Las bolsas en Europa recuperan posiciones y cierran con subidas superiores al 2%. Han gustado los resultados corporativos de algunas empresas europeas que han presentado a primera hora, especialmente los de Commerzbank (+18%), que ha batido las previsiones del consenso en un momento en el que la banca alemana está más que nunca en tela de juicio por las dudas que viene generando Deutsche Bank.
El Ibex 35 acaba la última sesión de la semana en positivo (+2,25%), en 7.920,8 puntos, pero no logra eludir las caídas semanales, que quedan ni más ni menos que en un -6,71%.
Han estado hoy de enhorabuena Acerinox, ArcelorMittal y Repsol, que suben un +13,42%, +8,16% y +6,72% respectivamente.
El más bajista ha sido FCC (-1,60%), debido a la ampliación de capital que inicia hoy y que podría dejar a Carlos Slim con más de un 30% de las acciones, lo que le obligaría a lanzar una OPA sobre la totalidad de las acciones.
Los mercados continúan con mucha volatilidad, y los distintos tipos de activos experimentan subidas y bajadas según el viento que sople cada día. Si ayer el petróleo caía y el oro subía, hoy es al contrario; mientras ayer asistíamos al castigo del sector bancario, hoy las preocupaciones parecen haberse esfumado. Así, Credit Suisse repunta casi un +6%, Deutsche Bank cerca de un +12%, Société Générale +3,4%...
Deutsche Bank, en un intento de calmar los ánimos de los inversores, ha dicho que procederá a la recompra de 4.800 Mn€ de su deuda senior.
El oro desciende hasta 1.235$/onza, mientras el Brent sube con fuerza y se aleja del nivel de los 30$, moviéndose por encima de los 32$/barril.
La prima de riesgo española desciende hasta 144 puntos, fruto del repunte de la rentabilidad del bono alemán hasta 0,271% y de la caída del español hasta 1,73%%
Los datos macroeconómicos de la sesión han sido mixtos. En Europa, se confirma que Alemania creció un 0,3% en el 4T respecto al 3T y un 2,1% en términos interanuales, superando el 1,7% que esperaba el consenso. En un contexto internacional debilitado, es la demanda interna la que está tirando de la locomotora de Europa.
También hemos conocido el IPC de España, que tal y como se esperaba retrocedió un -0,3% en enero debido al menor coste de la electricidad y de los combustibles.
El PIB del conjunto de la eurozonacumple con las expectativas (+1,5% anual), pero la sorpresa negativa llega de la mano de la producción industrial, que cayó inesperadamente en diciembre (retroceso del -1,3% cuando el mercado estaba apostando por un avance del 0,7% anual).
En EEUU, las ventas minoristas adelantadas son en enero algo más fuertes de lo esperado, tanto en su dato global (+0,2% vs 0,1% estimado) como excluyendo la volátil partida de autos (+0,1% vs +0%).
La confianza del consumidor de la Universidad de Michigan queda por debajo de las previsiones, con una lectura en febrero de 90,7 vs 92,3 estimado y 92 anterior, y cayendo tanto en su componente de expectativas como en la percepción de la situación actual.
Wall Street permanecerá cerrado por festivo el lunes. En un indicador cada vez más seguido en todo el mundo, ese mismo lunes China publicará sus cifras de comercio exterior, coincidiendo con la reapertura de sus bolsas. El consenso pronostica una caída del -1,8% en las exportaciones (medidas en dólares) y un -3,6% en las importaciones.