Motor

La gama S de Audi

La gama más amplia de versiones deportivas

Mariano García Viana | Domingo 23 de julio de 2017
Audi pone a disposición de sus clientes la gama más amplia de versiones deportivas S, que se caracterizan por una imagen que combina deportividad y elegancia, una dinámica de marcha ágil que no renuncia al confort y unas altas prestaciones con un consumo contenido.

En el Rally de San Remo de 1985, Walter Röhrl y Christian Geistdörfer obtienen una victoria histórica con el Audi Sport quattro S1, uno de los coches de rallies más potentes. Ese mismo año, Michèle Mouton participó en la subida a Pikes Peak con una evolución del quattro S1, donde obtuvo la victoria y estableció un nuevo récord. En 1990, Audi lanzó el S2 Coupé de 220 CV, cuyo motor era otra variante del cinco cilindros en línea turboalimentado del S1 de competición. En 1992 le siguió el S2 Avant y, un año más tarde, el S2 berlina, también con el cinco cilindros turbo pero con la potencia aumentada a 230 CV. Hasta 1995, se fabricaron 9.488 unidades del S2 en sus tres carrocerías. Desde entonces, las versiones S siempre han tenido un espacio en la gama de modelos de Audi. Del cinco cilindros turboalimentado se pasó al V6 biturbo del S4 en 1997. En 2003, llegó el motor V8 de 4,2 litros y la caja de cambios tiptronic. Paralelamente a las 24 Horas de Le Mans de 2012, en las que logró la victoria con el R18 e-tron quattro (diésel híbrido), Audi presentó el SQ5 TDI, primer SUV de la familia S y también primer S de Audi con motor diésel.

La evolución técnica ha sido una constante en cada modelo S. Los motores han ido ganado en rendimiento hasta llegar a los actuales, algunos con tecnologías como la inyección dual, nuevos ciclos de combustión o sobrealimentación eléctrica. La tracción total, una característica común en los modelos S, se ha ido refinando y adaptando a las diferentes configuraciones y exigencias de cada modelo. En el chasis, se han impuesto soluciones como la suspensión adaptativa, la dirección dinámica o los frenos carbocerámicos –disponibles de forma opcional en muchos de los modelos de la gama–. Las ayudas a la conducción, como el control de estabilidad, están diseñadas específicamente para que el conductor obtenga toda la seguridad que pueden brindar estos dispositivos y, a la vez, revelar el carácter dinámico que se espera de un modelo S. La oferta de carrocerías también ha crecido notablemente desde aquel primer Coupé: actualmente hay berlina de tres o cinco puertas, familiares, coupés, descapotables y SUV. El sistema Audi drive select ofrece posibilidades de configuración específicas para los modelo S, que el conductor puede personalizar según sus preferencias.

Un repaso a los modelos S deja constancia que Audi no se limita a proporcionar un suplemento de potencia y colocar algunos elementos distintivos en la carrocería. Cada modelo S es un proyecto en sí mismo en el que todos los elementos del automóvil, sinérgicamente, están concebidos y realizados para satisfacer las expectativas de los clientes que buscan un Audi más deportivo.

Audi S1 y S1 Sportback

Los Audi S1 y S1 Sportback constituyen la nueva punta de lanza deportiva de la serie de compactos A1, al tiempo que completan la oferta de modelos S de Audi en el segmento de los deportivos compactos. El S1 está disponible con dos carrocerías: de tres puertas o el Sportback de 5 puertas.

El compacto y ligero 2.0 TFSI proporciona una potencia máxima de 231 CV a 6.000 rpm, con un régimen máximo de giro de 6.800 rpm. El par máximo es 370 Nm, constante entre 1.600 y 3.000 rpm. El cuatro cilindros propulsa al Audi S1 de 0 a 100 km/h en 5,8 s (S1 Sportback: 5,9 s). Ambos pueden alcanzar una velocidad máxima de 250 km/h, y el consumo medio homologado es de 7 l/100 km (S1 Sportback: 7,1 l/100 km), equivalente a unas emisiones de CO2 de 162 g/km (S1 Sportback: 166 g/km). La caja de cambios manual de seis marchas tiene una carcasa de magnesio. Como todos los modelos S de Audi, también el Audi S1 y el S1 Sportback equipan tracción integral quattro. El embrague de regulación electrónica distribuye el par del motor entre los ejes en función de la situación de marcha y, en beneficio del reparto del peso, está situado en el eje trasero. En el modo deportivo o con el ESC desconectado permite realizar derrapes controlados sobre superficies con reducido coeficiente de fricción.

El reparto de la carga entre los ejes de 60:40 armoniza de forma extraordinaria con la tracción quattro. Como suspensión para las ruedas delanteras se utiliza una construcción de tipo McPherson con un bastidor auxiliar de acero de alta resistencia; con 1.474 mm, la vía es inusualmente ancha. La dirección está asistida por un motor eléctrico situado en la columna de la dirección que consume poca energía y tiene una relación de 14,8:1.

Audi S3, S3 Sportback, S3 Cabrio y S3 Sedan

La oferta de esta versión deportiva se despliega en cuatro carrocerías: S3 de tres puertas, Sportback, Sedan y Cabrio. Aunque cada uno con su estilo y desarrollado para un tipo de cliente distinto, todos ellos comparten elementos de diseño precisos y llamativos a la vista.

El 2.0 TFSI de la familia S3 genera una potencia de 310 CV y un par máximo de 400 Nm constantes entre 2.000 y 5.400 rpm. Los modelos S3 ofrecen un rendimiento superior y una revolucionaria eficiencia. El cuatro cilindros combina tecnologías de vanguardia: doble inyección (en la cámara de combustión y en el colector de admisión), integración del colector de escape en la culata, sistema de alzado variable de las válvulas Audi valvelift y un módulo de válvula rotativa para la gestión térmica. La eficiencia del 2.0 TFSI queda reflejada en las cifras de consumo medio: desde 6,4 l/100 km en el caso del Audi S3 de 3 puertas con cambio S tronic, equivalente a unas emisiones de CO2 de 146 g/km. Aun así, el Audi S3 es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en sólo 4,5 segundos.

Para las distintas versiones del S3 Audi ofrece una caja de cambios S tronic de siete marchas doble embrague. El conductor puede cambiar con la palanca de selección o con las levas del volante. Junto al modo manual, se dispone de dos modos de funcionamiento automático: el modo D para un consumo reducido y el modo S con cambios a un régimen mayor. El programa Launch Control regula la aceleración máxima con salida parada. El nuevo S3 se equipa de serie en todas las versiones con la tracción integral permanente quattro. El elemento principal es el embrague multidisco de nuevo desarrollo con control electrónico y accionamiento hidráulico. El compacto y robusto embrague se encuentra situado delante del diferencial del eje trasero. En condiciones normales, el embrague traslada la mayor parte de las fuerzas del motor a las ruedas delanteras. Si estas ruedas perdieran tracción, puede desviar los pares de forma continua hacia la parte trasera.

Audi S4 y S4 Avant

La oferta del Audi S4 comprende la berlina de cuatro puertas y el familiar Avant, ambos a la cabeza de su categoría con su impresionante rendimiento y con una eficiencia ejemplar. Audi ha transferido muchas de las tecnologías de la clase superior al S4. El S4 Avant combina un deportivo carácter con un elevado nivel de practicidad diaria. Su compartimento de equipajes ofrece una capacidad de carga de 505 litros, superior a la de sus competidores en el segmento Premium. El portón trasero cuenta con asistencia motorizada de serie. Un sensor opcional permite controlar su apertura o cierre como respuesta a un movimiento con el pie.

El motor turboalimentado 3.0 TFSI combina el rendimiento típico de un propulsor deportivo con nuevos niveles de eficiencia y también impresiona por su potencia, su cifra de par, por una respuesta instantánea y por un poderoso sonido. Desarrolla 354 CV y 500 Nm de par entre 1.370 y 4.500 rpm. El factor clave a la hora de conseguir esta eficiencia es el nuevo método de combustión utilizado en el V6 3.0 TFSI. Está basado en el denominado ciclo B y utiliza las válvulas de inyección de alta presión montadas en el centro de las cámaras de combustión. El turbocompresor tiene doble entrada, los gases de escape de las dos bancadas de cilindros fluyen por separado para evitar las interacciones no deseadas entre las dos corrientes de gases de escape. El turbocompresor está situado dentro de la V a 90 grados que forman las dos bancadas, con los colectores de escape están en la parte interior de las culatas y los de admisión en el lado exterior. Un completo rediseño del V6 TFSI ha permitido reducir su peso en 14 kg, hasta quedar solamente en 172 kg. Con este motor, el Audi S4 3.0 TFSI quattro tiptronic acelera de 0 a 100 km/h en 4,7 s (Audi S4 Avant: 4,9 s), y alcanza una velocidad máxima de 250 km/h, limitada electrónicamente. El consumo medio de combustible es de 7,5 l/100 km (S4 Avant: 7,6 l/100 km), con unas emisiones de CO2 de 170 g/km (S4 Avant: 175 g/km).

La caja de cambios tiptronic de ocho velocidades está integrada dentro del sistema de gestión térmica del motor y diseñada para que pueda funcionar el sistema start-stop. El conductor puede seleccionar los modos D, S o E y, además, utilizar las levas situadas en el volante para realizar los cambios de marcha de forma manual. Si el conductor levanta el pie del pedal del acelerador entre los 55 y los 160 km/h, la transmisión se desacopla, lo que permite ahorrar combustible (esto no sucede en el modo S). Si el vehículo lleva instalados el asistente predictivo de eficiencia opcional y el control de crucero adaptativo con Stop&Go, con el asistente de conducción en atascos incluido, la función de marcha libre por inercia se activará en cuanto sea posible. El sistema de tracción integral permanente quattro, actúa de forma asimétrica. En conducción normal, su diferencial central mecánico dirige el 60% del par hacia el eje trasero y el 40% al delantero. Si se produce algún deslizamiento en uno de los ejes, la mayor parte de la potencia se redirige rápidamente hacia el otro (puede llegar a pasar hasta un máximo del 85% tanto en el eje delantero como en el trasero).

Audi S5 Coupé, S5 Sportback y S5 Cabrio

El S5 se despliega en tres carrocerías: Coupé, Sportback y Cabrio. Tres propuestas muy distintas que tienen en común un diseño emocional y unas cualidades dinámicas deportivas, aplicadas a la elegancia del Coupé, la funcionalidad del Sportback y el atractivo del Cabrio.

Como en el S4, el corazón del nuevo Audi S5 Sportback es el nuevo 3.0 TFSI. Con inyección directa de gasolina y turbocompresor de doble entrada, rinde 354 CV de potencia y un par máximo de 500 Nm entre 1.370 y 4.500 rpm. También como en el S4, un completo rediseño del V6 TFSI ha permitido reducir su peso hasta 172 kg. El cárter, fabricado en aleación de aluminio mediante un sofisticado proceso de fundición a alta presión, integra las camisas de los cilindros de paredes delgadas realizadas en fundición gris. Junto con los segmentos de nuevo desarrollo para los pistones de aluminio, esto reduce las fricciones internas del motor. Con el 3.0 TFSI, el Audi S5 Coupé y el S5 Sportback aceleran de 0 a 100 km/h en 4,7 segundos. El consumo medio es de sólo 7,3 l de combustible por cada 100 km en el Coupé, y de 7,5 l/100 km en el Sportback. Las cifras para el Audi S5 Cabrio son respectivamente 5,1 segundos para la aceleración corta, y un consumo de 7,8 l/100 km de promedio.

En el nuevo Audi S5, la transmisión queda en manos de la rápida y suave tiptronic de ocho velocidades. Las primeras marchas son cortas para proporcionar una respuesta deportiva, mientras las últimas son largas, con el claro objetivo de reducir las revoluciones y bajar el consumo de gasolina. Cuando el conductor levanta el pie del acelerador entre 55 y 160 km/h, la transmisión se desacopla y deja al coche rodar libre por inercia para aumentar así la eficiencia en marcha. El sistema de tracción integral permanente quattro contribuye a hacer más deportiva la experiencia de conducción. En condiciones normales distribuye la potencia con una ligera deriva al eje posterior; siempre que sea necesario, la mayor parte de la fuerza se puede dirigir al eje con mejor capacidad de tracción. El control selectivo de par en cada rueda optimiza la dinámica y la estabilidad en las curvas rápidas con la mínima intervención en el sistema de frenos. El diferencial deportivo opcional distribuye activamente el par entre las ruedas traseras.

El Audi S5 está equipado con una suspensión deportiva S de nuevo desarrollo, que logra una óptima absorción de las fuerzas longitudinales y transversales. El sistema de conducción dinámica Audi drive select integra todo lo relativo a la amortiguación adaptativa CDC, la gestión del motor, de la dirección, el cambio tiptronic y el diferencial deportivo opcional. Esto permite al usuario controlar la conducción a través de diferentes modos.

Audi S6 y S6 Avant

Además de vehículos de representación, los Audi S6 y S6 Avant son automóviles deportivos para el uso cotidiano y el tiempo libre. Gracias a su inteligente concepto de construcción híbrida, la carrocería es extremadamente rígida y segura. Numerosos componentes de aluminio y acero endurecido en molde conforman la columna vertebral de un concepto de construcción ligera coherente. El confort es excelente, y el nivel de ruido en el habitáculo es extremadamente bajo.

Los Audi S6 y S6 Avant están equipados con el motor 4.0 TFSI, un V8 con sobrealimentación biturbo y una potencia de 450 CV. Uno de los elementos destacados en cuanto a eficiencia es el sistema Audi cylinder on demand, que en régimen de carga parcial desactiva cuatro cilindros. En estas fases, el sistema Active Noise Cancellation (ANC) emite en el habitáculo un sonido selectivo a través de los altavoces del equipo de audio que suprime las frecuencias no deseadas; a su vez, los soportes activos del motor amortiguan las oscilaciones de baja frecuencia. En las culatas del V8 biturbo, el lado de admisión está situado en el exterior y el lado de escape en el interior; este concepto permite diseñar recorridos de gases cortos con pérdidas de flujo mínimas y posibilita una respuesta espontánea. EL Audi S6 4.0 TFSI quattro S tronic acelera de 0 a 100 km/h en 4,4 segundos (S6 Avant: 4,6 s), y homologa un consumo medio desde 9,2 l/100 km (S6 Avant: 9,4 l/100 km), equivalente a unas emisiones de CO2 de 214 g/km (S6 Avant: 219 g/km). La velocidad máxima está limitada electrónicamente a 250 km/h.

Las fuerzas generadas por el motor 4.0 TFSI se transmiten a través de un cambio S tronic de siete velocidades con doble embrague. Si el sistema de conducción dinámica Audi drive select de serie se encuentra en el modo efficiency, el S tronic cambia a la marcha libre en cuanto el conductor levanta el pie del acelerador. La tracción integral permanente quattro funciona de manera puramente mecánica. En condiciones de marcha normales, su diferencial central autoblocante transfiere el 60 por ciento del par motor al eje trasero y el 40 por ciento al delantero. En caso necesario, también puede redistribuir las fuerzas sin retardo: en ese caso se transmite hasta un 70 por ciento al eje delantero y hasta un 85 por ciento al trasero. Este diferencial tiene un elevado coeficiente de bloqueo en los S6. La suspensión neumática adaptativa deportiva de serie rebaja 20 milímetros la carrocería. Las llantas son de 19 pulgadas con neumáticos 255/40 y las pinzas de los frenos de disco delanteros están pintadas en negro mate, con inscripciones S6.

Audi S7 Sportback

Potencia, dinamismo y deportividad elegante, junto con los más recientes avances de la técnica, hacen del Audi S7 Sportback un deportivo sobresaliente para el día a día, al no sacrificar confort ni eficiencia. Tiene una carrocería de cinco puertas y cuatro plazas de 4,98 m de longitud basada en el principio de construcción ultraligera de Audi, compuesta de aluminio en aproximadamente un 20%, por lo que su peso es alrededor de un 15% inferior que una construcción comparable fabricada completamente en acero.

La potencia del V8 biturbo 4.0 TFSI, el mismo que equipan los Audi S6 y S6 Avant, es de 450 CV a 5.500 rpm, con un par constante de 550 Nm entre 1.400 y 5.700 rpm. El sistema Audi cylinder on demand contribuye a la eficiencia que demuestra el Audi S7 Sportback, que homologa un consumo medio de combustible de 9,3 l/100 km. La velocidad máxima está limitada electrónicamente a 250 km/h, y la aceleración de 0 a 100 km/h se cubre en 4,6 segundos.

El S tronic de siete velocidades, un cambio de doble embrague de alta tecnología, destaca por su mínima fricción interna y por su elevado rendimiento. Una vez caliente, parte del refrigerante del motor fluye hasta el radiador de aceite del cambio para calentarlo y reducir las pérdidas por fricción. El modo completamente automático del S tronic de siete velocidades ofrece los programas D y S. Opcionalmente se dispone de un modo de cambio manual que el conductor realiza con la palanca de selección o con las levas de cambio del volante. La tracción total permanente quattro tiene un diferencial central autoblocante. En condiciones de marcha normales, el engranaje planetario puramente mecánico envía un 60% de la fuerza motriz al diferencial del eje trasero y un 40% al eje delantero. En el caso de que una rueda patine, traslada la mayor parte de las fuerzas al eje con la mejor tracción: hasta el 80% puede llegar al eje trasero y un máximo del 70% al delantero.

Como complemento de serie de la tracción quattro se incorpora un sistema de software inteligente: la gestión del par individual para cada rueda. Al circular por curvas a alta velocidad, su unidad de mando determina la distribución óptima de las fuerzas motrices. Si detecta que las ruedas en el interior de la curva están a punto de patinar, las frena muy suavemente: basta un sutil contacto de las pastillas de freno con el disco y una presión mínima. El trabajo de la gestión del par individual para cada rueda se ejecuta con suavidad y de manera continua. A petición del cliente Audi ofrece el diferencial trasero deportivo, que distribuye las fuerzas motrices entre las ruedas del tren trasero de forma variable y continua. Con la suspensión neumática adaptativa deportiva, que rebaja 10 mm la altura de carrocería, el Audi S7 Sportback combina un elevado confort con una dinámica maniobrabilidad.

Audi S8 y S8 plus

El Audi S8 ofrece prestaciones deportivas del más alto nivel. Una de las fortalezas de la gran berlina es su construcción ligera. Con una carrocería fabricada casi en su totalidad en aluminio según el concepto de construcción Audi Space Frame (ASF), pesa sólo 231 kg, la mejor cifra entre su competencia. Actualmente existen dos versiones: S8 y S8 plus, ambos con la carrocería de batalla normal.

El motor 4.0 TFSI V8 biturbo rinde una potencia máxima de 520 CV en el S8 y de 605 CV en el S8 Plus. La diferencia de potencia entre ambos radica en que el segundo tiene un turbocompresor con diferente geometría interna para mejorar la dinámica, distintas válvulas de escape y una gestión diferente de la sobrealimentación. El par máximo en el S8 es de 650 Nm entre 1.700 y 5.500 rpm, mientras que ese valor en el S8 Plus alcanza 700 Nm en condiciones normales y puede aumentar hasta los 750 Nm con la función overboost. Las prestaciones son impresionantes: si el Audi S8 es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 4,1 segundos, el S8 plus apenas necesita 3,8 segundos; en ambos casos la velocidad máxima se limita electrónicamente a 250 km/h, pero puede aumentarse opcionalmente hasta los 305 km/h en el caso del S8 plus, como equipamiento dentro del paquete dynamic opcional exclusivo de esta versión, que incluye además los frenos cerámicos. El consumo medio combinado es de 9,4 l/100 km para el S8, y de 9,9 para el S8 plus.

El tiptronic de ocho relaciones del S8 también aúna deportividad y eficiencia. Mantiene bajo el nivel de revoluciones, pero si el cliente lo desea cambia de marcha de un modo rápido y cómodo. Envía las fuerzas del motor al sistema de tracción quattro, que se complementa con el diferencial deportivo en el eje trasero. Entre los elementos destacados están la adaptive air suspensión sport y la dirección dinámica. Las ruedas de serie del S8 tienen un formato 265/40 en llantas de 20 pulgadas, mientras que en el S8 Plus son 275/35 en llantas de 21 pulgadas. Los discos de freno autoventilados tienen un diámetro de 400 mm delante y 365 mm detrás; las inscripciones S8 decoran las pinzas delanteras de seis pistones pintadas en negro. Como alternativa Audi monta discos cerámicos reforzados con fibras de carbono con pinzas en color gris antracita.

Audi TTS Coupé y TTS Roadster

Audi ofrece dos variantes del TTS: el TTS Coupé de 2+2 plazas o el TTS Roadster biplaza. Cada uno en su estilo, comparte elementos de diseño como unas líneas horizontales predominantes o la parrilla Singleframe ancha y plana.

La potencia del 2.0 TFSI llega hasta 310 CV y el par motor máximo es 380 Nm constantes entre 1.800 y 5.700 rpm. La culata se ha fabricado en una ligera aleación de silicio y aluminio con una gran resistencia mecánica y resistencia a las altas temperaturas. El gran turbocompresor, con una presión de sobrealimentación máxima de 1,2 bar, es capaz de comprimir hasta 1.000 kg de aire por hora. Un eficiente radiador del aire de admisión reduce drásticamente su temperatura. El Audi TTS 2.0 TFSI quattro S tronic acelera de 0 a 100 km/h en 4,6 segundos (4,9 s para la versión manual), con un consumo medio de 6,7 l/100 km, equivalente a unas emisiones de CO2 de 155 g/km (7,1 l/100 km y 164 g/km respectivamente con cambio manual). Las cifras de aceleración para el Audi TTS Roadster son las mismas que para el Coupé, con un consumo medio homologado de 6,9 l/100 km en la versión S tronic (7,3 l/100 km con cambio manual).

La caja de cambios puede ser manual o S tronic, de seis velocidades en ambos casos. El cambio manual tiene una ligera carcasa de magnesio y recorridos cortos de la palanca. El S tronic cambia en unas centésimas de segundo sin interrupción perceptible del empuje. Una ventaja del S tronic de seis marchas, además de su compacidad, es el posible funcionamiento en modo de "rueda libre" para ahorrar combustible. Se activa cuando el Audi drive select está en modo efficiency y el conductor levanta el pie del acelerador. También está disponible el programa de arranque para máxima aceleración launch control.

El TTS tiene un sistema de tracción total mediante un embrague multidisco central de accionamiento electrohidráulico optimizado especialmente para el TTS, que calcula la distribución de par ideal para cada situación de conducción, transmitiendo mayor potencia a las ruedas traseras para subrayar el carácter dinámico. El TTS tiene una carrocería rebajada 10 mm y, de serie, amortiguación Audi magnetic ride.

Audi SQ5 TFSI

La versión más deportiva de la familia Q5 hace gala más que nunca de la practicidad de un SUV con lo último en tecnología. Mide 4.671 mm de longitud, 1.893 mm de ancho y su altura es de 1.635 mm, con una distancia entre ejes de 2.824 mm. Su peso en vacío es de 1.995 kg, gracias a una carrocería está realizada con una combinación de aluminio y aceros de alta resistencia.

Equipa un motor V6 TFSI de 3 litros turboalimentado, con una potencia de 354 CV y un par constante de 500 Nm entre 1.370 y 4.500 rpm. El proceso de combustión de “ciclo B” está combinado con inyectores de alta presión situados en el centro de las cámaras de combustión y un turbocompresor de doble entrada. Con una fase de compresión acortada, el ciclo B permite utilizar una relación de compresión significativamente mayor. Bajo carga parcial, el sistema Audi valvelift permite una duración muy corta de la apertura de las válvulas de admisión de 130 grados de ángulo para el árbol de levas, junto a un cierre anticipado de las válvulas de admisión, lo que acorta la fase de admisión del motor. Con cargas más altas, el sistema cambia a un contorno del árbol de levas que permite tiempos de apertura más largos y mayor carrera de las válvulas. El peso del motor es de tan sólo 172 kilogramos. Con el V6 TFSI, el Audi SQ5 acelera de 0 a 100 km/h en 5,4 segundos, y alcanza una velocidad máxima limitada de 250 km/h, limitada electrónicamente. El consumo medio homologado es de 8,3 l/100 km, con unas emisiones de CO2 de 189 g/km.

Un suave y rápido cambio tiptronic de ocho velocidades transmite la potencia en el nuevo Audi SQ5. Siempre que se active la función en el Audi drive select, se conecta el modo de marcha por inercia tan pronto como el conductor levanta el pie del acelerador 55 y 160 km/h. Durante la conducción normal el sistema quattro distribuye la potencia del motor con un reparto ligeramente favorable al eje trasero. Cuando es necesario, manda potencia al eje delantero para mejorar la tracción. El sistema de control selectivo de par está activo sobre cualquier superficie. Al abordar una curva en conducción deportiva esta función de software se encarga de aplicar ligeramente los frenos a las ruedas interiores para que el coche se inscriba en la curva de forma más precisa. El diferencial trasero deportivo opcional envía más par a la rueda exterior cuando se acelera en curvas de radio particularmente cerrado.

Audi SQ7

El SQ7 no sólo destaca por ser el SUV diésel más potente del mercado, también por una serie de soluciones técnicas innovadoras que le confieren un rendimiento extraordinario, por prestaciones y por consumo, y por unas impresionantes cualidades dinámicas.

El V8 de 4.0 litros, 435 CV y 900 Nm tiene dos turbocompresores que se activan de forma selectiva: los gases de escape sólo fluyen hacia uno de ellos cuando en carga baja y media, en carga alta se activa el otro. Un compresor accionado de forma eléctrica (EPC), situado detrás del radiador del aire de sobrealimentación, es la solución para eliminar cualquier posible retraso de respuesta del turbocompresor, mejorando la respuesta. Para la alimentación del EPC se utiliza un subsistema eléctrico de alta potencia con 48 voltios, que cuenta con una segunda batería de iones de litio. Con el sistema Audi Valvelift System (AVS), introducido por primera vez en un motor diésel, hay dos contornos de leva por válvula. En el lado de la admisión, uno de ellos trabaja junto al EPC para ayudar al arranque, mientras el otro optimiza el llenado del cilindro a regímenes altos. En los rangos más bajos de velocidad del motor una válvula por cilindro permanece cerrada, de manera que la corriente de escape fluye hacia el turbocompresor activo. Cuando se incrementa la carga y la velocidad del motor, el sistema AVS abre la segunda válvula de escape, lo que dirige el flujo hacia el segundo turbocompresor. El gran SUV deportivo necesita apenas 4,8 segundos para alcanzar los 100 km/h con salida parada, y se conforma con un consumo medio de 7,2 l/100 km, equivalente a unas emisiones de CO2 de 189 g/km. La velocidad máxima está limitada a 250 km/h.

La caja de cambios tiptronic de ocho velocidades se ha rediseñado para ser extremadamente eficiente y rápida en sus transiciones entre marchas. También permite rodar en modo de marcha por inercia a altas velocidades, a régimen de ralentí. El diferencial central autoblocante es el corazón del sistema de tracción total permanente quattro. Es compacto, ligero e interactúa de forma muy precisa con el sistema de control de la suspensión.

La suspensión está realizada principalmente de aluminio. La dirección asistida electromecánica, el sistema de conducción dinámica Audi drive select y la suspensión neumática adaptativa son de serie, con una configuración más deportiva. Audi ofrece el SQ7 con un paquete dinámico opcional que comprende tres módulos de tecnología: diferencial deportivo, control antibalanceo electromecánico y dirección a las cuatro ruedas (eje trasero direccional).


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