años con un período de 5.5 años de gracia y una tasa de interés basada en la LIBOR con un aporte local de US$26 millones.