Lunes 16 de octubre de 2017
El auge de Internet ha promovido la comunicación online de las empresas, reduciendo la apuesta por otros métodos de networking. Sin embargo, la inversión en estrategias de comunicación offline, como las tarjetas de visita, aporta características imposibles de transmitir con otras tácticas.
La presencia online de empresas y profesionales ha supuesto una revolución en la comunicación entre profesionales y demandantes. El acceso a la web permite tanto a unos como a otros conocer las características de esta nueva relación laboral y qué resultados esperar de ella. A esto se ha de sumar la interacción a partir de redes sociales, los comentarios aportando opiniones o las puntuaciones. Ante esta perspectiva, la inversión en otra área que no sea la comunicación online podría presentarse como innecesaria. Sin embargo, un uso óptimo de esta puede afianzar la imagen como marca de una empresa ya que le otorga unas características propias y particulares, un ejemplo de ello son las tarjetas de visita.
Las tarjetas de visita son la opción más demandada por las pequeñas y las medianas empresas, ya que son un recordatorio físico del negocio, además, sus características pueden transmitir los valores y fundamentos de la marca, así como una relación de cercanía con los posibles clientes. En este punto se hace imprescindible la comunicación con una empresa especializada tanto en el diseño como en la impresión, como es la imprenta low cost Publikea, ya que a partir de un mensaje breve y un diseño atractivo se ha de lograr captar al comprador.
A esto se ha de sumar una característica integra de este método de networking que es la comunicación con otros profesionales, más que con los propios clientes. Las tarjetas son una forma de crear una red de contactos con trabajadores del sector y generan la posibilidad de recomendar a compañeros del área, con lo cual se demuestra también el carácter profesional del empresario y su conocimiento del mercado.
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