Por un lado, se encuentra el huerto social de la Fundación MAP en Girona, una entidad que trabaja dando apoyo a los huertos de varios colegios de la comarca del Ripollés a través de personas con discapacidad que la asociación forma previamente en temas de horticultura. Este proyecto, que lleva en marcha más de 5 años, supone un extraordinario trabajo de sensibilización e inclusión de las personas con discapacidad dentro del mundo educativo. Actualmente colaboran con 7 centros educativos, abarcando un total de 490 alumnos/as de 3 a 12 años. Para seguir avanzando en este proyecto, necesitan un invernadero que les permita producir su propio plantel y alargar la temporada de cultivos para la Fundación MAP y las escuelas con las que trabajan.
El segundo proyecto lo lleva a cabo la Universidad Rovira i Virgili de Tarragona, que se propone “implantar valores en la universidad”. La iniciativa trata de potenciar la función social de la universidad pública y ofrecer un aprendizaje basado en el compromiso social y servicio público, atendiendo a las necesidades de los colectivos en riesgo de exclusión. Además, quiere involucrar a los diferentes ámbitos académicos que existen en la universidad para experimentar y explorar su aplicación práctica adaptada al contexto del proyecto.
El huerto universitario, que ya cuenta con 20 parcelas, necesita una aportación económica de 1.100 euros para ampliar una nueva terraza con 10 parcelas más, construir algunas casitas de madera para guardar las herramientas y realizar varias sesiones de formación. Además de los recursos económicos, el proyecto necesita de la colaboración de profesionales que donen su tiempo para la realización de actividades relacionadas con: trabajo social, magisterio, arte, fisioterapia, psicología y educación social.
La primera campaña lanzada en el portal Huertoseducativos.org logró reunir a finales de 2015 un total de 5.626 euros a través de 229 microdonaciones para los proyectos de la Escuela Ideo de Madrid y el CEIP Federico García Sanchiz de Valencia. La participación de familias, comunidad educativa, vecinos, empresas y asociaciones locales, junto a las donaciones de los clientes de Triodos Bank ha sido fundamental en el éxito de esta primera campaña.
El portal de crowdfunding puesto en marcha por la Fundación Triodos, proporciona alternativas a los centros educativos que cuentan con limitaciones de presupuesto para trabajar desde los huertos ecológicos como una herramienta educativa que fomenta el respeto ambiental y la conciencia sobre un consumo responsable y una alimentación sana.
Por este impulso de la economía social y colaborativa la Fundación Triodos ha sido galardonada a finales de 2015 en la I Edición de los Premios Expansión a las 50 Mejores Ideas Digitales por el portal web Huertoseducativos.org. Un portal que es posible además gracias a la colaboración de las personas e instituciones educativas que escriben en las secciones de Economía, Educación y Ecología compartiendo su conocimiento y experiencias.