Históricamente, Formentera ha sido un lugar de refugio en el que artistas de todo el mundo, especialmente a partir de la década de los sesenta, han encontrado inspiración en el mar, los colores de la naturaleza y el espíritu de la isla, haciendo florecer atractivos mercados que se han ido convirtiendo en importantes focos de atracción para el visitante.
Los Mercados de Artesanía de La Mola y Sant Ferran son en la actualidad los que concentran el mayor y más importante grupo de artesanos de Formentera, aunque existen otros mercados como los de Es Pujols, Sant Francesc y La Savina.
La Mola, ubicado en el punto más oriental de la isla, es uno de los principales referentes en la artesanía de las Pitiusas. Abierto los miércoles y domingos entre las 16:00 y las 22:00 horas, en él destacan artistas que realizan, exponen y venden su trabajo, muchas veces con materiales propios de la isla, como ramas de sabina, madera o pigmentos naturales.
Fundado en 1984, constituye uno de los lugares emblemáticos donde se respira el movimiento hippie, permanece abierto desde principios de mayo hasta octubre y entre los productos que se pueden encontrar sobresalen las piezas de arte y complementos destacando la joyería, pero también la ropa de diseño, telares, cestería y objetos de decoración. El mercado ofrece música en directo, espectáculos de malabares y otras actividades amenizan el mercado, lo que envuelve el lugar en un idílico halo bohemio y lo convierte en uno de los principales atractivos de la isla.
Por otro lado, el Mercado Artesano y Artístico de Sant Ferran permanece abierto de mayo a septiembre, de lunes a sábado, entre las 19:00 y las 00:00 horas. En él se pueden encontrar auténticas piezas de arte y artesanía de la isla con la personalidad de las manos que las han hecho y el carácter auténtico que tienen las obras “Producte fet a Formentera”. Un lujo artesano que ofrece la isla, en este mundo cada día más industrializado por la producción.